miércoles, 30 de diciembre de 2015

¿Tan diferentes?

La democracia es el proceso que garantiza que no seamos gobernados mejor
de lo que nos merecemos.
( G.B.Shaw)

 Las  que estamos viviendo, a mi parecer, están siendo unas  navidades  raras. Son las únicas que pasamos sin un gobierno aun  definido, todo está en trámite. Tengo la impresión, no sé si le pasará a más de uno,  que este año se han prolongado más de la cuenta, y es que las elecciones generales y la larga campaña electoral han trastocado un poco las sensaciones y las prioridades. Nunca unas elecciones al parlamento  habían coincido, casi,  con la navidad.
  En el tema político todo está  patas  arriba. La formación del gobierno estable que piden todos los agentes sociales  y económicos se presenta sumamente complicada. Tenemos por delante unos meses de gran incertidumbre que pudiera afectar a nuestras vidas.  Está claro que muchas empresas y fondos  de inversión mantienen paralizada sus inversiones hasta ver qué pasa o qué  sale de la serie de rondas de negociaciones que se avecinan.
  Es inédita en nuestro país la situación de ingobernabilidad que estamos, podemos decir…  padeciendo.  Nunca hemos vivido unas circunstancias semejantes. Las soluciones se presentan difíciles porque ningún partido  tiene  un número de escaños tan abrumador (aunque no tuviese mayoría absoluta) como para que los demás se sintieran constreñidos y les permitiese  gobernar.
  Hace un par de años decíamos, España no es Grecia, por no considerar comparable la distancia en salubridad económica entre ambos países. Ahora y ciñéndonos al tema estrictamente político recalcamos,  España no es Italia.
  En ese último país se pueden permitir la osadía de funcionar  sin presidente y sin gobierno durante décadas.  De hecho, desde la segunda guerra mundial ha habido allí una amalgama de partidos políticos desmesurada  y han tenido que coaligarse, a veces  contranatura, para agrupar escaños y autoridad.  Aun así  hubo etapas de reiteradas elecciones generales ante la imposibilidad de mayorías, pero, (y he ahí la peculiaridad de este gran  país), la economía ha seguido creando riqueza igualmente. Es decir, la clase política va por un lado y la población y la economía por otro,  y… todos tan a gusto.  Lógicamente y como todos sabemos,  España no es así.
  Aquí en nuestro país también somos peculiares,  pero en otros sentido, quizás más perverso  si cabe.  Aquí somos más tercos  y montaraces y llevamos la política hasta sus últimas consecuencias.  Me temo que en un prolongado desgobierno como el  italiano  volveríamos a las andadas  y  apuesto que nos  daríamos de mamporros, (al menos verbales) a las primeras de cambio.
  Llegó un día, no hace mucho,  que pensé, (pobre de mí), que habíamos superado las viejas inquinas y odios de nuestro ya conflictivo pasado.  Ahora compruebo  que fui un iluso,  estaba equivocado de rabo a cabo. Somos excesivos y pasionales,  también  y,  perdóneseme la licencia...un poco ridículos.
  Si,  ridículos,  porque en el siglo que estamos e integrados de lleno en la Europa moderna y super desarrollada no valen actitudes extremas.  Apenas hay diferencia entre unas políticas y otras, así que  ¿A qué vienen tantos aspavientos y posturitas?.
  Europa nos marca exactamente  lo que tenemos que gastar y lo que debemos entramparnos. Dentro  del  presupuesto  que nos...sugiere,  el ochenta por ciento son gastos fijos, es decir,  lo que nos cuesta: sanidad, educación y pensiones.  El veinte por ciento restante sería lo único que estaría sujeto al criterio del partido en el gobierno y,  no creo que haya mucha diferencia en la manera de repartirlo entre unos y otros.
  En otros aspectos y maneras  de proceder en la vida ¿Alguien,  de verdad encuentra muchas diferencias entre dos personas que dan un voto distinto a cada uno de los dos grandes partidos?
  Si en economía nos debemos a los designios del comisario europeo  Mario  Draghi, en el resto de asuntos capitales o de índole moral ¿Qué nos separa?
  El  dilema del aborto parece resuelto, la gran mayoría de ciudadanos y de todas las tendencias políticas no se inmiscuye, prefiere el estado actual. Del divorcio y adopciones en parejas gais, nadie discrepa ya.
  El tema religioso, que antes era motivo de discordia;  ahora la mayor parte de españoles está por una España laica o aconfesional. Nos quedan tan solo unos flecos en cuanto financiar más o menos los colegios concertados… minucias.
  Es en la integridad territorial del país donde pudiera haber más desencuentros, pero aun  en ese espinoso asunto, según el resultado de las últimas elecciones,  el setenta y cinco por ciento de los españoles estaría  en contra de cualquier  referéndum de autodeterminación que signifique romper el país.
  Quizás subsista aun discrepancia en la llamada, memoria histórica,  pero…  Franco murió hace ya más de cuarenta años y de la guerra civil  la friolera de setenta y cinco años que terminó.  La inmensa mayoría de españoles no la vivió. Durante la transición hubo una  reconciliación entre todos muy generosa  todos cedieron para  terminar de una vez por todas con las dos Españas.
  Abogo, como cualquier persona sensata, proceder como hacen en todos los países desarrollados del mundo, democráticamente. Optar por las diferentes opciones políticas, pero como diría Felipe González, sin acritud, porque a todos nos conviene vivir en paz y armonía en aras de hacer una España próspera.
  Imagino que todos los partidos que acceden a gobernar  lo hacen con la mejor intención, que no es otra que la de mejorar la vida de los ciudadanos. En los programas electorales de cada uno las diferencias entre ellos, (si me permiten decirlo), son de matices y es que no hay margen para más.
  Por otra parte estamos de lleno en una sociedad de libre mercado y capitalista en donde la propiedad privada hay que respetarla absolutamente y eso es lo que priva en el mundo, llamémosle… civilizado y democrático,  por lo tanto no queda otra que respetar sus normas.
  Por supuesto queda la otra opción… gastar mucho más de lo que se ingresa, intervenir empresas,  confiscar bienes de los pudientes o no tan pudientes, actuar de manera autoritaria y dictatorial una vez en el gobierno imponiendo ideas revolucionarias caducas, coartar la libertad de prensa y pensamiento etc. pero para eso habría que salir del organigrama  europeo; en la U.E. no hay cabida para ese tipo de políticas.
  Importa mirar por el bien de los españoles y no tanto el ombligo de cada uno. Deben ceder cada uno lo posible para alcanzar un buen pacto, por lo menos que dure un par de años, después que cada partido haga su campaña como siempre. Es mucho el dinero y prestigio que está  en juego cada día que pasamos  sin gobierno, (el coste nunca lo sabremos), seguro que será muy elevado. Nos jugamos mucho, entre otras regalías,  nuestras  pensiones. Lo digo por mi ya avanzada edad,  jeje
                                                                                          Joaquín Yerga
                                                                                           29/12/2015


domingo, 27 de diciembre de 2015

Huida al paraíso

                                                                                        




A veces nuestros labios, como locas
mariposas de amor, se perseguían;
los tuyos de los míos siempre huían,
y siempre se juntaban nuestras bocas.

