Tuve un
amor cobarde.
Lo tuve y lo
perdí…
Para tu amor temprano ya es
demasiado tarde,
porque en mi alma
anochece lo que amanece en ti.
--José A. Buesa--
En abril de 1917 falleció nuestro segundo pintor favorito, Nicolás Megía Márquez.
El rotativo pacense La región extremeña publicó esta breve necrológica:
«Ha fallecido en Madrid nuestro ilustre paisano de Fuente de Cantos, don Nicolás Megía, profesor de la escuela de Artes y Oficios; era un pintor notable y algunos de sus cuadros llamaron la atención en las exposiciones donde figuraran, mereciendo de la crítica grandes elogios. A su familia le damos el pésame por la pérdida que acaba de sufrir y que deben lamentar vivamente todos los extremeños».
Había nacido Nicolás el día 6 de diciembre de 1845 en la casa número 22 de la calle de su mismo nombre, conocida en aquella época como Hermosa. Tras sus frustrados estudios de Medicina, se volcó de lleno con la pintura, alcanzando una gran maestría y destreza.
Conocido su fallecimiento, en Fuente de Cantos se acordó perpetuar su recuerdo colocando una placa en la casa donde nació y que aún se conserva su la fachada, con el siguiente texto:
«La villa de Fuente de Cantos a su hijo esclarecido D. Nicolás Megía Márquez, pintor de Historia, nacido en esta casa el 6 de diciembre de 1845».
La placa la descubrió Antonio Barrientos, Alcalde Fuente de Cantos, el 27 de enero de 1918, que pronunció una elocuente y sentida improvisación, enalteciendo los méritos del que fue nuestro paisano ilustre.
En el primer aniversario de la muerte de Nicolás Megía, el 14 de abril de 1918, se celebró en el salón de sesiones del Ayuntamiento una conferencia de divulgación organizada por la Sociedad Cultural «Club Megía». La sociedad que se honró con el nombre de Megía declaró:
"Al hijo preclaro de esta villa, don Nicolás, a quien aún lloramos sus buenos amigos, y al que, con motivo del aniversario de su fallecimiento, ofrendamos con un recuerdo envuelto en una oración".
Uno de los gestos generosos del pintor fue el legado a favor del Estado (Museo de Arte Moderno) de un cuadro muy importante que le había regalado su amigo, el también pintor José Casado del Alisal.
Y digo yo, que ya nos lo podía haber regalado a su pueblo, Fuente de Cantos, junto a algunos de sus cuadros que luego se los quedó su hijo. Hoy tendríamos uno de los mejores museos de la provincia..
En fin. No hemos tenido suerte con nuestros genios, nada de eso..
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