sábado, 31 de octubre de 2020

Encantado de haberme conocido

                                                                                  


Algo tuve algún día; lo perdí de algún modo,
y me dará lo mismo cuando lo pierda todo.
Pero no me lamento de mi mala fortuna,
pues me queda un palacio de cristal en la luna,
y por andar errante, por vivir el momento,
son tan buenos amigos mi corazón y el viento.

--J. A. Buesa--


Dicen los astrónomos que en unos 4.000 millones de años nuestra galaxia, la Vía Láctea, chocará con la galaxia Andrómeda y nos iremos todos al garete; ¡Dios mío, tenemos los días contados!. Pero no os asustéis, esos pocos días serán unos cuantos millones de años, y nosotros ya no estaremos aquí para verlo..

Estas predicciones seguramente son ciertas pero, apuesto que nosotros, y me refiero a la humanidad entera, ya nos hayamos autodestruido mucho tiempo antes. Y nos habremos ido sin habernos conocido a nosotros mismos. Sí, porque... A ver, decidme: ¿Quién es el guapo que se ha visto la cara alguna vez?.

Si sí, nadie se ha visto el rostro personalmente; acaso sólo a través de reflejos en los espejos, fotografías o vídeos. Bueno, si, tal vez nos hayamos visto apenas la punta de la nariz y los labios, y eso haciendo un gran esfuerzo visual. ¿Curioso, no?. 

En fin. Deberíamos tener los ojos retractiles y mirarnos a nosotros mismos en perspectiva, ¿Y cómo sería yo realmente entonces? ¿Me gustaré? No sé, no sé.. Claro, que siempre podremos preguntar a los demás. Aunque nos exponemos a que nuestra madre o pareja nos compare con Brad Pitt y los enemigos con Picio, aquel granadino tan poco agraciado que su nombre ha quedado como el más feo del mundo..

Joaquín







viernes, 30 de octubre de 2020

Pídeme la luna..

 



¡Rompa sus tinieblas

la noche que todos

llevamos adentro

y se haga de día

en el Universo!

--Concha Méndez--


Ahora que han vuelto a encontrar agua en la Luna lo podemos decir alto y claro: “Nuestro inerte satélite es de nuestra familia”. Si, lleva los mismos genes que nosotros. La única y gran diferencia es que está muerto. Murió hace ya millones de años, pero su cuerpo incorrupto nos acompaña día y noche. Bueno, a decir verdad, quizás más de noche.

De todos es sabido que el agua es el único elemento del universo que podemos encontrar en los tres estados posibles, es decir, líquido (agua) sólido (hielo) y gaseoso (vapor). Y sabréis también, más o menos, que el cuerpo humano se compone básicamente de agua. Si, hasta 37 litros de agua almacenamos cualquiera de nosotros. Sin contar, claro, al gran bebedor de cervezas que puede añadir otros 10 litros más a aquella cantidad un sábado por la noche; (esto es broma)..

Nuestro cerebro es casi todo agua (el 75%). No me extraña, pues, que el de algún bisoño político de ahora contenga hasta un 99% de éste líquido elemento y no dé mucho más de sí. También es casi toda agua la sangre; nada menos que el 83% del total. ¡Qué haríamos sin agua!.. Por algo será que nuestros planeta azul es el planeta del agua. Lo raro es que seamos únicos en el inmenso universo.. En fin..

Joaquín

jueves, 29 de octubre de 2020

Epitafio para una vieja dama fuentecanteña

                                                                                



Aquí, solo en la noche, ya es posible la muerte.
Morir es poca cosa si tu amor está lejos.

Puedo cerrar los ojos y apagar las estrellas.
Puedo cerrar los ojos y pensar que ya he muerto.

Puedo matar tu nombre pensando que no existes.
Ahora, solo en la noche, sé que todo lo puedo.

--José A. Buesa--


Comenzaba a desperezarse el día cuando traspasé la puerta del cementerio. Era final de julio y el calor ya apuntaba maneras. A nadie vi en el interior del camposanto. Una extraña sensación soledad me invadió de súbito. Sensación extraña pero familiar pues, inexplicablemente creí haberla vivido antes.

Había entrado en el cementerio con la intención de dirigirme al lugar donde reposan mis padres, pero cambié la prioridad, con curiosidad me acerqué a los grandes panteones de la entrada.. En el más presuntuoso de todos, en el revestido de mármol blanco aunque ya de decadente aspecto me entretuve un rato mirando. Siempre me llamó la atención.

Frente a él volví a notar esa extraña sensación de soledad de la que hablaba. Más que de soledad, de melancolía. Sí, definitivamente era melancolía mi sentimiento. Recuerdo que la sentía cada vez que de niño contemplaba ese mausoleo; tal vez fuera por verlo así, casi abandonado y tan sombrío; tan romántico al fin y al cabo.

En el frontispicio de la fachada aún sobrevivían las letras ya casi ilegibles que anunciaban el nombre de la persona allí sepultada “Concepción Real Tinoco de Castilla” Reconozco que siempre me intrigó: "esa familia no era del pueblo", pensaba. A nadie conocía yo con esos rimbombantes apellidos.

Luego lo supe. Se trata, efectivamente, de Concepción Real Tinoco de Castilla una rica propietaria que nació en Fuente de Cantos en 1833. Y me empeñé en saberlo todo de ella..

