Pruebas de su existencia..

Inútil es tu gemido;

no la mueve tu dolor.

La muerte cerró su oído

a todo vano rumor.

En balde tu boca loca,

la suya quiere buscar:

Dios ha sellado su boca:

¡ya no te puede besar!

Las manos inmaculadas

le cruzaste en su ataúd,

y estarán siempre cruzadas

¡ya es eterna su actitud!

¿Y su alma? ¿Por qué no viene?

¡Fue tan mía...! ¿Donde está?

Dios la tiene, Dios la tiene:

¡Él te la devolverá

quizás!

--Amado Nervo--

Uno de los grandes misterios de la vida que he ansiado siempre descubrir y por el que hubiera dado cualquier cosa por esclarecer definitivamente, era saber si Jesucristo existió realmente o todo se queda en lo que nos dijera los cuatro evangelistas, y San Pablo...Si, ya sé que es tema muy recurrente y que no sólo a mi me inquieta, sino que, a muchos, la vida de Jesús les seduce especialmente, pero...

Según todo lo leído al respecto, todo me demostraba que no había pruebas concluyentes del paso de Jesús por este mundo; lo que no quiere decir que no hubiera existido, sino que no había evidencias históricas escritas que lo atestiguara.. Sin embargo, según el autor del libro que ando leyendo, "La historia del cristianismo", parece ser que se puede deducir su existencia histórica por algunas menciones expresas y serias a su vida y a su obra..

Sabemos de Jesucristo por el Nuevo Testamento, basado exclusivamente en su vida y enseñanzas, y sabemos de él por San Pablo y otros padres de la Iglesia, incluso los evangelios apócrifos, esos que no acepta la iglesia oficial, se explayan bien sobre Jesús, pero, ¡claro! estos estaban escritos por cristianos y qué van a decir ellos de su fundador y maestro...Pero, nada contaba la historia; nada escribieron de él los historiadores romanos de la época porque, son estos los que de manera más o menos neutral relataban las cosas que pasaba realmente en el Imperio Romano, al que pertenecía, por cierto, Palestina en aquella época..

La mayoría de los historiadores y escritores romanos vivían en Roma y desde allí escribían sus crónicas, y podíamos pensar que fuera lógico que nada supieran de un hombre que nació en un extremo del Imperio, en Belén, que predicaba unas enseñanzas un poco raras a las multitudes y que murió crucificado en Jesrusalén, eso es cierto pero, hubo también un historiador, muy importante, Flavio Josefo, que vivió en Palestina, y precisamente en la misma época que Jesucristo, y éste jamás lo mencionó.. En esto se ha basado siempre la historia real para dudar de la existencia de Jesús.

Parte de las crónicas de Flavio Josefo, (judío pero historiador y general adepto a Roma), parece ser fueron manipuladas o borradas con el tiempo, primero por los propios romanos a su conveniencia y después a favor de Jesús por los cristianos, con lo que nos quedamos con las ganas de saber la verdad; bueno, pues según estudios recientes de su obra, Josefo si mencionaría a Juan el Bautista, al que consideraba un radical judío contrario a los romanos y también alude al asesinato judicial de Santiago por el sumo sacerdote Ananías en el año 62 d.c. Y dice de Santiago que es hermano de Jesús, ése al que llaman Cristo y que era un sectario.. Si se demuestra esto último, junto a la mención que hace Tácito (reconocido historiador romano) cuando en el año 64 escribe sobre el incendio de Roma y se refiere a la detestable superstición del cristianismo, y a su jefe, ese “Crestus” su fundador, que fue crucificado en tiempos del emperador Tiberio por el procurador Poncio Pilatos, o a la referencia que hace también ese otro gran historiador Suetonio, cuando escribe que, desde el año 41 al 54 d.c. los judíos estaban siendo expulsados de Roma porque constantemente promovían disturbios instigados por “Crestus” ¿pensaba que aún vivía Cristo?... Pues si todo se comprueba la cosa cambia radicalmente; habría pruebas palpables de la existencia de Jesucristo, lo que, de alguna manera hará cambiar la historia..

En fin, ya les digo, la no alusión a Jesucristo por parte del Flavio Josefo, que vivió y escribió todo lo que pasaba en Palestina en tiempos de Jesús, hizo siempre dudar de su existencia, o al menos que fuera la cosa tan insignificante que no mereciera la pena siquiera mencionarlo.. Ahora con la nuevas versiones cambia el panorama.. Seguiremos esperando más datos..

Joaquin Yerga