Las comparaciones siempre son odiosas..

¿Quién es? No sé: a veces cruza

por mi senda, como el Hada

del Ensueño: siempre sola...

siempre muda... siempre pálida...

¿Su nombre? No lo conozco

¿De dónde viene? ¿Dónde marcha?

¡Lo ignoro! Nos encontramos,

me mira un momento y pasa:

¡Siempre sola...! ¡Siempre triste...!

¡Siempre muda...! ¡Siempre pálida...!

Mujer: ha mucho que llevo

tu imagen dentro del alma.

Si las sombras que te cercan,

si los misterios que guardas

deben ser impenetrables

para todos, ¡calla, calla!

¡Yo sólo demando amores:

yo no te pregunto nada!

¿Buscas reposo y olvido?

Yo también. El mundo cansa.

Partiremos lejos, lejos

y cual las aves que anidan

en las torres solitarias,

confiaremos a la sombra

de la gente, a tierra extraña;

nuestro amor y nuestras ansias.

(Amado Nervo)

¿Saben cómo fue el primer contacto del hombre y la Luna cuando la pisaron por primera vez? .. Pues no crean que fue como cuando Colón descubrió América, un acto casi místico, religioso, ¡que va!.. Cristóbal Colón hincó la rodilla en tierra y dio gracias a Dios por semejante proeza. Luego ordenó al sacerdote que le acompañaba en la expedición hacer una misa de gracias y desagravio.. El astronauta americano Armstrong nada mas llegar a la Luna lo primero que hizo fue tirar la bolsa de mierda acumulada por él y sus dos compañeros durante los cuatro días que duró el viaje del Apolo XI al satélite lunar.. Y es que, ¡habían cambiado tanto los tiempos!, Con el Apolo XI empezamos realmente a entrar en la época del pragmatismo, y la basura...

Si le tuviésemos que describirle a un chaman o hechicero de cualquier tiempo pasado y de cualquier civilización, lo que es la Luna, con pelos y señales, y le dijéramos la verdad; que ése astro que veían tan lejano, tan luminoso, tan diferente unas noches a otras y al que adoraban como si de un Dios se tratara, es un trozo de roca baldía, que es de tamaño un tercio del de la tierra donde habita, que está de lejos, exactamente 385.000 kilómetros, que es un satélite inerte, vacío, yermo y que incluso ya lo hemos visitado alguna vez, pues, sencillamente pensaría que estamos locos de remate, que eso no se lo cree él ni harto de masticar hojas de coca..

Pocos misterios tiene ya la Luna para nosotros, los terrícolas.. Dentro de nada iremos a ella como ahora vamos a Nueva York.. Lo sabemos todo de su historia, de su nacimiento, de su composición. Por ejemplo que es un trozo de nuestras propias entrañas que nos arrancó un despistado meteorito que impactó contra nosotros hace unos pocos millones de años.. Incluso que la fuerza de la gravedad de su madre patria, la tierra, no le deja escapar cuan madre no deja a su niña volar a su albedrío por miedo a perderla; todo eso y más.. Hay fondos marinos en la tierra, trozos de insondables océanos de los cuales aún sabemos poco, y sin embargo, la Luna apenas alberga ya secretos para nosotros..

Este año pasado, exactamente el 21 de julio se cumplieron 50 años de la primera estancia del hombre en la Luna..Yo lo recuerdo perfectamente aunque no me levanté (mi madre no me dejó) a verlo en televisión aquella mítica madrugada del julio de 1969.. No obstante todos los hemos visto u oído su retransmisión por el gran Jesús Hermida un montón de veces después..

No crean que los más de mil millones de expectantes espectadores, y valga la redundancia, que aquella larga noche estaban ojiplaticos pendientes de la tele lo primero que oyeron decir a Neil Armstron nada pisar la Luna fue aquella célebre frase: “Un pequeño paso para el hombre pero un gran salto para la humanidad”. Eso fue después, realmente lo primero que dijo fue “Houston, aquí base de la Tranquilidad, el águila ha aterrizado” Bueno, realmente alunizado tenía que haber dicho..

Por cierto, ¿sabían que los trajes lunares de los tres astronautas, Armstrom, Aldrin y Collins, pesaban cada uno 84 kilos en la tierra? Lógicamente mucho menos en la Luna al no haber apenas gravedad.. Miren si eran necesarios esos trajes que le preservaban de radiaciones y demás inconvenientes desconocidos en la tierra, que durante el día la temperatura en la superficie de nuestro astro favorito es de unos 200º centígrados, cuando por la noche baja hasta los -150º.. ¡qué barbaridad!.. En fin, de cualquier forma la llegada del hombre a la Luna fue toda una proeza.. Creo que ahora quieren ir otra vez americanos y chinos; aunque, curiosamente, aún hay muchos por ahí que dudan de que el hombre haya pisado alguna vez nuestro inerte satélite..

Joaquín Yerga