La profecía..

                                                                                   

Te desnudas igual que si estuvieras sola

y de pronto descubres que estás conmigo.

¡Cómo te quiero entonces

entre las sábanas y el frio!

Te pones a flirtearme como a un desconocido

y yo te hago la corte ceremonioso y tibio.

Pienso que soy tu esposo

y que me engañas conmigo.

--Sabines--

--Por cierto, Isabel-- --le decía a última hora de aquella tarde de diciembre mientras, sorprendidos por su belleza, contemplábamos las luces de Navidad de la calle Alcalá-- -¿sabrás que las épocas de zozobra son propicias para todo tipo de vaticinios sobre del futuro, y que la mayor parte de las veces son de carácter catastrofistas, no?.. Aún se oye hablar de las profecías de Nostradamus-- --le recordé--

--¡Ummmm, y quién no ha oído hablar de ellas, Joaquín!. Pero la verdad es que no sé exactamente qué vaticinó, ¡se ha hablado tanto de aquellas profecías!-- --me endilgó muy segura de sí misma--

Estábamos en plena Navidades de este año pasado, a punto ya de acabar el año, y hablábamos del venidero 2022 tan complicado que se nos presentaba, con el ómicron haciendo de las suyas y algunos nubarrones más sobre el horizonte de todo el planeta--

--Pero sí sabrás que Nostradamus fue un boticario francés el siglo XVII que escribió un libro “Las Profecías” en el que pronosticaba una serie de hechos a suceder en el futuro-- --le indiqué a mi amiga-- -Mucha gente se las creyeron a pies juntillas. De hecho para algunos, cosas graves que están a punto de ocurrir ya las predijo él-- --le informé en plan enteradillo--

--Lo siento, Joaquín pero no me creo nada. ¿Cómo va un hombre a predecir nada cinco siglos despues de su muerte?-- --dudó ella-- -yo creo que son ganas de marear la perdiz, vender libros y llenar espacios televisivos-- -sentenció--

--Pues tú no te lo creerás-- --perseveré-- -pero hay constancia de que atinó con unas cuantas. Mira las que, según muchos expertos, acertó de lleno: La sangre de los justos será derramada en Londres. Y acertó porque en el año 1666 hubo un gran incendio en ésa ciudad en el que murieron miles de personas.. Cerca de las puertas y dentro de dos ciudades, habrá dos azotes como nunca jamás se ha visto.. Dicen los expertos nostradamundistas que se refería a las ciudades de Hiroshima y Nagasaki cuando quedaron destruidas por las dos bombas atómicas. ¿Qué te parece?--

--Sigo sin creerme nada, Joaquín, esas predicciones pueden referirse a muchas otras cosas--

--Vale, vale, tú veras, incrédula-- --le señalé entre risas-- -También hay algunas profecías que generan duras, aunque mucha gente lo tiene claro. Fíjate: El gran rayo cae de día, mal y predicho por portador postulado.. ¿Predijo la muerte de Kennedy?.. O ésta otra.. Cinco y cuarenta grados el cielo arderá, fuego acercándose a la gran ciudad nueva.. ¿Sabía ya del atentado de las torres gemelas de Nueva York?..  En fin, tú sabrás Isabel, pero blanco y en botella--

--¡Venga ya! Hace falta mucha imaginación para deducir todo eso-- se rio a carcajadas-- --supongo que no pretenderás asustarme, jajaja--

--Allá tú, pero toma nota de lo que tenemos para este año, según las profecías de Nostradamus-- --le hice observar-- -Mira: Bajo el clima babilónico opuesto, grande será sin derramamiento.. ¿Nos espera en este 2022 terribles sequías, aguaceros, incendios?.. Pues por ese camino vamos, Isabel.. La muerte repentina del primer personaje, será cambiado y pondrán a otro en su reino.. ¿Morirá un personaje de primer orden?. ¿Un presidente de gobierno? ¿Un artista importante?. Ya veremos.. Alrededor de la Gran Ciudad habrá, habrá soldados alojados en campos y suburbios.. ¿Alude a la guerra en Ucrania? ¿Invasión de Kiev por parte de los rusos?. En fin, pues esto está a punto de suceder. Lo dicho, Isabel, hasta el rabo todo es toro, esperemos a que termine este 2022 y veamos si Nostradamus era un mago de verdad o un fantoche-- --concluí sonriendo--

--Bueno, bueno, cuando acabe el año te lo diré, Joaquín. Tira para adelante que llevamos aquí mirando una hora. Está preciosa la calle con sus luces y guirnaldas, pero aún nos queda mucho ver--

Veíamos la parte más espectacular de la Navidad madrileña, el trozo de calle que va desde Cibeles hasta la Puerta de Alcalá, pero teníamos intención de llegar a Serrano y Goya. Habíamos oído estaban muy adornadas éste año, y allá que fuimos..

Joaquín