martes, 26 de abril de 2016

El disputado voto del señor X

La política es el arte de obtener el dinero de los ricos y el voto de los pobres con el pretexto de proteger a  los unos de los otros.
(Anónimo)  
  
 Necesito que alguien me asesore  sobre qué partido votar en las próximas elecciones generales anticipadas.
 Para que ese alguien lleve a cabo semejante acto de generosidad para conmigo debo contarle cómo pienso  realmente y cuál es mi filosofía de vida.
 Debo comenzar  diciéndole  que soy una persona normal,  de los llamados eufemísticamente…de a pié.  En algunos lugares se me podría englobar dentro de la denominada  clase media. ¡Claro!, que esto de clase media es un poco relativo porque cambian mucho los parámetros según el país del que se hable.
  A continuación  le iré facilitando  datos míos suficientes para que su opinión tenga  base  consistente.
 Soy nacido y criado en España con  ancestros de toda la vida de esta nacionalidad. He vivido la primera parte de mi existencia bajo la llamada dictablanda de Franco.  Lo de dictablanda  lo digo porque  todos sabemos que los primeros años  de la posguerra fueron durísimos en lo tocante a represión,  y necesidades perentorias de la población.  Sin embargo la parte que yo viví  fue la  más suave… la del desarrollismo y la  emigración a gran escala. También aquella de…Spain is different   con sus turistas de sol y playa.
 En esa España,  incrustaron en mi pensamiento,  y  a marchamartillo  que,   nuestro país era indivisible.  Y me hablaron además  de nuestras regiones y sus costumbres, de  sus  trajes típicos  y  de sus productos exclusivos de cada una de ellas. También aprendí  una historia, común, de héroes medievales,   y aquello  de que… en España no se ponía el sol.  Por lo tanto llevo en lo más profundo de mi alma ese substrato de español al uso.
 Más tarde,  muerto ya el dictador (hecho que coincidió con lo más lozano de mi juventud) nos explicaron lo bueno que era la democracia,  y la transición a ella tan perfecta que estábamos haciendo. Fuimos ejemplo para el mundo entero de nuestra reconciliación,  tan difícil después de una guerra civil. La aceptamos todos,  yo también, porque por primera vez en nuestra complicada  historia podríamos convivir como  un país civilizado con partidos políticos de todo signo y condición.
 Acepté así mismo (como casi todos mis compatriotas)  los nuevos aires de progreso y tolerancia. Por enumerar algunos diré que fueron  bienvenidos  por mi parte,  y sin despeinarme… el divorcio, los matrimonios de homosexuales, el aborto, la libertad de expresión, o la ley del tabaco,  en lo tocante a lo  social.  También, cómo no, en lo político…la España diversa con sus  autonomías, los idiomas co-oficiales, o incluso el derecho a declararse independentista, que de todo había.
 Me indigné mas tarde (como todos los españoles de buena condición)  con los atentados terroristas de la banda ETA, que nos asesinaban  a mansalva y sin pudor. Al estar residiendo ya en Madrid en  los llamados… años de plomo,  durante los cuales semana si  y otra también nos ponían o amenazaban con alguna bomba indiscriminada, padecí  el temor y los cotidianos sustos de sufrir sus efectos colaterales, que llamaban ellos.
 He presenciado,  perplejo,  en   estos últimos tiempos  una cadena de despropósitos, manifestaciones  ofensivas  y agravios  de ultranacionalistas periféricos sobre nuestro país  y parte de los españoles  (entre los que me incluyo) sin merecerlo.