Por línea paterna todos los antepasados de Concepción eran del pueblo; por línea materna de Monesterio (igual que la madre de Zurbarán); curiosa similitud..

Debió ser que su padre y ella misma aprovecharon la desamortización de Mendizábal y adquirieron en publica subasta grandes lotes de tierra que la Iglesia se vio obligada a ceder al gobierno. Eso los hizo inmensamente ricos. 

Concepción tuvo tres hermanos solteros, igual que ella misma, y todos abogados. Ella fue la última en morir (de ahí la carencia en nuestra villa de tales apellidos). Falleció en 1907 y decidió ser enterrada en el cementerio entonces recién inaugurado, y en éste magnifico pero tétrico mausoleo marmóreo que un año antes ordenó construir y que yo contemplaba esa mañana de julio.

Al indagar sobre su vida supuse que Concepción llegó a poseer la mayor fortuna del pueblo. En su testamento quiso repartir algo de sus enormes caudales entre sobrinos y parientes. Además, como buena samaritana, cedió terreno y dinero para construir el Colegio de Niñas de la Hermosa (para muchachas pobres) así como para el Hospital de la Sangre..

Abstraído, aquella cálida mañana frente al viejo mausoleo, aún tuve tiempo para reflexionar sobre la futilidad de la vida. Luego me di la vuelta y encaminé mis pasos hacia el nicho de mis padres, al otro lado del cementerio. Y dejé que los restos de Concepción los siga volatilizando el tiempo, inexorablemente.

Joaquín

                                                                                 

          


                                                                                                                 
                                                                                       
                                               
                                                                                           
                                                                                                                   

                                                     
                                                                    






Con los dedos de la mano

 



Por la puerta del sueño

salgo a encontrarme,

cuando la vida quiere

acorralarme.

Yo no me dejo,

y busco ese mirarme

en otro espejo.

--Concha Méndez--



Leo en una revista de ciencia (de estas que tan interesantes que salen a los kioscos cada quince días) que el tamaño del pene masculino va a la par que su dedo pulgar; es proporcional. Explica el articulo que el nivel de hormonas prenatal juega el mismo papel en la formación de ambos. Supongo que la primera impresión de los machos al leer la revista es mirarse las manos, yo le he hecho, pero claro, habría que comparar con otros, sino no salimos de dudas.

Pero esto no es nuevo. Recuerdo que hace un par de años se habló de algo parecido. Incluso el recordado divulgador catalán Eduardo Punsent anotó en un libro: “si el dedo anular de los hombres es más largo que el índice, señal de estar bien dotado virilmente”.

Parece ser que los dedos y el pene van de la mano (no piensen mal) ambos se forman con los mismos genes. No es de extrañar que en las mujeres su dedo índice siempre sea más largo que su anular.

Un hombre tiene más testosterona y crece proporcionalmente más su dedo 4 que el dedo 2 y también crecen todas las características asociadas a la masculinidad; una mujer tiene menos testosterona, crece proporcionalmente más su índice que el anular y tiene asociada todas las características femeninas. En fin. Ahí lo dejo..

Joaquin



miércoles, 28 de octubre de 2020

Con los dientes apretados..

                                                                                 




Yo había dicho: ¡Vive!

Es decir: ama y besa,

escucha, mira y toca,

embriágate y sueña.

--Manuel Machado--


Tomaba unas cervezas en una terraza con unos amigos. Yo acababa de echar una carcajada por la anécdota tan curiosa que contó uno de ellos. Os prometo que no soy de reír de manera escandalosa, pero debe ser que estábamos todos ya predispuestos por algunos chistes contados anteriormente, que cualquier cosa nos descojonaba de risa. Ahora me tocaba a mi decir algo original, a ser posible gracioso, y me acordé de Félix Faure. 

--¿Sabéis quién fue Félix Faure?---pregunté intentando imponer silencio y acallar las voces en la agitada conversación-- 

--¡No!, dijeron todos muy seguros de no conocerlo. ¿De quién se trata?---dijo uno de ellos dispuesto ya a troncharse de risa-- 

--Fijaos---empecé a contarles---Félix Faure fue un presidente francés de finales del siglo XIX. Políticamente no destacó demasiado, eran tiempos de la guerra franco-prusiana que tan mal le fue a los gabachos. Con ella perdieron la hegemonía en Europa y posibilitó que Alemania cogiera fuerza. Pero Félix Faure, si no por sus hazañas políticas, si ha pasado a la historia por su extravagante manera de morir. Lo hizo mientras hacía el amor con su amante, Marguerite Steinheil---les solté de sopetón--

Fue decir esto último y todos dejaron de hablar entre ellos y se pusieron a mirarme interesados esperando oír el resto. Algunos aprovecharon para echar un trago a su cerveza o encender su cigarrillo sin saber si reírse o llorar.

