jueves, 31 de marzo de 2022

Lo más grandioso de Fuente de Cantos

                                                                                        


Deshoja las flores que al sentido

engañan con color y aroma;

arranca las hojas que roban la savia;

corta las raíces que a la tierra

arañan, y hasta, si es preciso,

cercena las ramas que aunque creas

que buscan el cielo, sólo

rasgan la atmósfera diáfana.

¡Haz que quede tan sólo del árbol

de tu vida, el alma!

--Luis Guarner--



Es preceptivo hablar de nuestra Parroquia, nuestra mayor joya arquitectónica, con diferencia. Por lo tanto conviene saberlo todo de ella.

Y debéis saber que lo primero que se levantó en la explanada que hoy ocupa la iglesia fue una pequeña ermita erigida en honor a no sabemos quién. Luego y debido a una epidemia de peste la pusimos bajo la advocación de San Roque. Esto último tuvo que ser al principio del siglo XIV, es decir, un siglo despues de expulsar a los moros.

En el siglo XV se tira la antigua ermita y se construye una señora iglesia de estilo gótico, ya de más enjundia y dedicada a Santa María la Mayor. No obstante un siglo más tarde nos olvidamos de Santa María y la ponemos a la advocación de Nuestra Señora de la Granada ¿Copiamos a Llerena? Todo apunta a que sí.

Pasa el tiempo y ésta iglesia gótica se hace vieja y se nos queda pequeña. Además el pueblo ha crecido, así que ponemos en marcha la actual. Para ello aprovechamos alguna cosa de la vieja y agrandamos otras, y de paso levantamos la hermosa torre que hoy contemplamos. Esto ocurría ya a finales del siglo XVIII, tiempos de Carlos III.

La nueva iglesia tardó en construirse ocho años. El suelo era de tierra entonces y dentro se enterraban a los muertos del pueblo. Pero, hete aquí que, por salubridad, salió la nueva orden de enterrar al aire libre; así que, se buscó por los alrededores del templo un lugar que hiciera de cementerio, y ahí se empezaron a enterrar los primeros fuentecanteños; María Guerrero, fue la primera fuentecanteña que quedó sepultada extramuros de la Parroquia; fue el 25 de septiembre de 1741. ¡Vete a saber dónde estarán sus restos! 

Por cierto, que sepáis que cuando el interior de la Parroquia hacía de cementerio, los adultos eran sepultados en la parte delantera, cerca del altar, y los niños en la parte de atrás. 

En fin. Mañana más.

Joaquín

                                                                            

            Fachada sur de la parroquia. La mitad derecha es lo que queda de la antigua iglesia gótica

                                                                          

Torre neoclásica de 36 metros de altura. Se terminó de construir en 1799. Tiene cuatro campanas y su interior está dispuesto en rampas con corta-vueltas para acortar el camino a los más osados que se atreven a saltar. La puerta que se ve es la orientada al oeste, llamada Puerta del Perdón.

                                                                            

 Interior de la parroquia con su retablo al fondo, magnífica obra de arte del barroco. La puerta de la derecha, la principal de la parroquia, da al sur (Ayuntamiento) y se llama San Miguel.

                                                                            

 
Interior de la parroquia. A la dcha. un confesionario y a la izda. de la foto la Puerta Norte, llamada Rafael, quedó dañada cuando la guerra y está reconstruida..

                                                                              

                                                             Órgano de la parroquia

                                                                            

                             Baptisterio de la parroquia, con su pila de bautismo del siglo XVI

                                                                          

Pila de bautismo donde nos hemos bautizado todos, incluido Zurbarán. Al fondo el cuadro confeccionado con azulejos sevillanos que representa a San Juan Bautista en el Jordán.

Sobrevivir bien vale una misa.

                                                                                      



Alguien, cuando pase el tiempo

y encuentre mi calavera,

el tiro que no me he dado

buscará en la sien entera.


Y en las cuencas de mis ojos

querrá adivinar tal vez

lo que vi... cuando veía

y que yo nunca miré.