 Me han acusado  algunos que… les robo, que les quito su libertad,  o que les he invadido su terruño  de manera inmisericorde. Han quemado mi bandera,  asesinado a compatriotas  (podíamos haber sido cualquiera de nosotros)  en nombre de un derecho de autodeterminación  que se salta, por cierto,  las reglas y leyes que nos dimos todos en la constitución.
 El sabio que me vaya a instruir debe saber también que mis deseos  son… absolutamente que a los españoles nos vaya muy bien,  a todos sin distinción. Que encuentren su trabajo preferido  los que lo busquen  y que nuestro nivel de vida y progreso sea de los más altos del mundo. Y cómo no,  que la sanidad y la educación naveguen  viento en popa. Por supuesto  que la corrupción política tan exagerada termine y  que los jueces hagan su trabajo en libertad e independencia.
 Advierto al  hipotético asesor que esté presto a socorrerme  que,  estoy a favor de la unidad de España porque entiendo que es la única forma de prosperar  y de que haya igualdad y bienestar para todos.
 A él le informo por mi parte  que,  podría depositar mi voto en la urna de Podemos porque se definen como un partido de izquierda que están  por  la igualdad de todos los españoles, pero veo su programa electoral  y resulta que están aliados con independentistas de todo signo  y ralea que lo único que los unen es su odio a España.
  Compruebo con estupor que sus dirigentes llaman hombre de paz a  A.Otegui,   un tipo que fue miembro,  nunca  arrepentido,  de  ETA  que… nos mataba por ser españoles, y  no por ser de derechas.  Constato que a su líder  P.Iglesias  le salen sarpullidos con  la prensa libre, salvo la que a él le encumbran.
  Advierto (a estas alturas)  a mi desconcertado  guía  que,  siempre tuve simpatías por el Psoe,  pero  (y por esto dudo en votarles) me sorprendo de su blandenguería actual para con los radicales nacionalistas,  y observo un afán desmesurado por pactar con los anteriores,  a cualquier precio.
 A cerca  del PP he de decirle que,  quizás sea el partido que  hoy en día mejor  defienda la  unidad del país y  la igualdad de todos los españoles, sean de la región que sean,  porque son los menos autonomistas. Soy de la opinión que,  a más autonomía  regional mayor desigualdad,  porque si le damos más poder  las más ricas despegaran, tendrán obviamente más  progreso y opulencia  que las pobres. Sin embargo me frena  la fascinación por este partido el hecho de que  estén  pringados  hasta las cejas de casos de corrupción y dudo que llegue a alcanzar mayoría a medio plazo.
 Me queda… amigo e improbable consejero,  ese nuevo partido surgido y cebado con los desencantados del bipartidismo y que le pusieron de nombre Ciudadanos. Tengo dudas razonables sobre  regalarles a ellos mi papeleta  porque los veo demasiado bisoños para que sepan coger el timón con la seguridad y fortaleza que este país necesita. Tengo que apostillar a su favor, no obstante,   que en lo tocante a la unidad el país parecen  no tener dudas.
 Con todo mi pensamiento  político-social abierto en canal y expuesto a valoración pública, espero que alguna persona sensata  y prudente,  con miras a conseguir un país mejor a corto y largo plazo me ayude. Que no se deje llevar este  por inquinas, odios o revanchas. Y que me oriente cómo colaborar para que esta nave llamada España vaya en  rumbo seguro hacia  una meta bien definida y deseada por la mayoría.
 En otra ocasión le hablare también de economía y otras menudencias. Mientras tanto aprovecharé estas largas jornadas de reflexión que nos esperan  para elegir lo más adecuado.
Dicho queda…
                                                                                          Joaquín Yerga
                                                                                            26/04/2016