--Bueno---advertí intentando ponerme serio para poder contar la historia---ya sé que no os sorprendo, muchos hombres han terminado de esa gozosa manera su vida, pero es que a la pobre Marguerite le dio un shock al ver morir de un infarto a Félix mientras le practicaba el sexo oral ¡¡y se le agarrotaron las mandíbulas con las que rechupeteaba el miembro viril del Presidente!!---les relaté expectante y mirando la reacción de unos y otros--

--Jajaja, Vaya manera más dulce de morir---dijo uno---No es raro, a muchos les han dado un infarto practicando sexo; el "infarto dulce", le llaman---se le ocurrió a otro--

--Imaginaos la escena, chicos---sugerí---¡Qué escándalo! ¡Todo un presidente de la República, casado y con hijos!. Claro, que la prensa y la oposición se pusieron las botas al enterarse de que al pobre Félix tuvieron que seccionarle el pene, embravecido, para que Marguerite pudiera respirar, Uffff---les detallé simulando gestos de dolor--

Acerté con la historia. A todos les gustó y rieron de buena gana. El tema generó despues mucha controversia, pues algunos hicieron comparaciones con presidentes de gobierno españoles. Entre unas cosas y otras, a eso dedicamos casi el resto de la velada. Por cierto, el relato pasó tal y como lo cuento, y causó realmente un escandalo de magnitudes estratosféricas en la Francia del siglo pasado.

En fin...

Joaquín

                                                                          

                           Felix Faure (presidente de Francia) y Marguerite Steinheil (su amante)


martes, 27 de octubre de 2020

Donde el corazón me lleve..

                                                                                  




Cuando os oigo tocar

campanitas, campanitas,

sin querer vuelvo a llorar. 

Cuando de lejos os oigo

pienso que por mi llamáis

y de las entrañas me duelo 

Me duelo de dolor herida,

que antes tenía vida entera

y hoy tengo media vida.

--Rosalía de Castro--



El lugar donde tuve el gusto de ver la cara de mi madre por primera vez no era, precisamente, idílico. Sí, nuestro pueblo, a qué mentir ni exagerar, no está situado en un verde valle rodeado de montañas nevadas; ni se haya a la orilla de un caudaloso rio de aguas cristalinas. Tampoco puede presumir de la belleza de su hermosa bahía en un cálido mar de ensueño, ni mucho menos. Y es que (que me perdonen mis paisanos) fueron a fundar el pueblo en el lugar menos agraciado de la comarca. 

Si no me fallan mis cálculos Fuente de Cantos está situado a dos leguas del arroyo más próximo y a cinco de la sierra más cercana. Ése pequeño arroyo con ínfulas de río discurre, avergonzado por su escaso caudal, con el pomposo nombre de Bodión. Y con tan poca corriente, por cierto, que se pudiera vadear con zapatillas de andar por casa sin tan siquiera mojarlas.

No tuvimos suerte en lo tocante al medio y lugar cuando nuestros antepasados pusieron la primera piedra del futuro municipio ¡Qué le vamos a hacer! Lo cierto y verdad es que nacimos en un medio natural hostil, una campiña desarbolada y pedregosa, morada de cañafotes y chicharras y sólo apta para ciertos cultivos de secano.

Claro, que el poder gozar de un paisaje natural encantador es una suerte que la voluntad humana no tiene la potestad de elegir, pero el medio urbano sí. De hecho, es el hombre el que lo crea y modula a su antojo y necesidad. Y aquí si puedo con holgura airear las bondades arquitectónicas de nuestro pueblo.

Tenemos un casco urbano pequeño como tal, pero suficientemente acogedor como para que casi todos los aquí nacidos estemos moderadamente a gusto con él. Incluso me atrevo aventurar sin temor a equivocarme que la mayoría de los nativos estamos más que satisfechos y orgullosos de nuestra villa. ¡Y no os cuento cómo la hemos cambiado y rejuvenecido a lo largo de estos últimos cuarenta años!.

No obstante, al margen de condicionamientos naturales y humanos, he de deciros que yo tengo otro pueblo. Sí, créanselo, paralelo al descrito, digamos que rutilante, fantástico, en otra dimensión porque sólo habita en mi cabeza. Se nutre de añoranzas y melancolías y destaca por encima de naturalezas exuberantes o de horizontes de ensueño. Éste otro pueblo que les digo crece y se magnifica en mi memoria con grandes dosis de recuerdos: es mi "Jardín del Edén" afectivo, es mi pueblo de toda la vida, el de los años 60 y 70, cuando yo corría y crecía feliz por sus calles, altozanos y callejas.. Apuesto lo que queráis que cada uno de vosotros tenéis el vuestro..

En fin.. Perdónenme ésta última cursilada..

Joaquín

lunes, 26 de octubre de 2020

El año que nacimos..

                                                                                    





Amiga...

Aquel día me sonreíste y accediste

a bailar, después de mucho insistir.

Fue el inicio de mi sufrimiento.

Yo era feliz en tu negativa.

Al menos tenia esperanza.

¡Ojalá, me hubieras dicho que no

y así apenas te hubiera conocido!

--Joaquín--



Hubo una vez un obispo irlandés, James Usher, (vivió a caballo entre los siglos XVI y el XVII en Dublín, tiempos de nuestro Cervantes) que llegó a predecir el día exacto de la creación del mundo. Según él sucedió al anochecer del domingo 23 de octubre del año 4.004 a.c. Ni un día más ni un día menos.. Esta fecha fue muy valorada por la Iglesia, que la reconoció como verdadera durante varios siglos. El tipo llegó a asegurar también el día en el que Dios expulsó a Adán y a Eva del Paraíso. Fue el lunes 10 de noviembre del 4.004 a.c. Así, tal cual, y se quedó tan ancho..