A ese piadoso erudito

que busque el paso borrado

de la vida de un cansado

de si mismo. Quiero dar

esta confesión tardía

resuelta en un epitafio

pues que puedo todavía:


Vino, venció. Fue vencido

en lo que quiso vencer.

Escribió, y en el tintero

dejó lo que quiso hacer

por hacer lo que quisieron:

Y se fue.

--César G. Ruano--



Mirad qué historia más curiosa. Enrique de Navarra, el que luego sería coronado rey de Francia con el nombre de Enrique IV, fue bautizado en la fe católica de su padre.

A los 6 años abrazó la fe protestante de su madre Juana de Albret, pero a los 8 nuevamente fue declarado católico, solo que unos meses después volvió a reingresar en las filas del protestantismo.

Y no solo eso, sino que desde los 19 años hasta su muerte cambió de religión al menos seis veces más. Este rey fue el que dijo aquella frase tan conocida de: “París bien vale una misa” aludiendo a que por el trono de Francia se cambiaba de religión las veces que fueran necesarias.

Al final murió, el pobre, asesinado por un ferviente católico; se ve que empezó mal y a fuerza de cambiar de chaqueta tantas veces acabó peor...

De todas maneras la época de Enrique IV fue horrible en cuanto a religión se refiere. Eran los tiempos de las guerras religiosas después de que Lutero iniciara el gran cisma protestante. Media Europa siguió siendo católica y la otra media se hizo protestante, y además se disputaban la hegemonía cada tres por cuatro como ocurría en Francia.

Por todo eso éste avispado rey iba y venía según soplara el viento, pero no tuvo suerte.

Joaquín


martes, 29 de marzo de 2022

Un experimento fallido

                                                                                         



Hay tanto amor en mi alma que no queda

ni el rincón más estrecho para el odio.

¿Dónde quieres que ponga los rencores

que tus vilezas engendrar podrían?

Impasible no soy: todo lo siento,

lo sufro todo... pero como el niño

a quien hacen llorar, en cuanto mira

un juguete delante de sus ojos

se consuela, sonríe,

y la ávidas manos

tiende hacia él sin recordar la pena.

--Amado Nervo--



Hubo una vez un rey, Gustavo III, en ese país tan extraordinario y pionero del bienestar social que fue Suecia, que estaba convencido de que el café era venenoso.

Éste monarca de finales del siglo XVIII, obligó a tomarlo todos los días a un criminal, mientras otro reo de la misma prisión bebía solo té. Supervisaba todo el proceso una comisión de médicos para valorar los resultados. Pero nunca hubo un experimento más desastroso que éste. Veréis que cúmulo de despropósitos se dio..

Primero murieron los miembros de la comisión, después el rey fue asesinado en un atentado mortal, a continuación estiró la pata el reo del té a los 83 años, y ya por último murió el pobre de café, y bien a gusto, supongo. 

Está claro que a los suecos les salió mal el experimento del café, pero no otros que han hecho despues. Precisamente acabo de ver uno norteamericano muy serio que nos asegura que tomar dos o tres tazas de cafés al día es estupendo para todo.

Por cierto, los suecos han despabilado, no hay más que ver el invento ese del Ikea.

Joaquín




Las campanas de Fuente de Cantos..

                                                                         



¡Oh, triste tarde!. Entre tu gasa fría,

viste con qué solícitos cuidados

cargó el sillón de Eulalia la sombría

tropa de sus alegres convidados.

Cuando dejamos sobre el blanco lecho

el cuerpo de la dulce soñadora,

vimos que le brillaba sobre el pecho

una medalla de Nuestra Señora.

La estancia se llenó de los rumores

de la muerte. Piadosas, nuestras manos,

sobre el lecho de espumas echaron flores...

Y la marquesa Eulalia parecía

una flor de jardines ultrahumanos

que entre flores del mundo se escondía.

