Quisiera
esta tarde divina de octubre
pasear
por la orilla lejana del mar;
que la
arena de oro, y las aguas verdes,
y
los cielos puros me vieran pasar.
Ser
alta, soberbia, perfecta, quisiera,
como
una romana, para concordar
con las
grandes olas, y las rocas muertas
y
las anchas playas que ciñen el mar.
--Alfonsina Storni--
La melanina es la responsable de dar a la piel esos colores tan vistosos y variados que tenemos los humanos, incluso a las plumas de los pájaros y a las escamas de los peces; también da color a nuestros cabellos.
Pero el color de la piel ha sido
una excusa histórica para menospreciar a millones de personas que
han vivido esclavizados por tenerla oscura, cuando esto es una memez.
El color de la piel es lo que menos nos diferencia unos a otros;
puestos a buscar desigualdades entre razas humanas, las habría mucho
mayores en el tipo de cráneo o el factor de la sangre.
La
coloración de la piel es una simple defensa natural que nos
proporciona la evolución para resguardecernos de los rayos solares.
O todo lo contrario, predisponernos a asimilar más vitamina
D en lugares escasos de sol.
Por cierto, se acaba de descubrir que en poco más de 3.000 años un negro que se fuera a Suecia se volvería blanco (sus descendientes, claro). Antes se pensaba que se necesitaban al menos unos 10.000 años para esa adaptación.
En fin
Joaquín
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