El fuentecanteño que hablaba tan rápido que nadie lo entendía

                                                                                     

 

¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso
te vi celoso imaginando agravios,
te suspendí en mis brazos... vibró un beso,
y qué viste después...? dulzura en mis labios.

Yo te enseñé a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.

--Gabriela Mistral--

¿Qué idioma creéis que se habla más rápido, más frenético? ¡Esperad! A ver si acierto. ¿A que me vais a decir que el inglés o el alemán?. Pues no, es el español el más rápido de Europa, con diferencia. 

De los principales idiomas del mundo, el nuestro sólo es superado en velocidad por el japonés. Y eso que cuando oímos hablar a un guiri nos parece que habla super rápido, pero, claro, eso es porque no lo entendemos.

El italiano es el siguiente más rápido, pero sus vocales largas lo hacen considerablemente más lento que el español. Luego va el francés, el inglés y por último el alemán, que es el más lento ¡Qué os parece! ¡Quién lo iba a decir!.

El baremo para comprobar si un idioma es rápido o lento depende de las consonantes que usen. Como el alemán tiene muchas, el ritmo es pausado, aunque suene atronador. Por el contrario muchas vocales, como el nuestro, el ritmo es frenético.

Las lenguas latinas suelen tener muchas vocales abiertas, de ahí que los españoles, los portugueses o los italianos, corremos que nos las pelamos hablando. Que nos lo digan a nosotros, los fuentecanteños, porque creo que los extremeños aún aceleramos más si cabe...

Ya lo dijo Carlos V, que sabía varios idiomas: hablo español a Dios, italiano a las mujeres, francés a los hombres y alemán a mi caballo. 

En fin

Joaquín