--Agustín Acosta--



Reconozcámoslo, andamos sobraos en Fuente de Cantos de monumentos religiosos; sin duda, uno de los pueblos de la provincia de Badajoz con más y mejores.. Ahí tenemos la Parroquia, el convento del Carmen y el de San Diego, las ermitas de la Hermosa, San Juan, Santo Cristo, San Isidro, etc. pero, ¿y las campanas?, pues...

¿Sabéis como se llamaban las campanas de la Torre Vieja de nuestra parroquia? Había tres: la más grande María, la chica Caterina y el esquilón Margarita.. De siglo XVI, nada menos, databan las tres.. ¿Dónde irían a parar?.. Apuesto que se fundieron para...

Cuando hicieron la Torre actual, en el siglo XVIII, fabricaron y colocaron las cuatro campanas que aún oímos en todo Fuente de Cantos.. Conste que cuando una campana se fabricaba y colocaba en su campanario eran nombradas y bendecidas por el obispo..

Mirad las fotos..                                                                                                                                              

 cara sur de la torre, con su campana llamada San Bartolomé, la mayor de las cuatro.(Plaza del  Ayuntamiento)

                                                                        

           cara norte de la torre, su campana se llama San Antón (calle Francisco. Asuar)

                                                                         

           cara oeste de la torre, su campana se llama Santa María y Santa Ana (calle los Frailes)

                                                                             

                 cara este de la torre, su campana se llama Santa Filomena (calle Llerena)


Sin embargo monumentos civiles dignos de consideración contamos con muy pocos. Ahí lleváis algunos..

                                                                                                 

           a la izda. casa del Ave María, del siglo XVII, posiblemente la más antigua del pueblo

                                                                                                   

 Ayuntamiento, siempre ha ocupado el mismo lugar. Ha sido remodelado en varias ocasiones, el edificio que vemos hoy en día data de mitad del siglo XIX

                                                                                

casa señorial del Altozano, de estilo sevillano. Perteneció a los herederos del Conde de la Corte. Se construyó en 1929 por el arquitecto sevillano, Aníbal González, el mismo que diseñó la Plaza de España de Sevilla.

                                                                          

 casa señorial de estilo romano, en la calle Martínez, una de las más grandes del pueblo, ahora con nuevo dueño y restaurada.

                                                                       

a la izda. de la foto casa señorial de estilo sevillano, diseñada por el estudio de arquitectura de Aníbal González. primer tercio del siglo XX.

                                                                       

antigua fábrica de harina, La Paz, llamada así por inaugurarse al acabar la Primera Guerra Mundial. Hoy Mesón "la fábrica"..

                                                                        

                       cementerio San Fernando, construido en 1879 para sustituir al de San Juan


En fin, mañana más fotos y más explicaciones..

Joaquín










sábado, 26 de marzo de 2022

Cómo reinventarse la historia..

                                                                                  



Sábado fue, y capricho el beso dado,
capricho de varón, audaz y fino,
mas fue dulce el capricho masculino
a este mi corazón, lobezno alado.

No es que crea, no creo, si inclinado
sobre mis manos te sentí divino,
y me embriagué. Comprendo que este vino
no es para mí, mas juega y rueda el dado.

Yo soy esa mujer que vive alerta,
tú el tremendo varón que se despierta
en un torrente que se ensancha en río,

y más se encrespa mientras corre y poda.
Ah, me resisto, más me tiene toda,
tú, que nunca serás del todo mío.

--Alfonsina Storni--



Esto de: “ganar batallas después de muerto” seguro que sabéis que alude a Rodrigo Díaz de Vivar, llamado el “Cid Campeador”.

A éste héroe castellano, tan nuestro, le tenían pánico los moros porque les había ganado en varias batallas por su valentía y arrojo, y también ¡claro! por sus poderosas mesnadas propias (ejercito).

El Cid había dejado dicho a sus íntimos, a su muerte, que, en caso de que fuesen las cosas mal con los moros de Valencia, ciudad que los cristianos intentaban recuperar, embalsamaran su cuerpo y bien sujeto a la montura de su caballo lo pusiesen al frente de sus huestes para intimidar a los enemigos... y..