Los míos murmuraban: -¡Me provocas!
Los tuyos: -¡Me amedrentas!, respondían;
y aunque siempre a la fuga se atenían,
las veces que fugaron fueron pocas.
(Manuel Ugarte)

Entre mis libros de cabecera uno de los que más aprecio le tengo y que guardo como oro en paño es de poesía. No es demasiado voluminoso, anda el pobre un poco ajado y con las tapas desgastadas por el tute que le doy. Recurro a él de vez en cuando para reconfortar mi ánimo, sobre todo cuando éste no es excelente; cosa que sucede según épocas y circunstancias como a cualquiera.
El librito de mis desvelos lleva el enunciado Tesoros de la poesía. Y digo recurro a él porque me sirve de bálsamo emocional para tiempos atribulados. El tomo en cuestión recoge una recopilación de las mejores poseías en castellano. Las mejores para su autor, por supuesto, pero he de reseñar que éste era ni más ni menos que Rafael Alberti, que algo de poesía sabia.
Escribir en verso es un modo sólo apto para maestros de las letras. Sólo las personas verdaderamente sensibles, capaces de percibir lo más sublime que les rodea son poetas. Si además poseen un vocabulario abundante y saben expresarlo de manera inteligible, entonces y sólo entonces son auténticos poetas. Y es que, buscar la frase con encanto que tenga todo el sentido, aunque sea figurado, pero dentro de las reglas del obligado metraje poético es tarea de genios.
No obstante, una cosa es escribir poesías y otra muy distinta admirar y gozar con la poesía que han creado otros; sobre todo si estos han sido los grandes poetas ya consolidados de nuestra extensa literatura.
Estoy seguro que a mucha gente le conmueve un bonito y turbador poema. Desde siempre ha sido esta la manera más directa y emotiva de entrar en el corazón de las personas. Para describir un bucólico paisaje o un amor despechado nada mejor que contarlo en versos.
Pretendo hoy, en este breve artículo, hacer mención de algunas de las mejores y más sublimes poesías de nuestra lengua. Sé que no hay espacio suficiente en este par de folios para detallar los versos completos, pero si algunas pinceladas de ellos.
Ya con el latín como idioma oficial del Imperio Romano, (al que pertenecimos durante más de seiscientos años), disfrutamos de excelsos poetas como Juvenal, Ovidio (poeta del amor), Virgilio (el más famoso) etc. pero esa parte de la literatura apenas la consideramos como nuestra.
Fue al inicio de la formación de nuestras lenguas romances como el gallego, el castellano o al catalán; todos idiomas vulgares (lo hablaba el vulgo, es decir el pueblo en contraposición con el clero y las clases altas que seguían utilizando el latín, más culto) cuando comenzó nuestra verdadera literatura.
El castellano fue el dialecto que se impuso en la mayor parte de la península, (gracias al mayor peso militar y económico de Castilla) por lo tanto los mejores poetas escribieron en esta lengua. De los primeros romances completos, (además de las llamadas, Jarchas mozárabes), tenemos el fabuloso y extenso poema Del Mío Cid, de autor desconocido, que describía las andanzas bélicas y amatorias de este héroe castellano.
Pero del poeta, con nombre y apellidos, del que primero tenemos constancia, fue el monje riojano, Gonzalo de Berceo, allá por el siglo XII, que escribió cosas como esta… (y que se entienden perfectamente a pesar de estar escrito en los albores de nuestra lengua).

Quiero fer una prosa en román paladino,
en cual suele el pueblo fablar a su vecino,
ca non so tan letrado por fer otro latino:
bien valdrá, como creo, un vaso de bon vino

Después siguieron a lo largo de los siglos otros muchos como el pícaro Arcipreste de Hita y su Libro del buen amor, el Marqués de Santillana y sus Serranillas y así hasta llegar a unos de mis preferidos, Jorge Manrique su maravillosa elegía, Coplas a la muerte de su padre, del siglo XV, ahí van unas pinceladas…

Recuerde el alma dormida,
avive el seso y despierte,
contemplando,
cómo se pasa la vida,
cómo se viene la muerte,
tan callando;
cuán presto se va el placer,
cómo después de acordado
da dolor;
cómo a nuestro parecer
cualquier tiempo pasado fue mejor.

Apuesto lo que sea, y es que aquí coinciden todos los expertos, que esta es la mejor elegía de nuestra lengua. 
Después, saltando por encima de muchos buenos poetas, algunos injustamente olvidados, como Boscán,  Garcilaso de la Vega etc. nos aparece por orden cronológico nuestro insigne Fray Luis de León. De él he entresacado estos versos…

¡Qué descansada vida
la del que huye del mundanal ruido
y sigue la escondida
senda, por donde se han ido
los pocos sabios que en el mundo han sido!

No hay duda que se anticipaba a las recomendaciones de psicólogos y orientalistas de hoy en día. Nos aconsejaba ya en el siglo XVI, sosiego y paz interior.
Unos años después encontramos al místico San Juan de la Cruz, del que extraigo el siguiente verso…

En una noche oscura,
con ansias, en amores inflamada,
¡oh dichosa ventura!!
salí sin ser notada
estando ya mi casa sosegada.

Y qué decir de Góngora

La más bella niña
de nuestro lugar,
hoy viuda y sola
y ayer por casar,
viendo que sus ojos
a la guerra van,
a su madre dice
que escucha su mal:
Dejadme llorar orillas del mar”


Y de Quevedo

Madre, yo al oro me humillo;
él es mi amante y mi amado,
pues, de puro enamorado,
de continuo anda amarillo;
que pues, doblón o sencillo,
hace todo cuanto quiero,
poderoso caballero
es don Dinero


Y… ¿Calderón Iriarte o Samaniego y sus fabulas? Seguro que todos aun nos acordamos de ellos, del colegio.
Del siglo XIX destacamos a Espronceda y sus Con diez cañones por banda…o a Zorrilla y su Don Juan y ¿Campoamor?  y… ¿Bécquer?. Éste ultimo otro de mis poetas preferidos¿Quién no se acuerda de…?

Mientras haya unos ojos que reflejen 
los ojos que los miran;
mientras responda el labio suspirando
al labio que suspira;
mientras sentirse  puedan en un beso
dos almas confundidas;
mientras exista una mujer hermosa
¡habrá poesía!

