¡Oh!, siglo decadente, que te jactas
de poseer la verdad, tú que haces gala
de que con Dios, y con la muerte pactas,
devuélveme mi fe extraviada.
¡Tengo sed de saber y no me enseñas;
tengo sed de avanzar y no me ayudas;
tengo sed de creer y me despeñas
en el mar de teorías en el que sueñas
hallar las soluciones de tus dudas!
--Amado Nervo--
Mirad qué símil más fascinante para representar en un mapa a escala humana la inmensidad de nuestra galaxia.
Haría falta lo siguiente:
Si un grano de sal fuese una estrella como el Sol, necesitaríamos 10.000 paquetes de sal y esparcirlas por una superficie plana más grande que la sección de la tierra, cada grano sería una estrella. Así sería el mapa.
Conste que eso sería sólo nuestra galaxia, porque si hay, como dicen los científicos, la friolera de 100.000 millones de galaxias, pensad..
Las distancias en el cosmos son siderales, monstruosas para nuestra humilde percepción humana. Reflejarlas en un plano a escala manejable es imposible. Si tuviésemos que hacer también un mapa a escala sólo de nuestro sistema solar, habría que hacerlo de la siguiente manera:
Si el Sol fuese un pomelo, la tierra sería un grano de sal situado a 9 metros de distancia; 50 metros más allá habría un hueso de cereza que representará a Júpiter; y otros 50 metros más allá habría otro hueso de cereza que sería Saturno. Plutón sería un grano de arena situado a 500 metros de distancia del pomelo.
En fin, mejor me callo porque me mareo.
Joaquín
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