Ignoro de qué métodos y medidas se sirvió el bueno de James para llegar a esas tajantes conclusiones. Hoy sabemos que la tierra tiene la nada desdeñable edad de 5.500 millones de años, minuto arriba minuto abajo. Y no es por nada, pero si les parece bien yo me quedo con estos últimos datos, los percibo más científicos, más reales; ya saben..

Y digo yo, ¿si apenas sabemos nada de la creación ni del nombre de, por ejemplo, Fuente de Cantos, y eso que ocurrió hace dos días como aquel que dice, cómo demonios vamos atinar en la edad del mundo?.. 

De nuestro pueblo sólo sabemos de 700 años para acá; de ahí para atrás es puro misterio. En 1.293 (siglo XIII) es cuando se le menciona por primera vez. Acuérdense que en ése año estaba la reconquista del sur peninsular en pleno apogeo; Sevilla se la quitamos a los moros en 1247..

Lo sé, alguno me dirá que los Castillejos era el pueblo primitivo, pero reconozcamos que son puras especulaciones. Todo apunta a que los restos allí encontrados pertenecen a diferentes poblados habitados desde el neolítico (5.000 años a.c.) y posteriormente a los romanos. Eso si, algunos historiadores identifican a la ciudad romana de Lacunis con los restos hallados en los Castillejos, sito en el antiguo camino a Calera..

Por cierto, supongo que algunos sabréis que tenemos un pueblo homónimo (tocayo) en España, con un nombre casi idéntico al nuestro. Si, se llama nada menos que Fuentecantos, todo junto, y está en la provincia de Soria.

Y es muy  curioso, ¿sabéis cual es el emblema de Soria?.. Ahí va... “Soria pura, cabeza de Extremadura” Y si encima ésta provincia tiene un pueblo que se llama Fuentecantos,  pues miel sobre hojuelas, ¿no les parece?. ¿Coincidencia? ¿Casualidad? ¿Tendrá algo que ver la trashumancia y la Mesta de la alta Edad media y que algunos pastores sorianos de Fuentecantos fundara nuestro Fuente de Cantos? En fin, no sé; yo, ahí lo dejo..

Joaquín

domingo, 25 de octubre de 2020

Cuestión de apellidos

                                                                            





A veces nuestros labios, como locas
mariposas de amor, se perseguían;
los tuyos de los míos siempre huían,
y siempre se juntaban nuestras bocas.

Los míos murmuraban: -¡Me provocas!
Los tuyos: -¡Me amedrentas!, respondían;
y aunque siempre a la fuga se atenían,
las veces que fugaron fueron pocas.

--Manuel Ugarte--



Supongo yo que llegaría el día en el que éramos tantos en el mundo que necesitaríamos algo muy particular cada uno para poder distinguirnos de los demás. ¡Y se inventaron los apellidos!. Si, ese segundo nombre que nos diferencia a cada uno de nosotros, y del que, por cierto, tan orgullosos estamos todos, aunque nos apellidemos Rufián..😮😮😮

El primer pueblo que utilizó los apellidos fue el chino, y lo hizo en fecha tan remota como el año 2800 a.c. Y todo gracias a un decreto del emperador, Fushi, que obligó apellidarse a todos.

Mirad qué curioso: Los chinos llevan tres nombres. El apellido se coloca en primer lugar, procede de las 438 palabras que componen el poema sagrado Po-Chia-Hsing. 

Al apellido le sigue el nombre de la generación, tomado de un poema de 30 caracteres adoptado por la familia. El último que se coloca es el nombre dado a la persona. Por cierto, los nombres más habituales en china son: Wang (amarillo) Ya (bajo) o Chan (viejo): Con lo que un nombre cualquiera podría ser, Po Li Ya 😂😂😂

La mayoría de los apellidos españoles son de origen patronímico (de padres) y toponímico (de lugar). Así, antes de hacerse los apellidos hereditarios solía usarse el nombre del padre, pero añadiendo el sufijo Ez, (hijo de..) Por ejemplo, si el padre se llamaba Sancho, el hijo tomaría el apellido Sánchez, (hijo de Sancho). ¡Mira por donde, ya sé que había un Sancho en mi familia!.. Bueno, y un Rodrigo, y un Martin y un...😀😀😀

Los apellidos alemanes derivan de oficios o de formas descriptivas, Klein (pequeño) Gross (grande) Kreuser (pelo rizado). Los daneses, patronímicos: al hijo de Jorge Petersen se apellidaría Jorgensen. Los checos de apodos: Hovorka (el que habla demasiado) Kostal (el que vivía en un campo donde se habían cortado coles). Los escoceses, sin embarco, como eran muy de clanes adoptaban el Mc y luego el nombre del clan, por ejemplo John McGuire (Juan, del clan de los Guire). 😐😐😐

En definitiva, el problema no es apellidarse Rufián, sino hacer el indio como lo hace él. Eso sí, un indio muy bien pagado. 😩😩😩

--Joaquín--





El ocaso de los fuertes

                                                                                       



Aquellos que vuelan solos tienen las alas más fuertes.