Y… qué decir de Rosalía o Rubén Darío, hasta hacer un alto en el camino y admirar a otro de nuestros mejores poetas, para muchos el mejor, Antonio Machado y su…

Una noche de verano,
estaba abierto el balcón
y la puerta de mi casa-
la muerte en mi casa entró
se fue acercando a su lecho,
ni siquiera me miró-
con unos dedos muy finos,
algo muy tenue se rompió
Silenciosa y sin mirarme,
la muerte otra vez pasó
delante de mí. ¿Qué has hecho?
la muerte no respondió
Mi niña quedó tranquila,
dolido mi corazón.
¡Ay, lo que la muerte ha roto
era un hilo entre los dos!

O este otro poema…

Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar,
Me encontrareis a bordo ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar.

La cosa no da para más…

Joaquin





         
                                           

                                 


lunes, 21 de diciembre de 2015

Paisaje para después de la batalla

   El resultado final de estas últimas elecciones ha sido, sin paliativos, un desastre para el conjunto de los españoles. Así,  con este panorama de escaños  tan repartidos  no hay valiente que forme un gobierno estable. Es si me apuran y mirado  por encima de cualquier interés partidista,  el peor resultado que se podría dar. Esperemos por el bien de España, que es el de todos, que los políticos cedan cada uno lo que tenga que ceder y  lleguen  a algún tipo de acuerdo satisfactorio.
 Es la hora de los políticos. Hasta ahora éramos los ciudadanos quienes con nuestro voto  elegíamos  de manera más o menos mayoritaria  al partido que queríamos que nos gobernase. Hasta la fecha de hoy, siempre  hemos designado con claridad meridiana la organización política que nos fuera a  dirigir los cuatro años que dura la legislatura  pero tras el incierto resultado de ayer son ellos los que se deben a un bien común que es España. Son ellos, los políticos, los que ahora se tienen que poner de acuerdo dando lo mejor de sí mismo y anteponiendo los intereses de partido por el general, si no es así, algún día se les pedirá cuenta.
  Los españoles  por más que hayamos avanzado en tantas cosas seguimos abrazados al pelotón de los torpes junto a Grecia y Portugal en el juego político. Hemos denigrado hasta la saciedad el bipartidismo, con el que también nos ha ido, por cierto, desde la muerte de Franco. Hemos hecho creer a tanta gente que este era un sistema defectuoso y  si nos ha ido mal estos últimos años era por su culpa.
 No hay duda que los nuevos partidos que han surgido le interesaba sobremanera este estigma para así ellos recoger los votos de los descontentos,  pero es de cajón que todos  y cada uno de ellos  le encantaría hacerse mayoritario a costa de los tradicionales. Entonces, de qué estamos hablando.  Seamos mayores por favor,  lo que pretendían realmente es hacer otro bipartidismo, solo que en vez de PP/PSOE,  serian ahora  PODEMOS/CIUDADANOS,  así de claro.
  Pues me temo que al final los que querían acabar con este sistema tan denostado lo han conseguido, ¡claro!  que ha sido para todos nosotros  una victoria pírrica y al igual que este antiguo rey griego, Pirro, que perdió tantos hombres  y bagajes en la batalla contra los romanos que casi deseó no haberla ganado, ahora pasa un poco lo mismo.  Es tanto lo que vamos a perder por la incertidumbre y el desgobierno, que mejor  habernos  quedado como estábamos…  y  si no,  al tiempo.
  Visto lo visto, este lunes postelectoral   se vislumbran  unas cuantas opciones a considerar y me temo que a cual peor. Por un lado el PP no puede gobernar en minoría porque el  Psoe ya ha manifestado que por ahí no pasa, es su enemigo a batir y antes muerto que desleal con sus  huestes.  A las primeras de cambio les harían una moción de censura para desalojarlos, tal y como ha pasado en Portugal.   A este partido, el Psoe,  para ponerse al frente de un hipotético gobierno les harían falta todos los votos de la izquierda más los independentistas y por supuesto estos les van a exigir para empezar a hablar su deseado referéndum para así  tener la opción de separarse legalmente. En resumidas cuentas los mejor parados, a pesar del descenso en votos, han sido los independentistas que ahora tendrían un gobierno sumamente débil para así sacar ellos la ansiada tajada definitiva. El resto de partidos están  descartados para cualquier opción sensata de liderazgo gubernamental.
 A mí  se me ha ocurrido una alternativa que pudiera ser usada, in extremis  y que ya se puso en práctica en el País vasco  hace un par de legislatura. También en Madrid Esperanza Aguirre la barajó. Esta consistiría en dejar gobernar al Psoe a pesar de su exigua cosecha de votos, haciendo el PP un acto de,  digamos,  abnegación o generosidad  absteniéndose en las votaciones pertinentes. En este sacrificio podría participar también Ciudadanos que ya ha manifestado su intención de anteponer los intereses de la nación a otros. Por supuesto  sería esta  una opción inédita en Europa y digna de estudio. Todo sea por salvaguardar los intereses económicos, incluidos  la prima de riesgo y  la estabilidad bursátil, por cierto,  cabezas visibles de la salud económica del país.
 Vaya por delante que a mí no me asusta una hipotética coalición de izquierdas teniendo a Podemos como inquisidor  y  hacedor de nuevas leyes. Quizás quedemos vacunados de una vez y para mucho tiempo de estas viejas políticas, puestas en práctica por cierto y con resultados visibles, en Venezuela y Cuba.
  De todas maneras si eso es lo que han deseado los españoles,  pues adelante. Aunque antes de dar el paso  pensemos que este nuevo partido ha pedido como condición, antes de negociar, llevar a cabo el dichoso  referéndum  para la independencia en Cataluña  y el País Vasco, con lo que ya vaticino la separación de estas dos regiones  si esto se llevara a cabo.
  A pesar de todos estos malos augurios esperemos hasta finalizar el plazo para la formación del nuevo gobierno. Hay que tener en cuenta también la presión de la Unión Europea  y otros importantes agentes económicos mundiales para que el resultado  de la coalición no altere  el normal desarrollo de una economía  de libre  mercado y respeto a la propiedad privada. De otra forma seriamos expulsados del club de los países, digamos… formales. jeje
                                                                                                      Joaquín Yerga
                                                                                                       21/12/2015



lunes, 14 de diciembre de 2015

El debate

El precio de desentenderse de la política es el ser gobernado por los peores hombres.
         (Platón)

