miércoles, 27 de noviembre de 2019

Cualquier tiempo pasado fue, igual...




Tú vives siempre en tus actos.
Con la punta de tus dedos
pulsas el mundo, le arrancas
auroras, triunfos, colores,
alegrías: es tu música.
La vida es lo que tú tocas.

Porque has vuelto los misterios
del revés. Y tus enigmas,
lo que nunca entenderás;
son esas cosas tan claras;
la arena donde te tiendes,
la marchas de tu reloj
y el tierno cuerpo rosado
que te encuentras en tu espejo
cada día al despertar,
y es el tuyo. Los prodigios
que están descifrados ya .

Y nunca te equivocaste,
más que una vez, una noche
que te encaprichó una sombra
-la única que te ha gustado-
Una sombra parecía.
Y la quisiste abrazar.
Y era yo..
--Pedro Salinas--


No piensen que todo lo que hacemos y tenemos hoy en día está recién inventado, nada de eso. Miren: hace un par de miles de años las mujeres romanas ya usaban anticonceptivos para no quedar embarazadas. Aunque, eso sí, estos eran todavía un poco rudimentarios.. Uno de los más usados era introducirse una bola de lana empapada en vino para taponar la entrada del cuello del útero. Claro, que realmente éste sistema, aún sin proponérselo, tuvo que tener dos finalidades; por una parte evitar embarazos no deseados y por otra, qué duda cabe, que el hombre se lo pasara pipa mientras practicaran, por ejemplo, el sesenta y nueve.. Supongo que para compensar, él debería haberse untado, al menos, miel en semejante parte.. Y ya para rematar la faena de mi grosería; conociendo la falta de higiene de entonces, estos métodos vendrían “que ni al pelo” para camuflar el hedor que desprenderían todas esas zonas pudendas..
Es cierto, nada nuevo hay bajo el Sol; todo está inventado ya. Si, créanme: modas, tendencias, costumbres, todo ha pasado ya alguna vez por este mundo y en otras épocas.. Recuerdo, incluso, haber leído que ya Sócrates, el famoso filósofo griego del siglo IV a.c ¡Ahí es nada!, dijo una vez que los jóvenes de su tiempo ya no eran como los de antaño, es decir, como los de su juventud, porque desobedecían a sus padres, sólo querían divertirse y apenas les interesaba la guerra ¿les suena? ¿A que está calcado con los de ahora 2.400 años después?.
Durante el Imperio Romano, en el siglo I d.c, el emperador Augusto llegó a prohibir tajantemente esos anticonceptivos de los que hablábamos antes y otros muchos que se utilizaban con asiduidad, ¿y saben por qué?.. Alarmados estaban por la baja natalidad de las mujeres romanas.. ¿Se imaginan? O sea, que ponemos el grito en el cielo creyendo que esto de la baja natalidad es super-novedoso y resulta que hace 2.000 años ya pasaba ¿Curioso, no?.. No lo duden, la vida son ciclos, sólo cambian un poco los medios.. El Imperio Romano se vino abajo porque la gente relajaron sus costumbres; se hicieron unos sibaritas de mucho cuidado; sólo subvenciones querían, buena vida y mucha corrupción, y claro aprovecharon los bárbaros que ya llevaban años metiéndose poco a poco dentro de sus fronteras hasta que al final lo destruyeron.. No sé por qué, pero me da la nariz que en España estamos inmersos en un proceso parecido. ¿No creen?..
Según mi punto de vista, lo que está pasando ahora y lo que hacemos, en nada difiere de lo que hacían nuestros antepasados hace ya cientos o miles de años, sólo cambian la modernidad de los utensilios que usamos y la agilidad de las nuevas comunicaciones.. Es más, cualquier individuo de hace cientos de años era bastante más mañoso que nosotros, por no decir inteligente.. Tened en cuenta que antes uno sólo lo tenia que hacer todo.. Levantar su casa, cuidar su ganado, cultivar su campo, y todo ayudado con unos rudimentarios útiles.. Y de la mujer ni os cuento; apañarse con la numerosa prole y gestionar la casa con tan escasos medios; no me digan que no hacía falta mucho cuajo y extrema voluntad.. En contraposición, hoy en día apenas sabemos hacer nada, para todo necesitamos especialistas, que sólo saben de lo suyo, por cierto.. En fin, lo dicho, no alardeemos de modernidad y de sabelotodo que ya estaba todo inventado..
Joaquín Yerga

No hay comentarios:

Publicar un comentario