Llamé a mi corazón, nadie repuso.
Nadie adentro ¡Qué trance más amargo!.
El bosque era profuso,
negra la noche y el camino largo.
Llamé, llamé, ninguno respondía.
Y el murmurado castillo taciturno,
único albergue en el horror nocturno,
era mi corazón. ¡Y no me abría!
--Rufino Blanco--
Cerrad los ojos. Ahora pensad en una panorámica completa de Fuente de Cantos. Apuesto que os imagináis el pueblo en toda su extensión.
Presidiendo esa hipotética foto mental que os pido, estará nuestra Iglesia de la Granada, inmensa mole, con su elegante Torre de granito de 36 metros de altura y sus cuatro campanas. Esto predominará en vuestro virtual paisaje urbano fuentecanteño, seguro. Pero no siempre fue así, por supuesto..
Esa foto fija que tenemos en mente los fuentecanteños de nuestro pueblo es así sólo desde mitad del siglo XVIII. En esa fecha se agrandó la iglesia y se levantó la Torre que vemos ahora (donde antes había otra mucho más pequeña y de ladrillos). Pero hasta ése siglo apenas teníamos una iglesia más bien modesta en comparación, y digo modesta por no decir raquítica y casi en ruinas.
Aquella vieja iglesia estaba bajo la advocación de Santa María, y se habría levantado a su vez sobre una pequeña ermita. Mirad como era:
Por el lado sur, que daba a la plaza, sobresalía un portal elevado cubierto, de ladrillos, y a su lado un campanario y la Torre mocha y almenada que todavía conservamos. Eso sí, tenia dos campanas y un esquilón.. y hasta conocemos el nombre de ellas, María, la más grande, Caterina, la chica y Margarita, el esquilón que aún podemos ver en la espadaña. Por cierto, bendecidas todas por el Prior de San Marcos de León en el siglo XVI..
En el interior de aquella vieja iglesia-fortaleza había cuatro altares y en medio la capilla central. Las principales y más reverenciadas imágenes eran: Santa María de la Antigua, Santa Catalina, San Juan y San Bartolomé. En caso de guerra los fuentecanteños se podían refugiar dentro de ella y defenderse bien.
En fin.. Ya podéis abrir los ojos...
Joaquín
panorámica del conjunto parroquial las dos torres, la nueva del siglo XVIII, a la izda. y la vieja (siglo XVI) con su espadaña y su esquilón
No hay comentarios:
Publicar un comentario