  Hoy,  lunes por la tarde, que es cuando me dispongo a opinar sobre el asunto del día (el debate) ignoro aun el resultado del cara a cara en televisión de los dos líderes de los principales partidos de nuestro país. Es mucha la importancia que se le está dando aunque imagino que son los medios de comunicación los más interesados en el asunto.
  Apenas ya nadie se acuerda del anterior debate, (a cuatro) que organizó antena3 y según los mismos medios era el decisivo. Lógicamente y como debe ser natural  deciden bien poco.
 Todo este marketing audiovisual que despliegan alrededor de la política y más en tiempo de elecciones  proviene, como casi todo, de los Estados Unidos.  Fue allí,  a partir del famoso debate  televisivo que enfrentaron a Kennedy y Nixon para las elecciones  presidenciales de 1960 y que según encuestas y estudios posteriores perdió este último como consecuencia de… ciertos retoques o defectillos que no supo enmendar. Entre estos,  dicen los que saben,  el cierto nerviosismo de Nixon frente a la mayor serenidad del contrincante o incluso su exceso de sudoración.  Mal vamos si el que nos gobierne durante los cuatros años siguientes dependa del grado de transpiración del  líder.
 Estos debates, como todo lo que lo que lo rodea, es pura propaganda, carnaza para tertulias venideras y relleno de periódicos que les viene muy bien. Estos días previos a las elecciones llenan las depauperadas arcas con los cuantiosos ingresos publicitarios al albur de los acontecimientos, pero poco más.
 Entiendo que allá en los Estados Unidos cualquier pose mal dada o una corbata inadecuada cueste muchos votos, porque allí una mayoría de ciudadanos apenas van a votar, entienden la política de otra manera y las diferencias entre Republicanos y Demócratas, los dos grandes partidos, son mínimas, dependen muchas veces de la simpatía o atractivo de los candidatos. Sin embargo,  aquí en España la cosa difiere bastante.
 Nosotros,  la política la vivimos de manera mucho más pasional, nos entregamos en cuerpo y alma a ella. Creemos… a pies juntillas,  que el estado nos va a resolver todos los problemas y por lo tanto somos tan ingenuos que nos volcamos con nuestro partido político… a degüello.
 Aquí,  en nuestro país es habitual oír frases tan rotundas como que se es de un partido hasta la muerte.  O que todos sus ancestros han simpatizado con determinada organización política y por lo tanto ellos no van a ser menos. Son posiciones, a mí entender, totalmente equivocadas y que denotan cierto arcaísmo democrático y carencia de pensamiento libre,  pero…  es lo que tenemos.
 Con estos mimbres que describo sobre nuestra idiosincrasia creo que una mayoría de votantes tienen ya más que decidido su voto y me resisto a creer que debido a algunas, digamos…frivolidades o posturitas vayan a alterar significativamente ninguno de los dos el porcentaje de,  abducidos simpatizantes,  durante el  corto debate de esta noche.
 A mi entender  un estilo de política a seguir durante unos cuantos años (lo que dura la legislatura) debemos repensarlo detenidamente pues nos jugamos bastante en ello para  hacerlo por impulsos.
  Las personas que lideran los partidos no deberían ser lo básico en política, sino las ideas. Son estas en general  las que con mucha enjundia nos pueden satisfacer más o menos en nuestra manera de ser o de pensar.  Estas políticas,  en donde incluimos normas, actuaciones y formas de aplicar ideales o pensamientos,  bien sean de carácter  práctico o utópico son las que verdaderamente deben movernos.
 Desde el capitalismo más puro en donde la propiedad privada es lo más sagrado y el  individualismo más conspicuo aboga para que cada uno se labre su presente y su futuro, hasta el comunismo más ortodoxo  propiciador de un estado mastodóntico que  todo se regula desde él y no exista lo individual sino que papá estado nos marque a todos y cada uno cómo vivir y cómo comportarse, hay  opciones intermedias que rebuscan en uno y en  otro extremo y se quedan con lo mejor.  Por supuesto cada una de estas opciones está supeditada a nuestro gran marco legal y democrático (la constitución) que es nuestra decisión mayoritaria. Con estos…cimientos  lo ideal sería que cada uno conociéramos  bien las líneas maestras de ellas y  sepamos cuales  encaja mejor con nuestro ideario y pensamiento.
 Por otra parte de sabios es cambiar de opinión y de creencias,  además es saludable. No siempre comulga uno a lo largo de su vida con las mismas ideas. Cuando se es joven y aun no hemos realizado nada productivo para la sociedad pensamos de una manera desprendida, quizás utópica.  Después,  cuando llevamos décadas contribuyendo  religiosamente con impuestos tal vez desorbitados y otras servidumbres  y nuestros ojos han  visto  demasiadas eventualidades, se piensa de otra. Es una ley que casi siempre se cumple. Si damos por buena esa máxima que dice que cambiamos antes de creencias políticas que de equipo de futbol, pues qué mas podemos añadir…
 Por todo,  a mi entender el debate estrella de esta noche decidirá poco o nada en la opinión de los votantes. Incluso ese treinta por ciento  de indecisos que auguran las encuestas son personas recelosas que se niegan a confesar  a qué partido  profesan su devoción y confianza.
 Con todo,  no me lo perderé, por si acaso…
                                                                                           Joaquín Yerga

                                                                                             14/12/2015

lunes, 7 de diciembre de 2015

Y el ganador es...

                                                                            

La democracia es la necesidad de doblegarse de vez en cuando a las opiniones de los demás.
                    (W. Churchill)