Según el filósofo Friedrich Nietzsche, los seres humanos (aunque no lo parezca) somos tan compasivos y humanitarios gracias al cristianismo. Ésta religión nos insufló unos valores que antes no existían. 
Sí, acuérdense, en el mundo clásico y hasta la llegada de Jesucristo eran los fuertes los que subsistían y triunfaban. Los perdedores y los débiles, por el contrario, estaban abocados a la servidumbre. Los griegos y los romanos admiraban la perfección y la belleza en los hombres, tanto física, intelectual o de poder. Apenas se daba entre ellos indulgencias como la compasión o la lástima, y menos aun la solidaridad, según la entendemos ahora... Pero..
Con la venida del cristianismo se trastocó todo, y los débiles tomaron el poder. Los esclavos y menesterosos (siendo mayoría en la sociedad) odiaban a patrones y triunfadores, minusvalorando cuando no despreciando sus orgullos y arrogancias. Se decían prestos a obedecerles (no les quedada otra) pero despreciaban valores supremos como.. moral, gloria u honor, más propios de la clase alta de la sociedad.
Como los siervos son débiles promueven valores menores como mansedumbre o misericordia, y critican el egoísmo o la fortaleza, méritos exclusivos de los vencedores. Y es que, según la biblia, Jesús dijo aquello de: "los sumisos y humildes heredaran la tierra"... Y entonces los pobres aprovecharon y se rebelaron. ¡Ojo!, lo dice Nietzsche, no yo...
Joaquín

sábado, 24 de octubre de 2020

La infidelidad sucedió en Navidad

                                                                                



Mi corazón, un día, tuvo un ansia suprema,

que aún hoy lo embriaga igual que lo embriagó ayer;

quería aprisionar un alma en un poema,

y que viviera siempre... pero no pudo ser. 

--José A. Buesa--



Sucedió por Navidad: 

Cornelio, aún sabiéndose cornudo de verdad, se negaba a creer que su mujer, Eloísa, hermosa y lozana, sí, pero muy casta, yaciera en la cama nada menos que con el mismísimo Papa de Roma. Pero ante las pruebas tan evidentes que le proporcionó su amigo Desiderio, ujier del Vaticano para más señas, no tuvo más remedio que ir a comprobarlo con sus propios ojos.

Cierto día, y gracias a la inestimable ayuda de su amigo, fue capaz de traspasar los controles que daban acceso a los aposentos papales. Entró sigilosamente en la cámara privada del Papa y los pilló in fraganti. Allí estaban los dos, su mujer y el Papa, duro que te pego jadeando de placer como posesos.. 

No sabemos qué pasó por la cabeza de Cornelio, imaginároslo; tuvo que ser algo muy gordo. Según contaron después, primero se puso rojo de ira y luego a punto ya de reventar del cabreo se lio a palos con el Sumo Pontífice hasta dejarlo tullido a golpes..

Se ignora qué contundente objeto utilizó para la somanta, quizás el báculo papal que estaría por allí, pero, ¡¡Ay, Dios, qué retahíla de garrotazos le endiño al Sumo!!

El Pontífice garañón apenas tuvo tiempo de saltar de la cama, tapar sus vergüenzas con su túnica, calzar sus desnudos pies y salir por patas de aquel infierno de mamporros que le caía encima... De Eloísa, su mujer, mejor no hablar, conociendo a Cornelio me imagino el negro futuro que le esperaba a la pobre.

Juan XII, el Papa apaleado, no le quedaron ganas de repetir hazañas amorosas y menos en carne ajena. Arrepentido de su furor sexual, que a la postre le llevó a quedar postrado en cama sin poder mover ni las pestañas del dolor, relató sus lúbricos pecados a su confesor antes de expirar. Tiempo tuvo para eso; agonizó durante tres largos días con sus noches tras la soberbia tunda de palos..

Nada se sabe de cómo le fue a Cornelio y a Eloísa, aunque, como ya he dicho antes, por nada del mundo me hubiese gustado estar en el lindo pellejo de aquella atrevida dama, su mujer... 

Por cierto, éste episodio sucedió realmente en el año 964 del Señor, y nada que ver Juan XII, con el carácter austero y casto del Papa Francisco; todo parecido es pura coincidencia..

En fin. 

Joaquín




viernes, 23 de octubre de 2020

Crónicas de un pueblo..

                                                                                 




En una noche clara 
cuajada de besos
y luna llena te encontré
En una noche oscura
de silencios y amarguras
te perdí.
--Joaquín--


Decía Dolores Redondo, esa estupenda escritora de novela negra “Morir, como nacer, no es sencillo, puedes hacerlo solo, pero es mejor si tienes ayuda, si hay alguien esperándote a los dos lados del camino”.

Para nacer en Fuente de Cantos hace unas cuantas décadas ayuda familiar había, y mucha, pero ayuda material muy poca. Sobre todo si tenias la mala suerte de venir al mundo en el extrarradio. Para morir pasaba igual; más o menos..

La suerte de un fuentecanteño que naciera hace ocho o diez décadas dependía del barrio o calle en la que viera la luz por primera vez. Si el suertudo bebé lo hacía en la calle Martínez o en la de Hernán Cortés (aún no se llamaba Nicolás Megía), posiblemente lo bautizaran sus adinerados padres sin prisas, a los tres o cuatro meses de vida y con todo el boato posible. Y tal vez poniéndole de nombre de pila uno compuesto y muy rimbombante. 

