Mirándome
las manos
veo en la faceta del
diamante de mi anillo,
reflejarse tu
cara, mientras piensas
que divago o
medito
o sueño... He
descubierto,
por azar, este medio tan
sencillo
de verte y ver tu corazón,
que es otro
diamante puro y
limpio.
Cuando me muera, déjame
en
el dedo este anillo.
--M. Machado--
Está de moda... Si aún no lo habéis hecho no sois nadie o no estáis al día. He de advertiros que yo no lo he hecho ni creo que lo haga, aunque nunca se sabe; me refiero al Camino de Santiago.
Caminos de Santiago hay varios, como sabéis, el más famoso el Francés, pero está el del Norte que va por la costa, el Portugués o el de la Vía de la Plata, que procede de Andalucía.
Desde que en el año 820 descubrieron la supuesta tumba del apóstol Santiago el Mayor y enseguida lo designaron patrón del Reino de Asturias, han sido millones los peregrinos que se han acercado hasta Santiago de Compostela procedentes de medio mundo; unos 200.000 al año, ¡ahí es nada!.
950 kilómetros tiene el Camino Francés, el fetén, y se divide en unas 32 etapas. Es decir, a unos 30 kilómetros diarios corresponden.
Por cierto, si es por andar, ahí tenéis los 22.500 kilómetros para hacerlo en la mayor distancia de la tierra que podemos hacer sin necesidad de pisar agua, se trata de ir desde la ciudad de Magadán en Rusia hasta la Ciudad del Cabo, en Sudáfrica.
Si os ponéis farrucos y decidís hacer este pseudo-camino africano, lo dividís en jornadas iguales al Camino de Santiago (30 kilómetros al día) y en apenas 750 días (dos añitos de nada) os ponéis en Sudáfrica; ¡vamos, pecata minuta!..
Eso sí, en vez de la tumba del apóstol Santiago, es la de Mandela la que encontraréis al final, que tampoco está mal.
Para volver os recomiendo el avión.. 😂😂😂
Joaquín
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