sábado, 23 de abril de 2016

La insoportable levedad de lo inútil





Y sonrío y me callo porque, en el último extremo, uno tiene constancia de la inutilidad de todas las palabras.
(A. González)

El camión del chatarrero iba lleno a rebosar de muebles viejos y rotos que los vecinos del barrio suelen depositar junto a los pálidos cubos de basura. Hoy había sido un buen día, no se podían quejar.. 
A punto ya de terminar la jornada el que parecía ser el jefe ordenó a su achacoso ayudante que conducía el vehículo dar una última batida por la calle principal del distrito y así afanar cualquier cachivache de metal o madera que algún insolidario o esquivo morador dejara a última hora junto a la acera.
Los dos chatarreros suelen ir apartando los utensilios que pueden serles útiles, bien por su buen estado de conservación o por el metal del que estuviere fabricado para revenderlo después al peso. Al final de su agotadora jornada arrojan al vertedero lo inservible y acarrean hacía su atestado almacén todo lo provechoso para su interés y puedan sacar alguna pasta..
Ésa tarde ultimaban ya el recorrido cuando divisaron a lo lejos, en el último portal de esa última calle un objeto voluminoso y extraño. Pararon el camión que ya a toda patilla hacían enfilar hacia las afueras y bajaron de él confiados y dispuestos a chequear y hacerse cargo del trasto, pero...
A medida que se acercaban al objeto su asombro iba aumentando a cada paso que daban. Cuando lo tuvieron en sus manos desconcertados lo manosearon dándoles golpecitos con los nudillos de los dedos para ver de qué material estaba hecho. Jamás habían visto algo parecido en sus aperreadas vidas --pensaron--
Mientras miraban, fascinados, las proporciones del misterioso cacharro y comprobaban qué tipo de elementos lo componían, el que parecía el jefe insinuó que al ser de un plástico endurecido se trataría de un mueble de diseño. Sin embargo su ayudante, con ojos como platos ante su rareza, apostaba por que fuera un objeto meramente decorativo y susceptible, por tanto, de ser colgado.
Como era plano y uniforme como un considerable cuadro de pared, en donde en lugar del lienzo con la representación pictórica había algo parecido a un cristal, hizo recapacitar al que parecía ser el jefe, que pensó enseguida que su ayudante tenía razón y se trataba, posiblemente, de alguna pieza surrealista sacada de algún exótico museo --Éste tema lo conocen a fondo no en vano alguna vez han colaborado con las autoridades locales en el desalojo y limpieza de algún raro museo de la ciudad--
Y continuaron largo tiempo sin ponerse de acuerdo sobre el destino de la pieza. Volvieron a la carga con aventuradas y peregrinas sugerencias acerca de la utilidad del aparato, algunas de ellas inverosímiles. El debate, que fue subiendo de tono, hizo que poco a poco vecinos y transeúntes se fueran sumando a la discusión... Pasado ya un tiempo, una gran multitud de gente se fue agolpando alrededor del aparato, y no fueron pocos, por cierto, los que asombrados por el descubrimiento llegaron a opinar sobre la función del enigmático artefacto.
El tiempo transcurría y nadie se atrevía a decir nada definitivo, pero a raíz del revuelo formado en torno al objeto se presentó la policía municipal en el lugar de los hechos, que de inmediato intentó poner orden en el barullo, aunque ante su incapacidad para resolver el enigma optaron por dar aviso a las autoridades locales... 
El alcalde, arropado por algunos concejales, consejeros y expertos municipales, se presentó con premura en el lugar, pero tampoco fueron capaces aun después de largas horas de debates aclarar el asunto, así que decidieron por unanimidad conservarlo intacto y exponerlo en una de las glorietas principales de la ciudad.
La noticia como era de esperar corrió como la pólvora no tardando mucho en saltar a todos los medios informativos locales y nacionales. Expertos llegados de todo el país y algunos extranjeros, se acercaron en los días posteriores a la ciudad (que se hizo famosa después del hallazgo) con el propósito de estudiar a fondo ese objeto no identificado. Se llegaron a hacer análisis de todo tipo, incluso la famosa prueba del “carbono 14”, para comprobar su autenticidad y antigüedad definitiva, pero todo inútil, fue imposible alcanzar una conclusión razonable.
Después del impacto inicial de los acontecimientos y de mantenerse la noticia en portada ininterrumpidamente durante semanas en todos los medios, incluso hacerse viral en Twitter y Facebook, el eco de los hechos se han ido diluyendo y enfriando ante la impotencia de una resolución final... 
Ahora, meses después del curioso descubrimiento, se exhibe en la plaza más transitada de la ciudad a la espera de que aparezca su arrepentido dueño, o quizás alguien consiga descifrar el misterioso enigma sobre la utilidad de ese instrumento. Por cierto, según informes definitivos de los técnicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) se concluye que: Esa rara pieza es un rectángulo de treinta y dos pulgadas de contorno por diez centímetros de grosor y 15 kilogramos de peso, con varios pulsadores en la parte inferior de un lateral y una especie de cable para conectarlo a la corriente eléctrica.
A pesar de la importancia de los hechos y después de haber sido nombrados “Hijos predilectos de la ciudad” el que parece ser el jefe de los chatarreros y su ayudante prosiguen con su  ardua pero necesaria labor de recogida de trastos inútiles, liberando así las calles de suciedad y abandono. Eso sí, desde el día que encontraron ese aparato notan una cierta condescendencia y simpatía hacia ellos por parte de los aun sorprendidos ciudadanos.