Por el contrario, si al infortunado neonato se le ocurriera asomar la cabeza en cualquier casa de la calle Almena o San Blas, sus empobrecidos padres lo llevarían raudo a bautizarlo, sin florituras ni agasajos, no vaya a ser que muriera antes de cumplir las tres semanas de vida. Por cierto, el nombre a ponerle, con Manuel o Antonio iba que chutas..

De los 365 niños que nacieron en 1920 en el pueblo (mi abuelo ya era talludito entonces) la mayoría de ellos negras perspectivas de felicidad tenían. Si acaso los 20 o 25 vástagos de los señoritos del centro llegarían a los setenta y con la tripa llena. Ése mismo año hubo en el pueblo cinco partos de gemelos y dos alumbramientos por parte de madres solteras. Claro, que según estaba el panorama quizás éstas pobres dejaran a sus bebés en la inclusa, cosa muy habitual, por otra parte..

Noventa bodas y 214 funerales (perdón por hacer un símil de aquella conocida película) hubo ése mencionado año en nuestro pueblo. De los fallecidos, tal vez ciento y pico fueran niños, aquejados de sarampión o colitis. Las bodas, todas celebradas en la parroquia y en los meses de septiembre y octubre. Y es que entonces no miraban la disponibilidad de los salones ni la pasta gansa a apoquinar; se atendía principalmente a la sementera (en estos meses había más trabajo y los novios podían darse algún gusto)..

Como en 1920 éramos un gran pueblo además de un pueblo grande, el sector servicios ocupaba a mucha gente, aunque la mayoría eran campesinos y jornaleros. Por eso llegamos a tener dos fábricas de armas, siete barberías, seis herrerías, seis hojalaterias, una fábrica de jabón, otra de aguardiente y hasta una buena imprenta, ¡ah!, y tres casinos (con sus socios) por falta de uno..

Al igual que ahora, en aquellos años también éramos un pueblo muy tranquilo; lo demuestra los escasos diez municipales al mando de un cabo que velaban por la seguridad de nuestros abuelos. Y muy modernos para la época, porque incluso teníamos una mujer de guardia municipal. Eso sí, no creo que tramitaran mucho papeleo, puesto que la mayoría no sabia leer ni escribir. Completaban la plantilla municipal: el director de la cárcel, el telegrafista, el secretario del ayuntamiento, dos escribientes y un barrendero. Como ven escasa plantilla. Nada ver con la de ahora, claro..

En las páginas del cotilleo de la época podríamos incluir dos noticias que ocurrieron en el pueblo en aquellos días: una, la muerte de un poeta amateur, Máximo Rodríguez, un campesino analfabeto, pero con unos dotes extraordinarios para rimar palabras (vivía en la calle Carmelitas) y la otra Zelima, una guapa cupletista de 20 años, también nacida en el pueblo y que murió asesinada en Fregenal por un fulano con dinero, enamorado. El luctuoso suceso fue noticia de portada en los periódicos de la provincia..

En fin, cosas que ocurrían en nuestro pueblo no hace mucho. Mientras tanto en Italia Mussolini llegaba al poder, Irlanda se independizaba del Reino Unido, y James Rickard descubre la insulina; en España Primo de Rivera se preparaba para su golpe de estado..

Joaquín

jueves, 22 de octubre de 2020

A vueltas con el tiempo

                                                                                   


 


Cinco minutos bastan para soñar toda una vida. Así de relativo es el tiempo.
(M. Benedetti)

Mirad qué preguntas.. ¿Existe el pasado?. Yo creo que no. ¿Y el futuro?. Pues tampoco. Bueno, quizás existan pero solo en nuestras cabezas. El presente es lo único real y verificable.
Si preguntáramos a alguien, qué es el tiempo, estoy seguro que no sabría qué decirnos, Decía San Agustín cuando alguien sacaba el tema a colación “Si nadie me lo pregunta, lo sé; si deseo explicarlo a quien me lo pregunta, no lo sé” Y no le faltaba ni pizca de razón al bueno de San Agustín. Difícil y peliagudo asunto éste, porque...
El tiempo subjetivo de cada uno es ya de por sí muy relativo. Por ejemplo, imaginaros por un momento (si no tenemos en cuenta los relojes) la gran diferencia que hay entre los quince minutos sufridos ante el dentista cuando nos hacemos una ortodoncia, con los quince minutos que disfrutamos en compañía de unos buenos amigos tomando unas cañas de cerveza; pues ésa variabilidad e inconsistencia del tiempo nos lo reveló Einstein con su teoría.
A la velocidad de la Luz (300.000 kms por segundo) el tiempo se dilata, varía, no es fijo ni inamovible como pensábamos. Es más, el tiempo ya no sería lo que es, sino que pasa a ser otra dimensión, como el espacio. Sí, ya sé que es muy difícil de comprender, el mismo Einstein no pudo demostrarlo. Ahora, cincuenta años después de su muerte, lo estamos comprobando.
Suelen poner siempre el mismo ejemplo, el los hermanos gemelos, para explicar lo del tiempo. Si a uno de ellos lo embarcamos hacia el espacio en una nave espacial a velocidad cercana a la de la luz, y al otro simplemente lo dejamos aquí en su casa, al cabo de unos años, el viajero, a su vuelta, habrá rejuvenecido un montón de años respecto a su hermano. El tiempo a esas velocidades transcurre mucho más despacio.
Nos regimos por el tiempo de siempre, por supuesto y aun nos sirven los viejos relojes, pero imaginemos qué puntazo será cuando podamos alcanzar esas velocidades cercanas a la de luz. Pues que en vez de dejarnos hacernos un lifting en la cara y piel por un cirujano plástico, nos daremos una vuelteceita alrededor de la tierra y aterrizaremos hechos unos pinceles y unos cuantos años más jóvenes.. Claro, que otra cosa será el precio.. En fin..

