martes, 22 de junio de 2021

Qué vería en ella para romper el compromiso de boda y le devolverle el anillo

                                                                                   



Juventud muerta en mi pecho.

¿por qué siembras de inquietud

el descanso de mi lecho?

¿Qué has hecho de mi, qué has hecho,

juventud?

Voluntad  que yo he fraguado

en mi dura soledad

para huir de lo deseado,

¡Por qué me has abandonado,

voluntad?

Alma mía, ¿qué pretendes

al provocar alegría 

con la que mí espíritu enciendes?

¡Ya es tarde! ¿no lo comprendes,

alma mía?

--Luis R. Contreras--



Es un tipo singular, distinto; no encaja bien entre la gente, y se ha enamorado, raro en él, pero se ha enamorado. Regina se llama la chica. Ella también le corresponde, incluso se ha atrevido a pedirle en matrimonio en cuanto se conozcan un poco más.

Y le ha dicho que sí. ¡Oh!, ella le ha dicho que sí, que se casa con él. Menos mal, la vida empieza a sonreírle, ¡por fín!... Felices se le ven de la mano.

Ya están con los preparativos de la boda.. Pero.. ¡Uy!. ¡Esperad! Creo que ha cambiado de idea. No hace más que darle vueltas al asunto. En el fondo no se ve casado. ¡Qué os parece! ¡Será posible! ¡Vaya tontainas!.

Debe ser por lo pesimista que es, que lo ve todo negro. Nada, nada, perdonadle, pero se ha echado para atrás. Se ha agobiado por la responsabilidad de compartir la vida con nadie.

¡Buaaa!, lo dicho: finalmente ha escrito a Regina diciéndole que no puede casarse.. Incluso le ha devuelto el anillo de compromiso.. ¡Idiota!..

La pobre Regina se ha quedado destrozada. Y no es para menos ¡Menudo mentecato!. Y no será que no le ha insistido ella para que reconsidere la actitud.. Pero, nada nada, el tipo se mantiene firme; no hay manera, ¡¡No quiere casarse!!

Ha pasado ya un tiempo prudencial de todo eso y el gilipollas ya está arrepentido de la decisión.. Unas cuantas noches lleva sin dormir.. Ahora llora por su amor perdido!.¡A buenas horas mangas verdes!

El caso es que por unas cosas y por otras, el tipo ha enfermado. ¡Se nos está muriendo!. ¡Ay!, el pobre ha muerto, y nosotros insultándole.. Era joven, apenas 42 años tenía. Eso sí, nunca se casó por su mala cabeza..

Por alguna parte he leído que Regina se cansó de esperar y de insistir. Se desposó con un funcionario, tuvo muchos hijos y fue muy feliz.. 

En cambio él se nos murió solterón. No volvió jamás a tener novia y, como os he dicho: fue tremendamente desgraciado. Ella fue el amor de su vida. Además su relación fallida fue la fuente de casi todo lo que escribió y padeció en su breve y atormentada vida..

Por cierto, éste indeciso y torturado tipejo del que hablo es, Soren Kierkegaad, danés, uno de los mejores y más influyentes filósofos de la historia, padre del llamado, existencialismo. 

Claro, que él ni se enteró en vida.. Sólo hizo, sino llorar y sufrir por un amor perdido.. 

Moraleja: en la vida quien no arriesga no gana, aunque sea para casarse.. 

Joaquín





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