¡Mano de santo!.. fueron los suyos los que, creyendo que había vuelto el mismísimo Cid del más allá, se envalentonaron y henchidos de coraje y fuerza derrotaron a los moros del rey Búcar de Valencia.

Recuerdo para el que no lo sepa que a ésa bonita ciudad mediterránea siempre se le ha llamado “Valencia del Cid”. Claro, que ahora con los nacionalismos exacerbados igual quieren reinventarse la historia y tal vez se les ocurra denominarla “Valencia de Sant Jaume” por lo de Jaime I “El Conquistador” ése rey catalán que después repobló la zona.

En fin, todo se andará..

Joaquín




viernes, 25 de marzo de 2022

Fuente de Cantos, se repite la historía..

                                                                                              



 Hay flores que son estrellas,

hay estrellas que son almas,

y almas de luz y aroma

que iluminan y embalsaman.

Pero las flores se mustian

y las estrellas se apagan,

y el barro vuelve a la tierra

y eterna sólo es el alma.

--Marcos R. Blanco--


Fuente de Cantos en el siglo XV, que es cuando empezamos a tener las primeras noticias, no era tan extenso como lo es hoy en día, ni mucho menos. Las casas se apretujaban sobre unas cuantas calles estrechas que daban forma estrellada al pueblo, pues todas se expandían a partir de la iglesia y su plaza central. 

La calle Santa Ana, que ya no existe, se cree que era la actual calle Olmo. Se denominaba Santa Ana por una ermita que había en el lugar y que se edificó sobre una vieja sinagoga judía

La calle OlmoEsperanza y Cristo eran en esa fecha el barrio judío (judería). Además ésta es la zona más antigua del pueblo y aquí vivía la gente más importante en aquellos siglos. Lo de, calle Olmo, procede de un árbol enorme, Olmón, que había en la plaza del mismo nombre. A su lado una alberca servía de abrevadero para el ganado..

En aquella lejana época, año 1.501, unos cuatro mil vecinos poblaban nuestro casco urbano. Pero, fijaos: unos pocos años más tarde y debido a sequías o graves inundaciones el pueblo se despobló incomprensiblemente. Se calcula que al menos un 40% de los habitantes, o murió a consecuencias de hambres y enfermedades o abandonó el pueblo para siempre. A penas unos 2.400 vecinos quedaron..

Pasados los años la cosa mejoró y el pueblo volvió a recuperarse de tal forma que, según el censo de 1.588, tiempos de la Armada Invencible y de Felipe II, y tiempos también en los que nació nuestro más ilustre vecino, Francisco de Zurbarán, Fuente de Cantos contaba ya con 5.500 fuentecanteños y fuentecanteñas, es decir, más de los que tenemos ahora, quinientos años despues..

En fin

Joaquín

                                                                          

                                                                  calle San Roque

                                                                             

                                                    plaza de Santa Teresa, al fondo

                                                                               

                                                                           Silo

                                                                             

                                                                   calle Silvela

                                                                           

                                                                  calle Silvela

                                                                        

                                                                    calle Topete

                                                                       

                                                          calle Virgen de Guadalupe

                                                                             




El reventón

                                                                                     


         



El río.

Mi padre, el Sol, que de la nieve pura,

engendró el agua, me lanzó en torrente

por los riscos, y mi ímpetu creciente

me labró cauce por la roca dura.


Amansado el impulso de la altura,

caminé por el valle lentamente,

y espejo, en los remansos, transparente,

se miró en mi la luna en la llanura.


Besaron mi cristal sauces y flores;

a mi paso cantaron ruiseñores

en los serenos días de bonanza.


Y ansiando descansar, siendo el anhelo

de morir en el mar, con la esperanza

de que el sol otra vez me vuelva al cielo.

--Cristóbal J. Encina--



Guillermo I de Inglaterra fue el primer monarca inglés importante. Primero  invadió ése país y luego se hizo nombrar rey.

