jueves, 22 de diciembre de 2022

No era de Fuente de Cantos, pero aquí las hay igual de guapas, casi..

                                                                                 



Y nuestro amor, recuerdo, fue un amor diferente

al menos al principio, ya no, naturalmente.

Usted será el crepúsculo a la orilla del mar,

que según quien lo mire será hermoso o vulgar.

Usted será la flor que según quien la corta,

es algo que no muere o algo que no importa.

--José Ángel Buesa--



Corría el año 1943 y la carrera de mi actriz favorita estaba en lo más alto. Era feliz porque estaba embarazada de su novio. De pronto estalló una epidemia de rubeola en Hollywood que obligó a confinar a la población. Mi actriz hizo lo propio, saliendo sólo por motivos laborales.

Mi joven actriz, de 22 años entonces, tenía una salud excelente y continuó con su agenda habitual, que incluía rodajes, sesiones de fotos, entrevistas y algún que otro encuentro con sus fans. Todo bajo estrictos controles médicos.

Un día sintió cierto malestar. Preocupada por una leve fiebre y erupciones cutáneas fue al médico, que le confirmó que había contraído la rubeola, pero que no se preocupara que no tendría consecuencias para su bebé. ¡Qué iluso!..

Cuando dio a luz a su hija Daria, no daba crédito: la rubeola había afectado al bebé; ¡¡la niña era sorda, tenía una ceguera parcial y una profunda discapacidad intelectual!!.

Quedó destrozada. Se hundió en una depresión, ¡Ufffff, y en el momento álgido de su carrera! Su vida personal se desmoronó. De hecho, salir le costó Dios y ayuda. 

La casualidad quiso que en 1955, mi admirada actriz (ya repuesta) se encontrara con una fan (a la que había abrazado en 1943) que le confesó la cruel verdad: se había saltado la cuarentena estando enferma de rubeola, sólo para besarla y, ¡¡Ella fue la que le contagió!!.

¡Ay, Dios, conocer el estúpido motivo por el que su niña era casi un vegetal fue la hecatombe!.. Recayó de nuevo..

Mi actriz favorita intentó quitarse la vida en 1957, tras llevar dos años internada en un centro psiquiátrico. Se había retirado del cine dos años antes, y no conseguía levantar cabeza. 

Siete años después y tras un intenso tratamiento, por fin, volvió a actuar. Tenía ya 42 años y seguía bellísima.

Por cierto, no os lo he dicho, se trata de Gene Tierney, y está considerada la actriz "más bella que jamás ha existido". 

Gene se casó tres veces y había tenido amores con John F. Kennedy. Murió en 1991 a los 70 años de edad. A mi me partió el corazón cuando lo supe.

Su hija Daria moriría en 2010, con 66 años, en el centro donde fue internada y sin haber superado nunca una edad mental de dos años. 

Cada vez que reponen una película suya jamás me la pierdo.. Os recomiendo "Laura", "El fantasma y la Sra. Muir" "El filo de la navaja" o "Que el cielo la juzguePor cierto, la primera y la última recuerdo haberla visto en el cine de D. José, siendo yo jovencito. Entonces me enamoré de Gene, y en eso sigo..

Joaquín

                                                                        

                                                          Gene Tierney                       




No hay comentarios:

Publicar un comentario