Estruja tu imaginación, cariño, rebusca en tus sueños.
A ver si tengo suerte y en un rincón de ellos,
lejano y oscuro, tal vez olvidado, encuentres los míos,
y entonces seremos felices los dos.. y
yo dormiré a pierna suelta, también...
--Joaquín--
Paseaban de la mano los dos por una calle del casco viejo de la ciudad, padre e hijo. Por un instante el niño se para, bruscamente, mira a su progenitor y pregunta:
---Papá, ¿Qué es el comunismo?
Vio pintado en una pared desconchada el viejo eslogan "El capitalismo te hace esclavo del salario", que aún subsistía tras una manifestación de izquierdas.
El padre se extrañó de la pregunta, su hijo apenas tiene doce años. Lo entendió, no obstante, y le respondió con premura:
---Hijo, el comunismo es un sistema social basado en la propiedad común de los medios de producción y la eliminación de la propiedad privada.. En el comunismo todo es del estado y luego este reparte, aunque es pobreza lo que suele repartir. Es de carácter materialista, porque si se consienten ideas propias ya sean románticas, religiosas etc. sería imposible mantenerlo, enseguida empezarían las diferencias..
Pero el niño preguntón no se paró ahí, quiso saber más:
---¿Y quién lo inventó, Papi?
El padre exhaló un suspiro de agotamiento, pero no tuvo más cojones que responderle:
---El tipo que organizó, escribió y propagó las ideas comunistas fue un judío alemán del siglo XIX, llamado Karl Marx. Por eso al comunismo se le llama también marxismo. Todo lo recopiló en un libro llamado El Capital, donde recoge la base de su pensamiento comunista y proletario.. Es uno de los libros, sino más leído, si más vendido de la historia.
Pero no creáis que el niño plasta se quedó satisfecho, el cachondo pidió la opinión de su padre sobre el comunismo. Y este, aún extenuado, no tuvo más remedio que explicarle:
---Pepito, hijo, el sistema comunista, así tal cual, puro y duro, ha fracasado a lo largo de la historia cada vez que se ha implantado en algún sitio, porque es contra natura al hombre. Un hombre sin alicientes de superación, con la imposibilidad de ser más que el vecino, de tener más, no es nadie.. Nos guste o no, la idea de ser único, singular, exclusivo es consustancial al ser humano---concluyó
Por cierto, lo que no quiso contar el padre al niño pelma, es que el ideador de todo este cotarro, el muñidor del comunismo, Carlito Marx, fue un tipo de cuidado: pendenciero, putero, juerguista, y no sólo eso.. él, que predicaba la lucha de clases y, por supuesto, la supresión de criados o señores, era un burgués de alto copete. Tenía una criada a la que nunca le dio un sueldo y encima la preñó. Jamás reconoció al hijo ni ayudó a la madre..
Mientras pensaba esto, el padre apretó la mano de su hijo Pepito y aceleró el paso. Tenía ganas ya de llegar a casa y meterle mano a los garbanzos, antes de que el niño petardo volviera a preguntar..
En fin.
Joaquin
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