   Ya tenemos otra fecha mítica que enmarcar en el tablero de nuestra reciente historia… el 20 D.  Afortunadamente  con las próximas son ya muchas las elecciones que llevamos desde el reinicio de la democracia y eso es señal de desarrollo cívico y progreso democrático por nuestra parte.
 Hay naciones que nos llevan ventaja en esto de libertad y pluralismo, es cierto. Nosotros la perdimos por culpa de la guerra civil y el  franquismo pero estamos recuperando a marchas forzadas el terreno perdido.
  La nuestra  es,  digamos… una democracia aun joven, hemos pasado ya la niñez y pubertad y estamos alcanzando la mayoría de edad. Pero tal y como los adolescentes de hoy en día se comportan podemos, decir que estamos razonablemente   preparados para los nuevos tiempos.
  Conseguir una democracia plena  con leyes justas y acorde con los tiempos  que corren no es tarea fácil, para eso se necesitan muchos años  de dura convivencia e identificarse íntegramente con ella.
  Las leyes las crean  nuestros representantes según necesidades. Se promulgan y después se aplican pero para que completemos  todo  un conjunto  de estas y se llegue a  comprobar  su eficacia y proporcionalidad  hacen  falta años, mucha experiencia y sobrada preparación. En esto pasa un poco como con los nuevos medicamentos que se descubren. Necesitamos lustros  de aplicación en cobayas para verificar que no tienen efectos secundarios antes de sacarlos al mercado.
  Nosotros, los españoles, aunque no lo creamos  estamos llegando a un alto grado de perfección en  pluralismo y respeto entre todos, incluidos las minorías. Hemos pecado a veces de novatos, es cierto, como recién incorporados que estamos a este mundo de libertades,  y... en muchas normas y actitudes creyendo ir un poco más lejos que nadie en garantías  democráticas nos pasamos de rosca varios pueblos. Ahora de sabios es rectificar y toca ajustar oferta y demanda en legislación política.
  La democracia es un juego muy complicado y sutil y  para llevarla a su más alto grado de perfección es necesario sortear muchos escollos. A menudo, ante evidentes atropellos,  dan ganas de tirar por la calle de en medio  y acabar con el problema de manera contundente aunque bordeara la legitimidad. Pero al final aunque abunden y sean fieros los enemigos  es más inteligente hacer buen uso de ella en toda su amplitud y utilizar todos los recursos que nos ofrece. Me estaba acordando al respecto del desafío independentista, del terrorismo de ETA, de la corrupción etc.
  Las soluciones que nos ofrece una democracia avanzada a las  agresiones que contantemente sufre,  (a menudo) son soporíferamente lentas pero cuanto el cuento termina casi siempre es satisfactorio para los demócratas. Incluso se da la paradoja  de que gracias a la generosidad de esta, muchos  pretenden destruirla  desde dentro, aprovechando maliciosamente cualquier resquicio legal.
  Ahora, en estos próximos comicios, las expectativas para la formación de un nuevo gobierno son inéditas. Ya no dependemos de dos partidos en donde depositar nuestra confianza sino de cuatro. Lógicamente tendrán que pactar entre ellos para alcanzar una mayoría suficiente.
  A mí,  que sigo confiando en las bondades del bipartidismo a pesar de los pesares, tampoco me quita el sueño este nuevo panorama, y  en consecuencia miraré el lado positivo de las alianzas. Si todo va como la lógica impone las diferentes opciones se tendrán que reposicionar cada cual con su ideología y al final cediendo unos y mitigando sus grandilocuentes pretensiones otros limarán asperezas y el que gobierne lo hará de manera controlada y moderada. No le queda otra… afortunadamente para todos…o no?
  Lo que está muy claro, a mi entender,  es que no hay que asustarse por el resultado que nos dé el conteo final de votos  porque los márgenes de actuación son muy estrechos y el personal apenas lo vamos a notar. Hoy en día las leyes europeas cada vez son más numerosas  y de obligado cumplimiento, y esto unido, (para asuntos más  graves), la subrogación de posibles desvaríos legales al gran marco de nuestra constitución, hace que la coalición que nos gobierne… no se salga de madre. Hay que recordar que la constitución  es susceptible de reforma pero es necesario tres cuartas partes de votos favorables.
  Nuestras leyes electorales tendremos que actualizarlas más pronto que tarde pero de momento es lo que tenemos. Yo me quedo con los que proponen,  (a no mucho tardar), la segunda vuelta en todos  los comicios. En las generales, si nadie obtiene  mayoría por supuesto. Nos hubiésemos  ahorrado muchos quebraderos de cabeza.  ¿Cuánto nos han saqueado los minipartidos  nacionalistas por apoyar a los diferentes gobiernos de turno? Y… ¿Cuánto hemos contribuido el conjunto del estado por esto último  a aupar a estos partidillos  vende-patrias?.. Vete a saber…
  En las comunidades autónomas también pero sobre todo en los ayuntamientos, en donde a veces  lo preside, gracias al compadreo de alianzas,  el que menos votos ha sacado y eso no es justo...o no?
   A pesar de las pequeñas  o grandes imperfecciones,  el régimen  democrático que nos hemos dado y que llevamos con él cuarenta años es, como diría Churchill, el menos malo de todos los inventados por el conflictivo ser humano. Nunca jamás en nuestra dilatada historia hemos tenido un tiempo tan largo de respeto entre todos, prosperidad y bienestar, así que… a cuidarlo que no es poco.
  El domingo día veinte cada uno con su papeleta, cuyo acto de introducirla en la urna, es el cenit de la democracia, elegirá  a su representante y entre todos nos gobernará el más votado, o en su defecto el preferido de una hipotética coalición. El resto tendremos otra oportunidad dentro de cuatro años. Eso sí,  yo recomiendo dar la confianza al partido que se ajuste a nuestra ideología y ofrezca propuestas creíbles según  nuestro parecer y no votar con ira en contra de nadie, o con la nariz tapada,(según dicen ahora).  Cuatro años son muy largos y da para mucho…incluso para arrepentirse amargamente.  Dicho queda…
                                                                                                Joaquín Yerga
                                                                                                   06/12/2015



sábado, 28 de noviembre de 2015

Rajuela

  Ahora, más tranquilo y relajado se  ve feliz. Nadie pensará ya en aquellos tiempos,  o tal vez unos pocos, los de siempre. Tiempos que solo se remontan a cuatro años  atrás aunque pareciera haber pasado cuatro siglos.  Años turbulentos en los que la tempestad mediática casi se lo se lo lleva por delante, a él y a los suyos.
  Medianamente satisfecho consigo mismo medita ahora en silencio todo lo aportado por él a la estabilidad del inmenso barco. Barco que según algunos zozobraba hasta el punto de estar al borde de encallar en los terribles arrecifes  de la crisis  y… no eran precisamente de coral.
  A veces, en la soledad de sus pensamientos,  rememora el día en que se hizo con el timón y comenzó su mejor y más grande aventura. Entonces, piensa… nadie daba un duro por la consistencia de este buque insignia y le tocó a él mantener equilibrio y el buen rumbo. Incluso gente cercana y de su misma condición le espolearon para que abandonara y dejara a su suerte a toda la tripulación. Si, a merced de los piratas de las finanzas y de todo tipo de corsarios especuladores. Pero,  fiel consigo mismo y acorde con su templanza,  heredada de los fieros Suevos de antaño, perseveró y está ahora a punto de saborear las mieles del triunfo.
  Solo,  a ratos, en la más estricta intimidad de su despacho, evoca una vez más aquellos desmesurados días,  y ve pasar  por su mente, ahora juiciosa, los pasajes turbulentos de aquellos trágicos acontecimientos, y es entonces cuando su pensamiento vuela irremisiblemente al comienzo de aquella desesperanza, una vez más,  cuando…
   
  La vieja mansión hacia aguas por todas partes .La prima de riesgo, (más feroz que nunca) abatía las desvencijadas contraventanas de la recuperación con inusitada fuerza.
  El viento del rescate rugía componiendo macabras melodías. Allá a lo lejos, en el extremo nororiental del caserón, un hipotético pero potente murmullo independentista contribuía al desconcierto del  abrumado casero. A ratos, cuando la ventisca suavizaba su atronador zumbido, indignados aullidos de lobos se unía al recital con escalofriante estrepito. Pero… más espeluznante aun era ese ronroneo silencioso de millones de desempleadas  termitas (que el pánico le hacía creer) y que minaban y debilitaban poco a poco su febril cerebro. Más de una vez pasó por su mente huir aprovechando las sombrías tinieblas de la noche y refugiarse con los suyos  en su plácida y céltica morada.
  Aterido de terror… en su delirio, pertrechado y fuertemente armado de recortes e impuestos, se refugió debajo de su vetusta cama monclovita  con la intención de resistir y aguantar hasta la aparición de las primeras luces del próximo alba electoral.
  
