Eso me dijeron..

                                                                                   

  

No te fue fácil la vida, me dijeron..

Te casaste pronto, creo, poco después de lo nuestro.

No volví a saber de ti.

Yo sigo aquí, con mis cosas, pero he madurado.

Apuesto que no me reconocerías por dentro.

Ahora te veo en las redes sociales, ¡tan cambiada!.

¿Sabes? Aún me apareces en algún sueño, pero ya no sufro..

De veras: ¡te agradezco tanto que te dejes ver!..

--Joaquín--

Creemos y con razón que los hombres actuales, en nuestro endiosamiento y soberbia evolución hacia la excelencia humana, estamos exterminando la vida salvaje y el espacio natural de la tierra. Pero ésta aniquilación no es nueva, ¡que va! en cuanto aparecimos allá por el África oriental hace 250. 000 años, ya comenzamos la destrucción.

Las cifras que hemos modificado los hombres desde que tenemos uso y razón histórica apabullan. De todos los grandes mamíferos que había en el mundo sólo sobrevivieron apenas un 30%, ya antes de inventar la agricultura. Así que no se mortifiquen tanto por lo que hacemos ahora..

En Alemania y sus antiguos bosques, que fue el lugar donde se ideó lo de Caperucita Roja, y el Lobo feroz (de allí eran sus autores, los hermanos Grimn) apenas quedan unas docenas de lobos. Pero, eso sí, tienen la friolera de 8 millones de perros domesticados.

Tan sólo unos 35.000 leones subsisten en libertad en la tierra, a cambio tenemos 600 millones de gatos. 700.000 búfalos salvajes frente a 1.500 millones de vacas. O unos cuantos millones de pingüinos y la friolera de 20.000 millones de gallinas. En fin, como ven, estamos dejando la cosa un poco descompensada..

Joaquín