Joaquín Yerga


miércoles, 21 de octubre de 2020

Cuando esto acabe...

                                                                               





Acuérdate, amigo..
Ocurrió durante aquel vendaval invisible, 
callado y letal, llegado de oriente que
a su paso tanto dolor y muerte dejó.
La tierra quedó herida, la gente lastimada,
los sueños rotos, las ilusiones perdidas... 
--Joaquín--


Cuando todo esto termine será como cuando un violento tornado acaba de pasar por un pueblo del centro-oeste americano y la gente sale a la calle por primera vez a comprobar qué ha quedado en pie. Quizás nosotros tengamos que hacer lo mismo.
Sí, cuando acabe ésta calamidad podríamos ir a la plaza del barrio y pasar lista uno por uno a comprobar quienes faltan. Apuesto que nos llevaríamos grandes sorpresas al ver la enorme cantidad de conocidos que ya nos están entre nosotros. A Jesús, por ejemplo, ése simpático vecino que muchas mañanas me señalaba un lugar dónde aparcar mi coche en nuestra atestada calle, no volveré a verlo. Tampoco podré ya saludar a algunos amigos (porque han muerto) y a sus parejas, bailando un pasodoble en el Ninot, o en el Golden de Gran Vía los sábados por la noche..
No, ya no volveré a ver a Pablo sudando la gota gorda en la pista de baile, meneádose al ritmo de un merengue, ni a Esteban y Guadalupe, bien agarraditos y compenetrados, marcándose un tango, que tan bien lo hacían; desgraciadamente el virus se los llevó por delante..
Ignoro a cuántos más me tocará echar de menos. Esto no ha hecho más que empezar. Sólo una cosa tengo clara, miedo me da retomar la normalidad y volver a nuestras salas de fiestas. Es ahí, cuando empiece a mirar a un lado y a otro y los vea vacíos, cuando seré verdaderamente consciente de la tragedia, mi tragedia..
Joaquin



Una estrella que brilla más que el sol..

 




Aquel día me sonreíste y accediste

a bailar, después de mucho insistir;

fue el inicio de mi padecer.

Yo era feliz en tu negativa;

al menos tenia esperanza.

¡Ojalá, me hubieras dicho que no

y apenas te hubiera conocido!

--Joaquín--



Hace miles de años, justo en el solsticio de verano, una estrella salía por el horizonte un poco antes del amanecer. Los antiguos egipcios la conocían como, La Estrella de Isis, y anunciaba fielmente todos los años el desbordamiento del Nilo. A ésta misteriosa estrella la llamaban también, la Estrella del Perro, por estar en la constelación Can Mayor.

Los romanos, más tarde, homenajeaban la estrella a finales de abril, cuando se pone al anochecer, con un complicado ritual en el que un sacerdote quemaba las entrañas de un perro rojo

Mahoma prohibió para los musulmanes el culto a ésta estrella por idolatría. Incluso en la Edad Media consideraban su influencia perniciosa. Si no se la veía por cualquier circunstancia era señal de peligro: grandes calamidades y terroríficas catástrofes se abatirían sobre la tierra.

Hoy sabemos que éste enigmático astro, la Estrella del Perro, es realmente Sirio, las más brillante del firmamento. Es una estrella del tipo blanca azul, está a unos 8,8 años luz de nosotros (72 billones de kilómetros) y es 25 veces más luminosa que el sol. 

Si os apetece verla mirad al sur, casi sobre el horizonte, cualquier noche de invierno y primavera.. Y si no la veis, avisad, algo grave va a suceder en la tierra. ¿O tal vez haya empezado ya?. No hay más que mirar hacía Ucrania..

Joaquín






lunes, 19 de octubre de 2020

Y sin embargo se mueve..




No me aplaudan si bien lo hago,

ni me reprendan cuando yerro.

Lo primero, más que halagar abruma.

Lo segundo, más que enseñar, disuade.

--Joaquín--



Tales de Mileto, el considerado primer filósofo de la historia, dijo hace 2.500 años que la tierra era plana. Sí, algo así como una isla rodeada de un mar infinito. Anaximandro, su discípulo, la imaginó como un cilindro rodeado por una esfera hueca llena de estrellas. Pocos le creyeron. Sin embargo el asunto de la esfera caló entre los sabios de entonces...

Poco después de Anaximandro, Pitágoras, ya sugirió que la tierra podía ser redonda, e Hiparco, 400 años más tarde, midió de manera teórica la tierra y especuló con que ésta se movía.. ¡Ya íbamos sabiendo algo más!..

