domingo, 18 de junio de 2023

Nunca te fíes del destino

                                                                             




Y te digo que es bella, porque es bella,

pero no sé decir, cuando lo digo,

si pienso en ella porque estoy contigo

o estoy contigo por pensar en ella.

--J. A. Buesa--


Yo no escogí el lugar dónde nací. Yo no escogí a mis padres. Yo no escogí el entorno que afectó mi niñez y moldeó mi carácter. Yo no sé a ciencia cierta cuándo será mi muerte.. ¿Entonces?. ¿Eligió el destino mi suerte? ¿A él le debo lo bueno y lo malo que me ha sucedido y sucederá en la vida?..

Claro, que luego lo pienso bien y me rebelo, porque...

Entiendo que puedo elegir a mis amigos. Y elegir a qué dedicarme en la vida. Y descubrir mi vocación. Y buscar a la mujer con quien casarme. Luego.. ¿Me eligió a mi es destino o lo elegí yo? ¿Quizás mitad mitad?

En fin, va es ser eso, mitad mitad.. Porque está claro que hay cosas que dependen de mi, otras no. 

Por eso, si alguien me preguntara si controlar absolutamente mi destino depende absolutamente de mi, diría que no, por supuesto.

Esto viene a cuento porque existe la pugna entre quienes dan por hecho de que todo lo que existe en el mundo es producto de un azar que puede ser comprendido y cambiado, y otros que abogan por un diseño inteligente creado por alguien superior que hizo todo cuanto hay, y que es inamovible: es decir, que por más que hagamos todo está ya escrito.. 

Yo estoy más por lo del azar

Joaquín








No hay comentarios:

Publicar un comentario