   Ahora, casi un lustro después de aquello, sosegada ya su mente;  apuntalada la estructura de la vieja mansión  y vuelto él a la cordura, se dispone a cobrar su rédito en forma de sufragios mayoritarios entre  los inquilinos del… viejo caserón.
  La incruenta batalla que próximamente se dispone a librar, cree poder hacerlo templado y lúcido, nada que ver con el desastroso Waterloo  de antaño. Las armas con las que cuenta ahora para finalizarla victorioso son decisivamente más sofisticadas que aquellas rudimentarias de entonces. Incluso su aguerrida tropa anda eufórica dispuesta a presentar dura contienda.
  Los numerosos ojeadores,  enviados allende el horizonte le traen buenas noticias, de tal forma que todo le augura, que de no haber una victoria aplastante en el campo de batalla, si terminará el lance en un oportuno armisticio.  Armisticio que le permita seguir dirigiendo el buque a... serenas y placidas aguas. Y es que él piensa como el poeta J.Gelman cuando dice… hay que aprender a resistir. Ni a irse ni a quedarse a resistir, aunque es seguro que habrá más penas y olvido.
                                                                          Joaquín Yerga

                                                                            28/11/2015

jueves, 19 de noviembre de 2015

Un beso y un adiós..





Cerró los ojos, de mirar cansados,

la sombra de la muerte por su alcoba,

 espiaba. Quiso bajar hasta el jardín. 

Decía cosas tan vagas, que ya nadie sabe

si en su palabra sin matiz había

algo que fuera humano.

--Agustín Acosta--



Era un encanto de mujer, y se me ha ido hace unos días..

La vi por primera vez hace ya mucho tiempo, y sé que desde el principio nos caímos bien. Debió ser que ella vio en mí al hijo que perdió una vez en duras circunstancias..

Lo del hijo fue para ella una espina clavada en lo más profundo de su alma.. un baldón en su vida del que nunca se repuso. Nunca le apeteció hablar del tema..

Por amigos, que no por ella, supe que se hizo responsable de su muerte, por no haber sabido protegerle. Después, con los años, se fue convenciendo de que los verdaderos culpables fueron.. la vida y su injusto devenir, a veces..

Cuando llegué al barrio al principio de los ochenta y nos conocimos, enseguida me puso al corriente de las novedades y cotilleos del vecindario, sin ningún pudor. 

A mi sorprendió su manera de actuar, Yo que venía de un pueblo en donde este tipo de comportamientos si estaba a la orden del día, lo que menos esperaba era que aquí en la ciudad el chismorreo de vecinas existiera de esa manera tan ordinaria. 

De hecho la idea de cosmopolitismo con la que venía al llegar se me fue un poco al garete.

Ella no siempre fue así, desde luego, ni siempre tuvo ese aspecto de abuela venerable. Tendría poco más de cincuenta años, aunque ya estaba viuda, cuando la conocí.. Yo apenas rebasaba los veinte, e irrumpí en la ciudad con ganas de comerme el mundo..

Su marido había muerto hacía poco y, aunque no hablábamos mucho de él en nuestras conversaciones, si me contó que murió prematuramente como consecuencia del trabajo que realizaba.

Lo que si recuerdo es que solía hacerla feliz hablar de su juventud, ya tan lejana.. No hacía más que repetirme lo bien que se lo pasaba en aquellos años. 

Por mi parte os aseguro que fue cierto, un par de amigas de ella que la conocieron me aseguraron lo guapa y coqueta que era, y cómo presumía a sus veinte años.  Alguna vez la vi suspirar con emoción recordando aquella añorada época.

Y me hablaba, ¡oh, si me hablaba con picardía de aquellos vestidos caros que se compraba y cómo disfrutaba agradando a los mozos!... Y me recordaba los bailes de entonces, y cuánto le gustaban...

¡Cuántas veces me hizo ver las decenas de fotos suyas de aquellos tiempos como prueba fehaciente de su sinceridad!... 

Y, fijaos, a pesar de su ya avanzada edad en estos últimos años, nunca perdió su compostura y distinción en el vestir... sin proponérselo, creo que su figura emanaba un cierto halo de innata elegancia.

--Quien tuvo retuvo, Joaquín-  --me decía alguna vez riendo de buena gana

--No lo dudo Isabel, no hay más que verte- –replicaba yo convencido

Llevaba viviendo sola casi toda una vida... jamás se quejó de su soledad. Siempre se las componía para hacer algo útil y conveniente. 

Anoche cuando murió creí ver un halo de luz transportar su espíritu lejos, al infinito. ¡Os juro que salió del tejado de su vieja casa, frente a la mía!. 

Tal vez fue un sueño, o una premonición, pero algo triste y conmovedor a la vez se removió dentro de mí..

Murió sola, sí, pero lúcida como siempre y rodeada de sus mas queridos recuerdos. 

Nunca se alejó demasiado de su vetusto joyero en donde guardaba sus collares de perlas, blancas (su alhaja favorita), su alianza de matrimonio que un día le regaló su querido compañero del alma, y los marcos de plata ya gastada de tanto lustre con las fotos de su hijo.

Yo no pude acompañarle en su último suspiro, y creedme que lo sentiré siempre. Cualquier cosa hubiera hecho por haberle podido dar el último beso de despedida, por desearle buen viaje a la eternidad y por decirle que le diera un fuerte abrazo a ese hijo tan llorado y que yo nunca conocí.. 

Sé que ahora estará feliz entre los suyos, aunque otra parte de los suyos, entre los que me incluyo, quedaremos aquí en su calle de siempre, junto a su casa, y echándola de menos..

