Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar,
Me encontrareis a bordo ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar.
--A. Machado--
Había una vez un tipo en un pueblo de Pensilvania de casi cuatro mil habitantes, que se sabía los nombres de pila de todos y cada uno de sus convecinos. Es más, cada vez que este hombre se encontraba con alguno de ellos por la calle le saludaba efusivamente por su nombre, y jamás se equivocó..
Ése individuo llegó a ser un personaje muy querido y respetado en su comunidad. Digamos con toda rotundidad que, gracias a su buena memoria y simpatía triunfó en su pueblo.. fue feliz..
¿Os imagináis a un tío así en Fuente de Cantos? Sí, uno que tuviera la misma memoria de elefante que ese hombre de Pensilvania y conociera a todos los 4.700 fuentecanteños por su nombre de pila... Sería un puntazo.
Desde luego si yo tuviera que apostar por uno sería, sin duda, mi amigo, Antonio “Chaqueta”. Casi todos los del pueblo recurrimos a él cuando necesitamos saber algo de alguien, o sobre un episodio ocurrido años atrás en la localidad.
Y es que, ya lo decía el escritor Dale Carnegie, para toda persona su nombre es el sonido más dulce..
Dale Carnegie escribió una especie de manual de autoayuda concebido para influir en la sociedad y mejorar nuestro bienestar personal. Su título es muy expresivo: “Cómo hacer amigos e influir en la gente”..
Lo bueno y diferente de otros es que fue escrito en los años treinta del pasado siglo, es decir, no pertenece al boom de los actuales, en donde hay estanterías repletas de títulos como éste en las librerías.
La idea de Carnegie es que, si nos mostramos benevolentes y generosos con los demás, esta actitud revierte después en nosotros como un boomerang, pero multiplicado por diez..
Pero sus reglas no son fáciles de seguir, pues deberemos esforzarnos lo suficiente para cumplirlas.
Aunque si actuáramos así, nos asegura, tendremos ganado el cielo social y colectivo, porque contaremos para ello con muchos amigos para disfrutar una vida plena de felicidad.
Algunas de las pautas a seguir que él consideró indispensables para que aquel que se lo proponga le vaya bien en la vida, son agotadoras.. Fijaos..
--Sé un buen oyente..
--Interésate sinceramente por los demás..
--Intenta siempre sonreír a la gente.. O esta otra
--Habla pensando en lo que le interesa a los demás..
¡Ufffff con los tiempos que corren!. No sé vosotros.. yo me lo pensaré..
Joaquín Yerga
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