            Joaquín




lunes, 11 de abril de 2016

Libertad o sumisión

Prefiero morir apuñalado en el metro de Nueva York que de aburrimiento en las calles de Moscú.
(Felipe González)

 Por empezar por algo sólido,  digamos  que hay tres sistemas  troncales  con los que los individuos convivimos en el mundo llamado… occidental,  y que son fundamentales. De ellos depende en gran medida  nuestra calidad de vida.
 Estas  tres maneras  generalistas (comunismo, capitalismo y medio pensionista), y sus derivadas,  están sujetas  todas ellas  al tipo  de gobierno que tengamos. Me explico…
 Si el gobierno entiende (bien por  las bravas o por sufragio universal)  que lo correcto para evitar desigualdades  entre los individuos lo mejor es que todas las propiedades y los sistemas de producción estén en manos de él y que luego sea este el  que  distribuya los bienes,   estaríamos hablando de sistema comunista. Normalmente este tipo de gobierno  se impone a través de alguna revolución y los dirigentes que han accedido a él se perpetúan  en el poder.
 Esta forma  de entender la convivencia  (todos los sistemas influyen de manera determinante en nuestra manera de vivir)  tiene la particularidad de que suena muy bien. Teóricamente es una pulsión muy humana. Poca  gente estaría en contra de un sistema  que  asegure que vamos a ser todos iguales,  que no va a ver ricos y pobres.  Luego viene la realidad,  y la experiencia no dice que es una utopía porque sencillamente es  un plan irrealizable. Como decía alguien,  todos nacemos iguales pero es la última vez que lo somos. Afortunadamente cada individuo es único e inimitable por lo tanto la tabla rasa es imposible.
 El pragmatismo y la experiencia no asegura  que, en cuanto  la parte productiva de un país  depende de un estado enorme (todos son funcionarios) nadie se responsabiliza de nada. Al no tener incentivos y estar  todos igual de retribuidos y  valorados, la mayoría de los individuos se vuelven apáticos e improductivos con lo que la sociedad no prospera. Nadie se esfuerza por innovar ni por salirse el guion establecido.
 El régimen comunista (por cautela no se permite a la gente expresarse en las urnas, por lo tanto es un régimen) ha estado en uso  y vigor en diferentes países y a lo largo de muchas  décadas. El principal espejo en donde se miraban estos regímenes era la antigua Unión Soviética, estructurada de manera marxista.  Después de estos años y en comparación con el sistema opuesto (el capitalista) se demostró como un rotundo fracaso. La mayoría de la gente vivía mucho peor y con un nivel tecnológico caduco. En cuanto  aflojó  la represión se derrumbó estrepitosamente y  la población acogió el capitalismo,  con sus virtudes y defectos,  de manera alborozada.
 Ningún  país que haya vivido en el comunismo  más genuino, y haya salido de él,  ha vuelto a las andadas, más bien al contrario  se ha multiplicado en la  población el  sentimiento  más anticomunista.
  Si de libertades individuales  o de información hablamos  estos sistemas están muy escasos de ellas, le va en ello su  supervivencia.
 Otra particularidad que tienen  estos regímenes  es que al no haber medios  de información independientes  es muy difícil valorar la situación real de la población  y de sus  estructuras socioeconómicas. Países  en el mundo que sobreviven con gobiernos comunistas los hay y de diversa  índole. En Cuba,  sin ir más lejos, sabemos y conocemos, más o menos,  la escasez  de productos medianamente manufacturados y cómo la población sobrevive dignamente.  Haciendo una extrapolación  entre países y épocas seria… tal y como vivíamos en España en los años sesenta.