Joaquín 




lunes, 16 de noviembre de 2015

Yo, no soy francés

 Creer es más fácil que pensar.  He ahí la razón de que hayan más creyentes.
           (A. Einstein)
 
  Perdónenme la licencia por el título escogido para el artículo, lo he buscado así solo para provocar… un poco. Por supuesto que me solidarizo con París y con los franceses en general, ¡Faltaría más !!  pero,  acorde con  mi estilo pienso que la solución no está en la simbología que por otra parte tan de moda está y que tanto abusamos de ella, sobre todo ahora con el invento este de las redes sociales.
  Yo no soy francés… porque entre otras cosas soy español  y con mucho orgullo por cierto, lo que no merma en absoluto mi pesar por las muertes sin sentido provocadas por estos fanáticos religiosos. Por esta regla de tres próximamente habrá que decir que... Yo también soy italiano o inglés  o alemán quien sabe, visto lo visto. Esta gente está dispuesta  a matar en cual sitio. Cualquier ciudad importante de Europa o diría más  del mundo es susceptible de sufrir un atentado tan sangriento como el de París.  ¿Qué tiempo vamos a tardar en poner en Facebook  o en Twiter... Yo también soy madrileño o barcelonés ? como bien señalaba en su articulo Ignacio Camacho, el domingo pasado.
  Yo no soy francés, porque ya era español cuando el atentado de Madrid del 2003, y cuando en enero de este año otros terroristas iluminados también en París, en la redacción de la revista Charlie Ebdo, acabaron con la vida de otras muchas personas,  o igualmente cuando en Londres colocaron unas bombas en el Metro con la misma intención y… tan veces más. También en estas ocasiones salimos a la calle y encendimos velas y muchos fueron comprensivos buscando culpables en los dirigentes políticos occidentales por su intervención en Oriente Medio. Y.., pregunto, aunque esto último  hubiese sido  la excusa,  tampoco habría  la más mínima justificación para entrar a saco en una discoteca en donde jóvenes inocentes se divertían y masacrarlos a sangre fría. Incluso apostaría que mas de algún nombre musulmán  aparecerá en la larga lista de fallecidos mezclados entre la  multitud.  ¡Claro!  que estos harán buenas migas con ellos, allá, en el paraíso prometido. El resto, cristianos o budistas, irán derechito al infierno.
  Yo no soy francés,  aunque pienso exactamente igual que ellos y es creer a pies juntillas en la libertad del individuo por encima de todas las cosas,  sin ataduras políticas ni religiosas, la única excepción… el respeto a mi semejante aunque piense de distinta manera.  Comparto y opino exactamente igual que cualquier europeo, descendiente de los sufridos compatriotas que dieron su vida y padecieron todo tipo de intolerancia durante siglos para que ahora nosotros vivamos en paz y democracia y hayamos superado por fin tanto fanatismo religioso patrio.
  Yo no soy francés,  pero si soy su vecino  y comparto en silencio su sufrimiento pero sin aspavientos. También su tristeza e incredulidad por el atentado,  cometido por cierto por compatriotas suyos.  Compatriotas si, porque ellos nacieron en Francia aunque sus padres llegaron de Marruecos o Argelia y ahí encontraron cobijo y educación y posiblemente becas y ayudas para sus hogares,  prebendas que allá en África ni soñaban si quiera. Y ahora ese es el precio con que les pagan.
  Es verdad que cuando Busch y sus aliados intervinieron en Iraq rompieron el frágil equilibrio de la zona y con ello y, ahora lo comprobamos, el equilibrio  del mundo.
  Es verdad  que en ese país había una dictadura férrea y sangrienta que tenia tan solo apaciguado a su pueblo gracias al terror. Y que Saddam  Hussein y su familia eran un nido de corruptos enriquecidos con el poder y que a menudo utilizaba armas químicas para subyugar a los discrepantes, pero visto lo visto mejor hubiese sido no haber intervenido, haber dejado las cosas como están,  haber hecho oídos sordos y cerrado los ojos ante las barbaridades que hacían, nos hubiésemos ahorrado este horror y esta incertidumbre.
  Es verdad que en Libia había un feroz dictador, megalómano y cruel que aterrorizaba a su pueblo, pero así gobernó durante muchas décadas y la zona estaba tranquila, aunque fuese la paz del cementerio. Desde que ejecutaron a Gadafi , ahora el país es un erial en lo social, en seguridad  y en cualquier cosa civilizada que se precie.  Es más, si siguen así las cosas los radicales islamistas seguidores de estos mártires de las bombas ocuparan todo el país y entonces tendremos a nuestras puertas traseras otra verdadera fabrica de terroristas.
 Es verdad que occidente se portó mal a lo largo de la historia en Oriente Medio y que intrigó todo lo que pudo para sacar tajada con el petróleo, pero es historia pasada. También ellos hicieron estragos con vecinos  y enemigos. Los mayores enemigos de los musulmanes son ellos mismos, se masacran sin pudor. Cualquier individuo medianamente informado sabe de la animadversión entre Suníes y Chiíes, las dos ramas mayoritarias del islam. Y lo que es peor las diferencias entre ellos son nimias y provienen del siglo VIII.  Estas desavenencias tiene mucho que ver en la formación del llamado Estado Islámico y las calladas pero terribles disputas por hegemonías religiosas en los países de la zona, Arabia Saudita, Irán o Turquía.
 Es verdad que intereses oscuros debidos al  llamado Oro negro provocó un desmesurado interés de los países occidentales por el próximo oriente perjudicando el status quo,  pero no es menos cierto que muchos países se han enriquecido por ello gracias a occidente que lo compra. Hoy en día países de la zona están considerados de los más ricos del mundo,  Arabia, Kuwait, Emiratos etc. y para otros como Argelia, Irán etc. el petróleo y sus derivados es su mayor fuente de ingresos. Por otra parte nosotros no intervenimos ahí, en la antigua Mesopotamia, para ocupar países, ni perseguimos conversiones religiosas, por lo tanto esta injustificado el odio aparente de los radicales musulmanes hacia occidente.
  Imagino que después del fiasco de la primavera árabe (tan solo Túnez y Turquía conviven en democracia) tendremos que replantearnos  futuras intervenciones en países musulmanes.  Dejemos que ellos se administren a su antojo. No todo el mundo tiene que coexistir bajo el modelo occidental.
  Es verdad también que quizás en aras de una superioridad cultural y democrática nos permitimos el lujo de admitir a millones de musulmanes  concediéndoles privilegios que ellos nos lo niegan en sus países, por ejemplo,  la enorme proliferación de mezquitas o  indumentarias  que bordean el límite de exigible en nuestra cultura. En muchas de esas instituciones religiosas se arengan a fieles en contra de la civilización que les da cobijo, comprensión y ayuda.
 La gran prerrogativa con las que cuentan ellos (los fanáticos) es el poco aprecio que tienen por  la vida terrenal (única conocida por otra parte) y la debilidad nuestra para el sufrimiento. Con eso juegan y por eso será muy difícil ganarles. Cometer graves atentados es muy fácil en nuestras grandes ciudades y el eco que produce es enorme, así que habrá que atarse los machos y convivir con ellos.  Eso sí, sin ceder un ápice de nuestra libertad y manera ilustrada de vivir.
 Si la situación se hiciera insostenible habrá que ir pensando en medidas más drásticas. De momento nos iremos apañando con banderitas en facebook  y velas en las zonas cero de la ignominia.  Ahí lo dejo…
                                                                                         Joaquín Yerga
                                                                                           16/11/2015





jueves, 12 de noviembre de 2015

Los hombres que no adoraban a las mujeres...