Murió este fiero vikingo (porque era vikingo) por causas fortuitas. Al celebrarse sus exequias fúnebres en la catedral de Caen, cerquita de donde había muerto, los obispos encargados de la misa insistieron en que el cuerpo del rey, bastante descompuesto ya, por cierto, entrase como sea en el estrecho sarcófago destinado a su eterno reposo. 

¡Y mira por donde!. Debido la presión ejercida, los lacayos, al apretarlo para dentro le reventó el estómago al monarca, y no os cuento la estampida de obispos, curas, cortesanos y demás parentela que estaban alrededor del muerto ante el insoportable hedor que expelía aquello. La catedral se quedó vacía en segundos. 

A regañadientes y bien pertrechados de rudimentarias mascarillas de las de entonces, entraron los criados en la iglesia después, para solucionar el desaguisado. 

En fin

Joaquín






martes, 22 de marzo de 2022

El porqué de algunas cosas

                                                                                  



Quisiera ser siquiera
una naranja jugosa
en la mano de un niño
-no corteza vacía-
una imagen que brilla en el espejo
-no sombra que se esfuma-
y una voz clara
-no pesado silencio-
alguna vez escuchada. 

--Alaíde Foppa--



¿Nunca os habéis preguntado por qué Dios, todopoderoso como es, consiente tantas injusticias en el mundo? ¿Por qué permite terremotos con miles de muertos? ¿Y esta injusta guerra de Ucrania?. ¿Y millones de niños pasando hambre y con enfermedades terribles?..

Bueno, ha existido el maniqueísmo, una religión oriental que si que tiene respuestas convincentes para esta paradoja.. El maniqueísmo entiende que en el mundo hay dos fuerzas poderosas, antagónicas, iguales en supremacía y que rigen los destinos de los hombres y del universo, el bien y el mal, y ambos se debaten en una lucha feroz.. A veces vence una, a veces la otra. ¿Entonces?

¡Pues todo resuelto, pues! Con la teoría del maniqueísmo entendemos por qué Dios no puede solucionar todo lo malo que sucede en el mundo.. ¡Resulta que Dios no tiene el poder absoluto!..

¿Y si identificamos el bien y el mal como Dios y el Demonio.. Pues esto es lo que cree la Iglesia. La conclusión sería el libre albedrío de los hombres en la tierra.

Con el libre albedrío solventamos este grave misterio y desazón de los hombres con Dios.. Dios nos creo libres para que nosotros eligiéramos el camino a seguir; y allá nosotros con nuestras decisiones.. Podemos ser buenos y acatar los mandamientos de Dios, y luego nos acogerá en su seno.. O malos y seguir al Demonio en sus malévolas ocurrencias y perdernos definitivamente en el infierno.. 

Por cierto, esta teoría del libre albedrío se le ocurrió a San Agustín. Él sostenía que era mucho mejor que Dios nos permitiera elegir. De otro modo seriamos marionetas suyas, y tampoco es eso..

Joaquín


sábado, 19 de marzo de 2022

Mi manera de hablar extremeña.

                                                                                     



¡Ah, si vieras tu huerto! Ya no hay rosas,

ni lirios, ni libélulas de seda,

ni cocuyos de luz, ni mariposas...

Tiemblan las ramas del rosal, medrosas,

el viento sopla, la hojarasca rueda.

--Amado Nervo--


Un rato antes habíamos soportado a un tipo iracundo que pretendía aparcar su coche donde nosotros. Fue injusto por su parte, porque yo avisé con las luces de emergencia mis intenciones. El tipo no lo entendió así, salió pitando a toda velocidad, pero antes me llamó paleto por la ventanilla abierta de su auto. Sucedió un par de calles atrás; creo que me oyó hablar con mi compañera y se percató de mi acento.

--Desde luego lo que tenemos que aguantar los extremeños por nuestra forma de hablar; belloteros y paletos es lo más suave que nos dicen---le dije a la chica que me acompañaba.

