Un amor a contracorriente..

                                                                         

Que te ames a ti mismo, de tal modo

compendiando tu ser, cielo y abismo,

que sin desviar los ojos de ti mismo

puedan tus ojos contemplarlo todo.

       --Enrique González-- 

Fue el suyo un caso casi excepcional.. ¡nada menos que casarse por amor!. 

Sí, y con un hombre elegido por ella.. Claro, que apenas tenía 12 años cuando lo conoció..

Desde luego él, Alfonso, y ella María de las Mercedes, le echaron bemoles a la cosa.. contra viento y marea se empeñaron en casarse.. ¡tan jóvenes! ¡tan primos!.. porque.. ¡esa es otra!, ¡eran primos hermanos!.

El padre de María de las Mercedes, el duque de Montpensier, había intentado, sin éxito, destronar a su cuñada, Isabel II, madre de Alfonso, así que, ¡ya me diréis!, ¡como para querer ésta emparentarse todavía más con él!. Y digo más, los futuros consuegros se odiaban a muerte..

El gobierno tampoco veía con buenos ojos ese casamiento. Lo ideal hubiera sido casar a Alfonso con una hija de la reina Victoria de Inglaterra.. ¡menudo puntazo hubiera sido para el país!..

En fin, con estos mimbres, la basílica de Atocha de Madrid fue testigo de la boda de estos dos adolescentes..

Menos mal (perdón por la expresión) pero si no llega a morir tan joven María de las Mercedes (falleció con sólo 18 años) hubiera habido guerra entre las dos familias.

De todas maneras el que más tajada sacó con ésta insólita boda fue el presidente del gobierno de entonces, Cánovas del Castillo, porque fue el que más empeño puso en restaurar la monarquía, muy mal vista despues de lo de Isabel II.

Sí, el tipo provechó el romance del joven rey Alfonso y la guapa sevillana María de las Mercedes, un amor adolescente, tierno, romántico, apasionado, de novela y que a la gente le encantaba, y nos metió de rondón la monarquía borbónica, que tan malos recuerdos traía a la gente..

Y acertó.. Toda España lloró amargamente la muerte de María de las Mercedes... Nada hay en el mundo que el amor no cure..

Pero es verdad que fue una pena. Quizás con el tiempo no hubiera acabado bien, pero los dos se amaban de veras.

Las que hayáis visto la película “¿Dónde vas Alfonso XII?” aunque muy edulcorada, habréis comprobado que casi refleja un poco esa bonita historia de amor..

Acertaron al elegir actores. Ella, Paquita Rico (María de las Mercedes) era guapísima, aunque rondaba ya los treinta, y él, Vicente Parra (Alfonso) tampoco se quedaba atrás.

Desde luego la película se deja ver..

Joaquín

                                                    Alfonso y María de las Mercedes

                                       Paquita Rico y Vicente Parra (¿Dónde vas Alfonso XII?)