La violencia lo conquista todo, pero sus éxitos son efímeros.
A. Lincoln


  Tal día como hoy hace dos años exactamente, tropecé en Cibeles con una ruidosa manifestación. Había sido convocada por una serie de organizaciones y partidos políticos, (creo que por una vez estaban todos los que son).  Iban algunos con pequeñas pancartas en las que se podían leer eslóganes como… No a la violencia machista y otros por el estilo. Encontré en la cabecera de la marcha a dirigentes o convocantes del evento megáfono en mano vociferando diatribas al viento… Sí, al viento, porque realmente no sé quién o quiénes eran los destinatarios, pues de todos los que por allí rondábamos se daba por hecho que estamos rotundamente en contra de ese tipo de violencia.
  He de reconocer que me chocó el tema, no entendí, (y a estas alturas del tiempo transcurrido sigo igual de incrédulo) qué es lo que pretendían conseguir con la gesta de reunir en la calle a varios miles de mujeres y hombres venidos de todas las provincias del país. Incluso apuesto que todos venían con viaje y bocadillos pagados.
 En algún instante, durante la contemplación de la marcha, llegué a pensar (no es la primera vez que sucede) que algunos de los que se manifestaban, llegado el caso y según qué circunstancias pudieran violentar ellos mismos a sus propias mujeres o compañeras de su entorno inmediato.
  Entiendo que las intenciones de los participantes de la protesta fuesen loables y estupendas, pero permítaseme discrepar  de manera  precisa  con la utilidad de la misma. Cuando un hombre obsesionado e iracundo mata a su pareja,  la raíz del problema está en la crueldad intrínseca del individuo, que se refuerza e incrementa bajo algún pretexto, sea este una separación o de otro tipo domestico. Que nosotros pancarta en ristre y en plan buenista  desfilemos por la Castellana voceando consignas bienintencionadas, evidentemente no aporta nada a la cuestión.
  Poco aporta, tampoco, el minuto de silencio que los ayuntamientos y otras instituciones adoptan como acto de solidaridad con las asesinadas. Lo entiendo si acaso  como un gesto de impotencia. Si sirviera para que alguien se sintiese  reconfortada  lo aceptaría, pero me temo que no es el caso.
  Es verdad que en lo que llevamos de año son ya más de veintisiete las mujeres asesinadas por sus parejas y trece los niños que se han quedado huérfanos. Es una cifra  intolerable. También hay que hacer notar, aunque esto no merma para nada el problema, que muchos de los implicados en este drama son extranjeros. Todos sabemos que en otras culturas el machismo impera en sus sociedades y eso es muy difícil de erradicar teniendo en cuenta el poco tiempo que llevan residiendo en nuestro país. Pretendo decir con esto que las medidas que se han legislado al respecto y hasta el momento en España no son tan malas y que vamos por el buen camino. En esto pasa un poco como con la delincuencia común, y aunque sea políticamente incorrecto manifestarlo, una proporción de estos casos, posiblemente más del 30%,  se den en parejas procedentes de otros lares, allende nuestras fronteras.
  Por otra parte se da la paradoja de que en países aparentemente más civilizados y con cultura democrática superior a la nuestra, Suecia o Dinamarca, por poner un par de ejemplos, curiosamente se dan más casos de violencia domestica que en nuestro país. Y esto a pesar de que la mujer lleva allí décadas emancipadas. Acordémonos de la trilogía sueca de… Los hombres que no amaban a las mujeres,  escrita por Stieg Larsson,  precisamente como denuncia ante el grave y silencioso problema que se daba allí. Esto tira por tierra la teoría, según la cual, éste fenómeno es más propio de países latinos con costumbres más machistas… ¿Quién se atrevería a pensar ni por un momento que esos paraísos de cultura e igualdad  fuesen líderes en Europa de mujeres asesinadas?...  Entonces…¿cuál es la solución?
  La solución no viene, obviamente, en emular a los países musulmanes, que se corresponden  por cierto con una cuarta parte de la población del globo, en donde este tema no se trata, ni tan siquiera superficialmente.
  Tampoco hay que buscarla en oriente, empezando por la India, en donde las noticias de violaciones y homicidios de mujeres  son apabullantes… O en China, tener hijas allí era una afrenta y un gasto extra para las familias hasta hace dos días. De hecho muchos miles de niñas eran abandonadas al nacer. Ahora tienen un grave problema, hay una desproporción  considerable de sexos, sobran varones.
  África tampoco ayuda en la solución. Allí la cosa tampoco pinta muy bien para el sexo femenino. Todos hemos oído o visto con qué asiduidad se practica la ablación en chicas jóvenes. Una acción horrible para las mujeres  y un acto de machismo incalificable.
 Tengo como todo el mundo criterios propios sobre el tema. Creo en que el maltratador que llega a realizar un acto así de canalla con una mujer, trae de marchamo en su genoma la violencia o la ira, o la adquiere en los albores de su existencia. El hecho de ejercerla sobre la mujer sería por ser más débil físicamente. Es decir, en realidad es un acto de cobardía por su parte. Fijémonos en la rabiosa actualidad y comprobemos cómo muchos niños acosan de manera inmisericorde a otros compañeros del mismo sexo en las escuelas, simplemente por ser débiles. Lo que ahora llamamos bullying, y que por cierto a existido siempre.
  Muchos hombres son violentos por naturaleza y ejercen esta violencia allá donde una eventualidad lo requiera. La vemos a diario en disputas entre vecinos, o en incidentes de tráfico...¿Qué no harán con sus mujeres?.. Casos extremos de asesinatos de mujeres es difícil que se erradiquen totalmente, porque un individuo parcialmente perturbado y en un momento de ira siempre estará presto al arrebato, y eso es muy difícil de paliar.
  Pero en lo que si podemos y debemos incidir es en la educación desde la más tierna infancia. Y hacer comprender a todos nuestros jóvenes que cada uno es libre y soberano  para hacer con su vida lo que estime oportuno… Nadie se debe a nadie en contra de su voluntad.
  Por otra parte, el deber de los políticos es incluir en nuestras leyes artículos claros para una justa convivencia. Y que se apliquen ya desde las escuelas la consigna aquella de… la igualdad entre mujeres y hombres es sagrada….Todos deberíamos grabarnos en el frontispicio imaginario de nuestra grandeza  como seres en humanos evolucionados, un lema que dijera… Nadie tiene derecho a privar de su vida a un semejante.
  Aplicando estos buenos deseos, sin duda, NO acabaremos con algunos o muchos crímenes de nuestras mujeres, pero SI contribuiremos a  disminuir el maltrato, el desprecio, o las humillaciones de los hombres para con las mujeres.
Dicho queda…
                          Joaquín Yerga
                           30/05/2017