jueves, 13 de enero de 2022

De todos mis pecadillos, este jamás se lo conté a un cura en confesión

                                                                                 



Si el sexo no fuese lo más importante de la vida, el Génesis no empezaría por ahí.

--Cesare Pavese--


Masturbación ¡¡Oh!!, ¡¡vade retro, Satanás!! ¡Dios, qué pecado más nefando para la iglesia! ¡Cuantas penitencias sufridas por llevarla a cabo! ¡Cuántos padrenuestros rezados para salvar su alma el osado masturbador!.. Y todo porque..

¿Y si yo os dijera que ésta manía persecutoria se debe a un error de interpretación de la Biblia, os lo creeríais? Pues sí, creéroslo, porque por ahí van los tiros.. 

Fijaos:

La idea de masturbación u onanismo (satisfacerse sexualmente uno mismo) se debe a Onán, hijo de Judá (patriarca bíblico)..

Resulta que cuando murió su hermano, su padre, Judá, ordenó a Onán que se acostara con su viuda (era la tradición judía que obligaba a preñar a la mujer de su hermano si éste moría sin descendencia).

Onán obedeció, pero el tipo puso en práctica el "coitus interruptus", es decir, derramó el semen en el suelo. Se ve que no quería competencias hereditarias.. 

Dios castigó a Onán y le hizo matar por semejante osadía.. Tristemente, la Iglesia, tal vez por desconocimiento (dudo que a sabiendas) consideró a Onán como masturbador e hizo de éste gesto un pecado abominable.

¿Y qué mas deciros? Pues, que por culpa de ésta ojeriza los adolescentes cristianos lo hemos pasado fatal y con unos remordimientos terribles, además de apechugar con la amenaza constante de todo tipo de plagas sobre nosotros si persistíamos en el asunto.. 

Obvio deciros que la mayoría hacíamos oídos sordos estas intimidaciones y, por supuesto, nada de contárselos al cura en la confesión, Ufffff.

Por cierto, el término Masturbación proviene de las palabras latinas Manus (mano) y Stuprare (profanar). 

En fin

Joaquín



 




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