Hombres necios que
acusáis
a la mujer sin
razón,
sin ver que sois
la ocasión
de lo mismo que
culpáis.
Con el favor y el
desdén
tenéis condición
igual,
quejándoos, si os
tratan mal,
burlándoos, si os
tratan bien.
¿O cuál es más
de culpar,
aunque cualquiera
mal haga:
la que peca por la
paga
o el que paga por
pecar.
(Sor Juana Inés de
la Cruz)
Algunos pasarán de
puntillas, otros algo han oído, pero no le dan importancia, y muchos
si sabrán a qué se refiere cuando vemos en nuestros pueblos y
ciudades, calles o plazas con el rimbombante de nombre de
Independencia..
Claro, que en otros lugares del mundo es un
apelativo muy recurrente, puesto que todos los países alguna vez se
han independizado de otros; sin ir más lejos en el propio Estados
Unidos existe el “Día de la Independencia”, alude a la
independencia de Inglaterra en 1776.. Y no digamos en toda
Hispanoamérica; difícil no ver alguna plaza o avenida dedicada, en
este caso a la independencia de España, en cualquiera de sus
ciudades..
Que yo recuerde, así
a bote pronto, en Zaragoza hay una gran avenida dedicada a esta
guerra, y en Burgos y en Vitoria, en La Coruña, etcétera.. En Madrid tenemos
la hermosa Plaza de la Independencia en cuyo centro se erige
la histórica Puerta de Alcalá.
Por cierto, ¿creen que veremos pronto denominarse
“Avenida de la Independencia” a la Diagonal de Barcelona?..
A la independencia de España, ¡claro!.. ummmm.. no sé, no sé...
Pero..¿Qué fue, qué
pasó en nuestra Guerra de Independencia?.. Pues pasó que
después de la Revolución Francesa en 1789, en la que el pueblo
francés harto de pasarlo mal y de ver cómo los curas, la nobleza y
los reyes se lo pasaban bomba a costa de ellos, se echó a la calle y
se cepilló a reyes y nobles a tutiplén.. Después de ocho o diez
años de jaleo y de darle la vuelta como un calcetín al país en
cuestiones de leyes y derechos, la cosa terminó con una especie de
dictadura (Directorio) a cuyo mandó estaba el general Napoleón
Bonaparte..
Con Napoleón
cambió Europa.. Se metió en guerras con casi todos los países que
rodeaban a Francia y que estaban aun gobernados por reyes y la
nobleza.. A España con una excusa boba nos invadió y colocó al
mando a su hermano José (Pepe
Botellas para castizos y chulapos).. Y es que tenia, el
amigo Napoleón, la querida y familiar costumbre de dejar de mandamás
en los países que conquistaba a algún hermano suyo; tuvo varios..
Aquí en nuestro país
estábamos más atrasados que el culo en esa época.. Nos gobernaba
un rey (Carlos IV) calzonazos y cornudo que solo se preocupaba por
sus chorradas, y como heredero aun pintaban peor las cosas, el felón
de Fernando VII nos esperaba en el trono. El caso es que la
gente, (el pueblo llano ignorante), estaba a muerte con los reyes y,
con la ayuda vital de Inglaterra, logramos echar a los
franceses en cuatro o cinco años.. Sin embargo..
No crean que ganamos
mucho con el cambio.. Los franceses eran ya un pueblo moderno para lo
que había entonces y podían habernos desasnados.. Creían en
ciertas libertades individuales, habían declarado la carta de los
derechos humanos, habían suprimido el poder a los aristócratas y
curas, que no era moco de pavo; nosotros, en cambio, volvimos a la
monarquía más ignominiosa y absoluta, es decir, a los curas, a los
abusos, a la inquisición, al atraso..
Un regusto amargo
quedó en algunos intelectuales con la expulsión de los franceses..
Por una parte era evidente que nos habían invadido y pretendían
hacer de España una especie de colonia de Francia, pero por
otra, con ellos se fueron las ideas modernas y liberales que nos
hubieran venido de perlas.. Y encima tuvimos por 25 años más de
reinado al peor fulano que nos podía tocar en suerte, al tirano,
déspota, bravucón, bestia, egoísta, putero, envidioso, cobarde,
traidor, indigno, bellaco, y felón de Fernando VII, y conste
que me quedo corto..
Joaquín Yerga
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