domingo, 22 de diciembre de 2024

Cara de tonto se me quedó cuando me lo dijo

                                                                                



Sean mis manos como ríos

entre tus cabellos.

Mis pechos como naranjas maduras.

Mi vientre un comal cálido para tu hombría.

Mis piernas y mis brazos sean como puertas,

como puertos para tus tempestades.

Mi pelo como algodón en rama.

Todo mi cuerpo sea hamaca para el tuyo,

y mi mente tu olla,

tu cañada.

---Gioconda Belli---



Entonces ella me escribió en el wasap:

---Déjalo así, mañana lo resolvemos

Yo le contesté que de acuerdo, que mañana hablaríamos.

Me senté en el sofá y encendí la tele, luego volví a coger el teléfono. Ella seguía en línea. Me quedé mirando, pero no apareció la palabra "escribiendo". Yo no iba a dar el brazo a torcer, después de todo no era mi culpa.

Veinte minutos después miré de nuevo el móvil y el "Online" había desaparecido. Me quedé pensando. No sé, una sensación extraña me invadió de súbito. Era como si una voz dentro de mi me dijera: ¡Qué coño haces! ¿Te inquieta saber que ella no está bien? ¿Hiciste lo suficiente? Seguro que está llorando. Con todo lo que la amas: ¿No vale hacer un esfuerzo mayor?

Por un momento imaginé que estaba hablando más conmigo mismo que con ella, y que probablemente ni siquiera iba a dormir por el disgusto. Así que, cogí el teléfono y llamé:

---Cariño, soy un idiota, perdóname---le dije---no mereces dormir mal por la discusión. Si quieres estar furiosa, si quieres resolver mañana lo resuelves, pero hoy, antes de todo, quiero que sepas cuánto me gustas. Te amo porque eres la única persona en quien confío y la única con quien puedo contar.

Ella esperó paciente y a medias mi diatriba, porque enseguida me enseñó los dientes:

---Ni lo siento ni dada, petardo, ¡véte a la mierda!. No sabes cuánto me alegro que me hayas abierto los ojos. Ni se te ocurra llamarme más.

Y cortó.

Bueno, no sé qué deciros.😕😕😕 Dos horas me quedé mirando el móvil absorto, atónito, estupefacto, helado, alucinado, patidifuso, turulato, desconcertado, boquiabierto...

Pero no os preocupéis por mi, ya estoy mejor..




2 comentarios:

  1. Maria Romero Carbonell3 de enero de 2025, 10:15

    Waooo!! mencanta!!...el escrito de Gioconda Belli..me FASCINA 😉 gracias

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