Amiga...
Momentos tendré
en los que recordaré
los besos que no
me diste.
Tiempo habrá de
sufrir la felicidad
que me negaste.
Hoy sólo quiero
llorar las risas
que me perdí.
Tal vez las horas
y los días suavicen
el poder de tus
abrazos en mi memoria.
Quizás diluya tus
promesas
en los confines de
mi corazón.
Pero hoy sólo
quiero llorar.
--Joaquín--
Fíjense bien en lo que
les voy a contar a continuación. No se lleven las manos a la cabeza son cosas que está ahí y con un mínimo esfuerzo se entiende perfectamente. Lo he sacado de un libro que está muy de moda últimamente.. Miren..
¿De dónde sacamos los seres humanos que tenemos que ser buenos y solidarios con el prójimo? ¿Quién ha dicho que lo guay, que lo humanitario y correcto es luchar por la igualdad entre todos los seres de la tierra? ¿Dónde pone que no debe haber ricos y pobres? ¿Está escrito en el imaginario frontispicio de la Naturaleza que es injusto que haya gente que muera de hambre, de frío, o en las guerras?..
¿De dónde sacamos los seres humanos que tenemos que ser buenos y solidarios con el prójimo? ¿Quién ha dicho que lo guay, que lo humanitario y correcto es luchar por la igualdad entre todos los seres de la tierra? ¿Dónde pone que no debe haber ricos y pobres? ¿Está escrito en el imaginario frontispicio de la Naturaleza que es injusto que haya gente que muera de hambre, de frío, o en las guerras?..
Que yo sepa la
ciencia y la biología, (que algo de credibilidad tienen) dice que
las personas no fueron creadas, sino que hemos evolucionado a partir
de un simio. La evolución se basa precisamente en la diferencia y no
en la igualdad . Cada persona posee un código genético diferente, y
desde su nacimiento se halla expuesta a diferentes influencias
ambientales. Esto conduce al desarrollo de cualidades diferentes que
llevan consigo diferentes probabilidades de supervivencia. Es decir,
que nuestro cometido en la vida y naturaleza es exclusivamente
sobrevivir y perpetuar la especie cueste lo que cuesta. El resto: los
ideales, la religión, la democracia, los dioses, la libertad, la
solidaridad, el capitalismo, el comunismo, etcétera. son mitos que
nos hemos inventado los hombres por nuestra cuenta y riego. ¿Quizás
como forma para no despedazarnos unos a otros? Tal vez, pero nada
más..
¿No será que todos
estos ideales del buenismo, la justicia y la solidaridad provengan de la
idea de la creación? Es decir, que hay un Dios bueno que nos exige
ser buenos. Pero claro, a éste Dios nuestro y a todos los que hemos tenido desde el neolítico lo hemos inventado nosotros, los hombres.
Que yo sepa todavía no ha bajado ninguno del cielo y se ha hecho
presente. O sea, que debemos creer en unas ideas que se le
han ocurrido a otras personas anteriormente..
Hace 4.000 años la
ciudad más grande del mundo era Babilonia. Allí una vez hubo
un rey, Hammurabí, que nos es conocido por una serie de leyes que
dictó y que están marcadas en una piedra que se conserva en el
museo del Louvre de París. Algunas de las sentencias de esas leyes
dicen que los hombres superiores tenían derecho a maltratar a los
inferiores y a los esclavos, si fuese menester, y eso estaba
aceptado por aquella sociedad, porque así lo quería su Dios,
entonces llamado Enlil.
Tres mil quinientos
años después de Hammurabí, en 1776, cuando se redactó la
Declaración de Independencia de los Estados Unidos, ya había
mejorado la cosa. Ahora se dice en algunos capítulos que: “todos
los hombres son iguales y son dotados por el Creador (es
decir, su Dios) de ciertos derechos inalienables como
la vida, la libertad o la búsqueda de la felicidad”. Pero resulta
que los negros no contaban para esos primeros Padres americanos como
Franklin, Jefferson o Adams. Segun sus leyes naturales estos tenían que ser esclavos. Incluso ellos, y el tan venerado Washington tenían docenas de
esclavos negros a su servicio. ¡Vaya, vamos prosperando!..
Hoy en día aún vamos
mucho más lejos y nos inventamos, en nombre Dios, de la dignidad
humana o de otros entes supremos, unos derechos nuevos, incluso el de
los animales y las plantas.. En fin, si no digo que no esté bien,
pero sepan que no hay derechos divinos, todo lo inventamos nosotros.
El Homo Sapiens, que somos nosotros no tiene derechos
naturales, de la misma manera que no los tienen los chimpancés o las
hienas.. Ya vemos cómo la ciencia y la biología (demostrada) nada
dice de la igualdad, todo lo contrario.
Y digo yo, si la
gente se diera cuenta de que los derechos humanos sólo existen en la
imaginación ¿No habría el peligro de que nuestra sociedad se
desplomara? Decía Voltaire, el gran pensador francés, “Dios
no existe, pero no se lo digáis a mi criado no sea que me asesine
por la noche”..
Joaquin
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