Pasó tiempo de lo nuestro,
pero los rescoldos de aquel amor
aún burbujean en mi corazón.
A los dos, casi, se nos pasó la vida,
aunque de muy distinta manera.
Tú feliz en tu cuento de hadas,
enamorada y ajena a mis inquietudes
Yo endulzando con tus recuerdos
el tiempo que vil se me escapa por
entre los dedos de mis circunstancias..
--Joaquín--
La Torre Eiffel, de París, es el monumento más visitado del mundo. Además de famosísima, la torre va indisolublemente asociada a la imagen de la ciudad. De hecho pocas capitales tienen una imagen-logotipo tan conocida como lo tiene París con ésta torre de 300 metros de altura..
Por cierto, ¿sabéis que el mismísimo Gustave Eiffel quiso construirla en Barcelona unos años antes, con motivo de la Exposición Universal de 1888?. Pues sí, y el Ayuntamiento de la ciudad, con menos vista que un pez frito, no quiso. Le pareció contraproducente, qué os parece..
Y eso que aún no estaba la ínclita Ada Colau de alcaldesa, que tampoco lo hubiera consentido, ni los indepes actuales.. ¿Os imagináis la torre Eiffel en Barcelona junto a la Sagrada Familia y la arquitectura de Dalí? Ufffff, qué pelotazo, cualquiera aguantaba entonces a los catalanes 😅😅😅
Por cierto, tampoco a ningún parisino de la época le gustó ese mamotreto de hierro en la ciudad. Bueno, hasta tal punto fue así, que hubo un famoso periodista que echaba pestes de ella en su periódico..
Un día se le vio desayunando en la cafetería de la segunda planta de la torre.. Sorprendidos, algunos transeúntes le preguntaron qué hacía allí, después de ponerla a parir...
--¡Es el único sitio de París donde no se la ve!--contestaba muy cabreado
En fin, algo así hubiera sido el revulsivo perfecto para levantar la economía de cualquier ciudad. Acordaos del Guggenheim de Bilbao, la Giralda de Sevilla o la Alhambra de Granada.
Joaquín.
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