--Jajaja, tú no sufras por eso, Joaquín, ese tipo es un energúmeno. Además todos cargamos con nuestro Sambenito---se apiadó ella---mira los andaluces la fama de vagos que tienen. O los aragoneses de cabezones, que cuando se les mete algo en la cabeza no cejan en su empeño. A los madrileños, ya sabes, nos dicen que somos unos chulos de aúpa.

--Ya veo que tienes para todos. Tú lo que quieres es consolarme, jajaja---le contesté riendo.

Habíamos dejado, mi amiga y yo, el coche aparcado en una calle paralela a la de Serrano, en Madrid, y caminábamos hacía el centro con la intención de ver la ciudad. Pasábamos allí los cuatro días del último "puente" de diciembre. A hilo de conversación y de los tópicos, ella volvió a la carga. Me dijo:

--Te lo decía porque tú empezaste hablar de los tópicos de los españoles. Y ya que te pones, qué me dices los los vascos---prosiguió mi amiga---dicen que son tozudos, noblotes y distantes hasta que cogen confianza. De los gallegos qué decirte, que depende, jajaja, nostálgicos, raros y desconfiados. ¿Y los manchegos?.uffff, refraneros, gañanes y descorteses.

--Bueno, bueno, ni que los hubieras tratado a todos---le advertí riendo---venga, suelta ya resto, jajaja.

Habíamos llegado ya a la Puerta de Alcalá casi sin darnos cuenta. La plaza estaba abarrotada de gente, las terrazas atestadas. Incluso a pesar del mal tiempo, decenas de turistas se hacían fotos en ridículas posturas frente a la famosa Puerta. Pero mi amiga miraba poco a su alrededor, se había tomado en serio lo de los tópicos.

--Ni murciano ni gitano quiero de hermano, se decía antiguamente de ellos, Joaquín-- continuó ella muy efusiva---de los navarros se dice que son brutos, comilones, y muy amantes de sus fiestas. Los riojanos comilones, hospitalarios, le dan bien al vino (hacen patria con eso). Los valencianos, festeros, discotequeros y pirómanos; les gustan los petardos y el fuego con locura jajaja

--Ya te quedan pocos---le interrumpí---antes de entrar en el Retiro supongo que los habrás acabado, jajaja

--A ver si recuerdo quienes faltan, ¡ah, sí!--.me sonrió---mira, toma nota. Los castellanos los mejores hablados; son fríos, serios y austeros, pero generosos. Los cántabros amantes de su tierra, orgullosos, secos, toscos, cantan muy bien (no lo dirán por Revilla que desafina que es un gusto. Los canarios aplatanaos ya a media tarde. Los baleáricos cerrados, desconfían de los forasteros, y los asturianos patrióticos de su tierra, y más bien cerradotes,. Creo Joaquín que no me quedo ninguno jajaja---concluyó con una carcajada.

--Que te crees tú eso, ¿Y los catalanes? ¿O ya no los consideras españoles?---le pregunté con ironía---pero, mira, voy a decirte yo cómo son los catalanes---insistí---muy emprendedores en los negocios, fríos, distantes, nos miran por encima del hombro. Bueno, y últimamente ya lo sabes, no quieren saber nada de nosotros.

--De todas maneras---me cortó ella---no te tomes estos datos con mucho rigor, Joaquín, son los tópicos de siempre. Además los tópicos están para no hacer mucho caso de ellos, se crearon para hacer daño y mienten como bellacos--

--Por mi no lo digas, amiga---le respondí-- yo estoy muy orgulloso de ser extremeño, aunque seamos de los peor parados, jajaja.

Llegamos a la puerta del Retiro. La cogí por el brazo, sorteamos el gentío que entraba y salía del parque y nos adentramos en él. Poco a poco se me fue olvidando el incidente con el energúmeno aquel del coche..

Joaquin                                                                       

                                                                                                                         
                                              calle Serrano, cerca dejamos el coche

                                                                          

                                               calle Serrano, cerca ya de la Puerta de Alcalá

                                                                                

                                                             Puerta de Alcalá

                                                                          

                                                  puerta por donde entramos al Retiro