En el siglo III a.c. Aristarco de Samos dejó escrito que los planetas, incluida la tierra, giraban alrededor del sol, y no éste alrededor de nosotros, como se creía. También dijo que el sol era mucho más grande que nuestro planeta. Pero vino Ptolomeo en el siglo II, d.c. ¡Y jodió la cosa!...

El griego Claudio Ptolomeo ideó un enrevesado sistema cósmico de planetas, estrellas, sol y luna, que plasmó en una serie de ilustrados volúmenes y que incomprensiblemente cuajó entre la intelectualidad. Ésta teoría estaba muy equivocada, ponía a la tierra como el centro del universo. Pero su obra se consideró la Biblia de la cosmología. ¡Ya ven!..

En la Edad Media la gran obra de Ptolomeo se tradujo al árabe y luego al latín, desde donde nos llegó a todos. El libro es uno de más importantes de la antigüedad, se llama Almagesto.. 

Menos mal que 1.500 años más apareció Copérnico y por fin vimos la claridad; descubrió el sistema heliocéntrico, es decir, el centro es el sol y no la tierra.. Claro, que ahora también se nos ha quedado corto..

En fin..

Joaquín

Estrellas fugaces..

                                                                                            



Si te dijera, amiga,

que temo la madrugada.

Si supieras de mi angustia

en esta noche estrellada,

mil señales enviarías

a consolar mi alma.

--Joaquín--



El 10 de agosto del año 256 d.c. cuatro días después del martirio y ejecución del papa Sixto II, un prefecto de Roma dijo a un diacono cristiano llamado Lorenzo que le entregara los objetos valiosos de su iglesia y las propiedades de ese Papa. Cuando Lorenzo se presentó en el puesto del prefecto con un grupo de personas pobres y enfermas, anunciando que aquellos eran los tesoros de su iglesia, el testarudo funcionario entró en cólera y ordenó matar al diácono.

Según la tradición cristiana, la condena se llevó a cabo de una manera atroz, inhumana; Lorenzo fue atado a una parrilla de metal, puesto encima de unas brasas incandescentes y asado a fuego lento. Así como suena...

Aquella noche el cielo se encendió de estrellas fugaces que parecían caer en torrente desde el infinito más allá. ¿Se imaginan la cara de los cristianos que presenciaron la muerte de Lorenzo? ¿Y los que supieron del martirio ante semejante espectáculo, en ése cielo despejado de primeros de agosto? ¡Un milagro, un milagro! Seria lo que menos gritarían...

Y resulta que la escena se repetía cada año por las mismas fechas. Y entonces pusieron de nombre a ésas estrellas fugaces “Lagrimas de San Lorenzo” Y en esas estamos todos los 10 de agosto de cada año. Aunque, a decir verdad, la cosa es más, digamos prosaica, resulta que son el resultado de la fricción del polvo que suelta un cometa al tocar la atmósfera de la tierra; arde al entrar en contacto, y justo todos los años en las mismas fechas.. En fin..

Joaquín

domingo, 18 de octubre de 2020

El libro más corto jamás escrito

                                                                                   




Amiga...

Tú que sabes del amor y con los dos hablas,

no le digas nada de mi sufrimiento.

Sé que te incomoda mi dolor y le pedirás que vuelva

a mi lado, que no vivo sin ella.

Comprendo tus ganas de ayudar,

has visto la ruina de un hombre herido.

Pero no puedo rogarle más.

Intentaré cerrar las heridas en silencio,

mientras aguardo el milagro del olvido.

--Joaquín--



Pulula por algún mentidero, poco serio todo hay que decirlo, una consideración escrita por un autor anónimo que dice: ¿Cuáles serían los libros más cortos de la historia?. Incluso nos da la respuesta: “Ética judía de los negocios” “Héroes de guerra italianos” “La historia completa del humor alemán” “Grandes amantes británicos” o “Biografías de los mejores científicos españoles”.. Después de ver los títulos de estos cortisimos libros comprendo perfectamente que su autor no de la cara, se la partirían por su mala pipa..

Una reflexión que hizo en su día un tal John Elliot, (reconocido hispanista inglés) con cierta guasa es la que sigue: ¿Cómo seria el cielo perfecto?.. y llegó a la siguiente conclusión.. Sería estupendo si se pudiese contar allí con un policía inglés un cocinero francés, un ingeniero alemán, un amante italiano, y toda la organización a cargo de un suizo; saldría todo a pedir de boca..

Pero, claro, en contraposición a lo anterior también se preocupó de echarle un vistazo al infierno perfecto, es decir, al más terrorífico averno. Para ello pensó contar con lo siguiente: Un cocinero inglés, un ingeniero francés, un policía alemán, un amante suizo, y todo organizado por un italiano. Como ven los personajes son los mismos, sólo cambia el orden. Yo en ése infierno perfecto sólo echo de menos para estar completo algún político español que redactara las leyes.

Decía el escritor español Baltasar Gracián que el español es la lengua de los enamorados, el italiano la de los cantantes, el francés de la diplomacia, y el alemán la de los caballos; todavía hay muchos que lo piensan.. Sin embargo Baltasar no conoció el auge del inglés; de haber vivido hoy en día seguro que hubiera cambiado el orden... 

Por cierto, del alemán, pensaba Richard Porson, novelista inglés, “La vida es demasiado corta para aprender alemán”.. 

En fin.. 

Joaquín