martes, 11 de junio de 2019

La vida en sus manos...






Habré de levantar la vasta vida
que aún ahora es tu espejo:
cada mañana habré de reconstruirla.
Desde que te alejaste,
cuántos lugares se han tornado vanos
y sin sentido, iguales
a luces en el día.
¿En qué hondonada esconderé mi alma
para que no vea tu ausencia
que como un sol terrible, sin ocaso,
brilla definitiva, despiadada?
Tu ausencia me rodea
como la cuerda a la garganta,
el mar al que se hunde..
(Borges)


Noticias hay que parten el alma... Suceden solo de vez en cuando aunque quizás más a menudo de lo que nos gustaría... Bien es verdad que el mundo es muy grande, muchos los que lo habitamos y las noticias ciertamente vuelan. Constantemente, a cada momento deben estar ocurriendo sucesos desagradables, terribles tragedias, o tristes fatalidades. Algunas de ellas por su impacto o brutalidad nos llegan a todos aunque uno no esté muy atento.. Sin salir de nuestras fronteras tenemos datos para echarnos las manos a la cabeza...
Ayer fue un día especialmente cruel y prolífico en luctuosos sucesos.. Nada mas poner la radio a primera hora de la mañana ya informaban de un espantoso caso la anoche anterior en Aranjuez; un tipo mató de unos disparos a bocajarro a dos de sus cuñadas y herido a su suegra.. Se estaba separando de su mujer y en un arrebato de celos aprovechó la visita de sus cuñadas y, ¡hala!., tira por la borda de un plumazo sus vidas y también la suya, puesto que se pudrirá en la cárcel..
En Ayamonte, ése bonito pueblo de Huelva y también ayer, un matrimonio de cubanos exiliados que llevaban residiendo en nuestro país desde hace unos años aparecen muertos en extrañas circunstancias.. Según los primeros indicios el marido acabó con la vida de su mujer y luego se suicidó.. Algo habría de celos, infidelidades o separación en ciernes puesto que él escribió una carta de despedida lamentando el triste futuro que le esperaba sin ella..
Pero no acaba ahí la cosa, en Alboraya, un pueblo de la corona metropolitana de Valencia muy cercano a esa capital, una pareja de rumanos aparecen muertos.. El “modus operandis” el mismo de siempre; él mata a ella y luego se suicida; ignoro los motivos pero se los pueden imaginar.. Por cierto, las mujeres asesinadas por sus parejas son ya multitud sin que leyes ni campañas surtan efectos positivos, y es que si tenemos en cuenta que el 70% de ellas son de nacionalidad extranjera, poco efecto, al menos a corto plazo, van hacer las campañas de concienciación cuando son gente recién llegadas y con mentalidades muy machistas...
Pero de todas, la más triste noticia de ayer lunes se dio en un pueblo de Tarragona, Montblanc; una mujer en un cúmulo de desgraciadas coincidencias mató de manera inconsciente a su hijo pequeño dando marcha atrás a su coche. El pequeño se metió literalmente debajo de las ruedas sin que ella se percatara de su presencia.. Y miren que mala suerte... La familia, que procede de un pueblo de Huesca, se van a pasar el fin de semana a un pueblo costero catalán y a la vuelta deciden parar en Montblanc a ver unas ruinas romanas que le habían dicho que eran interesantes.. El coche se le avería y llaman a la grúa.. Acude esta y mientras la madre arranca el coche para subirlo al remolque, el niño jugando se mete debajo y la rueda lo destripa... por más que intentan reanimarlo el niño muere ante la incredulidad y estupor de la madre; ¡sencillamente espeluznante!...
No sé que será de ésa madre a partir de ahora, supongo que lo que le reste de vida un infierno. Si algo malo le puede tocar a uno en la vida tal vez sea lo de ésta pobre mujer.. ¡Y todavía nos quejamos de nuestra mala suerte!.. Evidentemente no son casos homologables éste último y los dos anteriores, tampoco con los que ocurrirán mañana, y otros pasado mañana; lo único que los iguala es la pérdida de vidas humanas de por medio, y tragedia, mucha tragedia...
Joaquín Yerga

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