Ella, que todo lo sabe..

                                                                                       

 

¿Cómo es posible? ¿De qué se vale, la tía, para estar al tanto de todo, de dirigir nuestra vida hasta el más mínimo detalle?.. Me refiero a nuestra mente, la muy cobardona, porque tira la piedra y esconde la mano.. Por eso que permanece en retaguardia, en segunda fila podríamos decir porque, ya sabéis, está recluida entre los poderosos barrotes de los huesos craneales y sin salida al exterior..

Pero ella se las sabe todas, ¡la muy ladina! Se vale de los cinco sentidos para dirigir nuestra vida desde su oscura y recóndita guarida.. Fijaos:

La vista le avisa, el oído le cuenta, el olfato le dice, el tacto le sugiere, y el gusto le sabe. Estos cinco vigilantes, como patrullas de reconocimiento, la mantienen bien informada de todo lo que ocurre en el exterior, como si de un periscopio se tratara. Así, nada se le escapa a la tipa.. Luego en la sombra, ella, la mente, gobierna y dirige con mano de hierro..

Joaquín