 Posiblemente allá en Cuba no haya de los llamados… sin techos, desplazados  o mendigos  del tipo que genera  el modelo capitalista.  Lógicamente  influye en esta deficiencia  social la fuerte competencia  productiva  que se da en un mundo libre con el inevitable desplazamiento de los más débiles. Aun así,   incluso este minoritario sector de la población (5%) debería estar protegido en sus necesidades básicas en un sistema intermedio, es decir en un capitalismo atenuado como el europeo.
 En China, otro de los países con el comunismo como sistema  de gobierno ( lo implantó Mao hace ya más de  sesenta años)  ha derivado a un modelo dual. Este modelo es,  políticamente  totalitario, es decir, sin libertad de prensa, sin posibilidad de elegir gobierno y con un férreo control policial de la población, sin embargo en lo económico permite la propiedad privada y de libre mercado, con lo que este inmenso país ha prosperado de una manera formidable.
 Entiendo que el éxito de los chinos radica en que coge lo más efectivo de cada sistema. Del marxismo su fuerte control en los medios y en las calles procurando una práctica seguridad,  y sin oposición que les rebata.  Del capitalismo la productividad de la propiedad privada.
Bien es verdad que esta prosperidad tiene sus penitencias, entre ellas,  un deterioro del medio ambiente, una explotación de la masa trabajadora y un viaje acelerado a la manera occidental de vivir. Aun así, en cuanto el nivel de vida vaya llegando a un tope aceptable todas estas deficiencias  irán mejorando y  los chinos alcanzaran el estado de bienestar europeo más  pronto que tarde. Pasó en Europa hace cien años.
 El  marxismo-leninismo debe triunfar solo en sociedades  muy primitivas y culturalmente atrasadas en donde la sumisión y  pasividad de lo colectivo camufla lo innovador y creador  de lo individual. El país sometido a un modelo de esas características termina siendo una sociedad aborregada y delatora en donde impera el pasotismo, la inanición y el atraso.
 Con el pretexto de la igualdad lo que realmente sucede es  que la Nomenclatura (los jefes) son los verdaderos beneficiarios  de las prebendas del estado. Un estado en donde al final  consiguen realizar  lo que tanto se han empeñado… que no haya  ricos. Ya seremos todos  iguales…iguales de pobres ¡claro!
 Luego está lo del capitalismo. A priori suena muy mal  pero resulta que en el capitalismo hemos vivido siempre los españoles y la mayoría de los países desarrollados del mundo, y en él estamos.
  Un capitalismo, no salvaje, moderadamente controlado por autoridades independientes para  que realmente funcione la libertad de mercado y no haya monopolios abusivos (socialdemocracia) a mi modesto entender, seria el apetecible. Este sistema es el que está asociado a una mayor democracia y con él,  y lo digo por la experiencia acumulada de siglos,  se benefician el 80% de la población (clase media). Luego  está  ese 10% de marginados (en mayor o en menor grado) o expulsados del sistema. Esto último es uno de los hándicaps que  debemos solucionar. En un sistema comunista se invierten los términos para que un 5% vivan bien (Nomenclatura y arrimados) el resto 85% sobreviven  casi en la penuria.
Por cierto,  el 100% de la ayuda al tercer mundo proviene de países capitalistas. Y no es opinión…
                                                                                                            Joaquín Yerga
                                                                                                               11/04/2016