Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar,
tu corazón de su profundo sueño
tal vez despertará.
Pero mudo y absorto y de rodillas,
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido…desengáñate,
¡así no te querrán!
--Bécquer--
Ocurrió un día de octubre bajo la tenue luz de la tarde.. Un cuerpo inerte fue encontrado durante una crecida del Nilo, en Egipto. Se trataba de un chico joven, de unos 19 años y de complexión atlética. Su rostro, aunque deformado por la muerte, parecía haber sido diseñado con bellos trazos. Su nombre se supo después, era Antínoo.
En las primeras pesquisas realizadas al cuerpo del chico descubren que no había sufrido violencia aparente, con lo que su muerte pudo ser debida a causas pacíficas o naturales. Se especuló, ¿veneno, tal vez? ¿Un sutil asesinato? ¿Un suicidio?..
Realmente nunca se supo por qué murió Antínoo, pero sí conocemos la reacción de su amante, el gran emperador de Roma, Adriano..
--Mientras navego por el Nilo perdí a Antinoo, por quien lloro amargamente como una mujer---escribió Adriano en su diario.
Algunos dijeron que Antínoo se suicidó para salvar el honor de su amante, el emperador, muy criticado por su romance homosexual con él.. Otros opinaron que lo hizo para mitigar el sufrimiento de Adriano, pues tenía éste cincuenta y cinco años ya, y no podía satisfacer el ardor amoroso de los diecinueve años del chico..
Adriano quiso con locura a Antínoo. Lo había conocido con apenas catorce años. Había crecido en sus brazos, casi..Agrió el carácter a su muerte. Ya nunca fue el mismo.
Sufrió lo indecible cuando murió. Lo había mimado tanto en vida, que incluso le construyó una ciudad para él a su muerte, Antinoopolis la llamó.. la diseñó el propio emperador..
Más de dos mil estatuas, esfinges, tallas y figuras con su cuerpo y su rostro adornaban calles, avenidas y plazas de Antinoopolis.
Por cierto, de Adriano podríamos decir que nació en Sevilla (Itálica) y que está considerado uno de los mejores emperadores del Imperio..
Joaquín
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