jueves, 19 de diciembre de 2019

Érase un padrastro indecente





¡Ah, de la noche trágica me acuerdo todavía!

¡El ataúd heráldico en el salón yacía,

mi oído fatigado por vigilias y excesos,

sintió como a distancia los monótonos rezos!

Tú, mustia, yerta y pálida entre la negra seda....

La flama de los cirios temblaba y se movía,

perfumaba la atmosfera un olor de reseda...

un crucifijo pálido los brazos extendía,

¡y estaba helada y cárdena tu boca que fue mía!

--José A. Silva--


Humbert tenía cuarenta y dos años y le gustaba escribir. Había publicado ya un par de libros con diferente éxito, lo que le permitía más o menos vivir de ello.. Pero el tipo tenía un pequeño defectillo: le gustaban tanto las chicas jóvenes (a ser posible púberes) que se había convertido en una obsesión para él.. 

Buscaba casa. Un día visitó una de alquiler. No le agradó mucho por ser la casera una pelma y facilona viuda que casi se le insinúa nada más verlo, pero al ver a su hija (una niña) tomando el sol en la terraza le hizo cambiar de parecer. Se quedó.

La chica lleva por nombre Dolores, pero todos la llaman Lolita. Es una niña traviesa y juguetona, pero ingenua, le dio mucha confianza a Humbert; cosa que éste aprovecha para dar rienda suelta a sus instintos más perversos.. Poco a poco, el tipo, se va ganando la complicidad de la chica.

La madre de Lolita, ignorante del obsceno deseo sexual del tipo por su hija, le ha propuesto matrimonio. Él la detesta a rabiar, pero acepta por no separarse de la niña, a la que acosa sexualmente ya casi sin recato, pero...

Ufffff, la madre lee durante un desliz de Humbert su diario. En él se explaya a gusto.. Cuenta con pelos y señales su obsesión por la niña y los progresos que va haciendo para acostarse con ella. La pobre madre ha salido despavorida a la calle dando gritos, con tan mala suerte que un coche que pasa por allí la atropella.. Murió en el acto..

Al tipo se le abre el cielo de par en par. Como padrastro que es, se queda como único tutor de la niña.. Enseguida se va en busca de Lolita que acababan de meterla en un internado de jovencitas, no muy lejos.

Se las ha apañado para quedarse esa primera noche con ella en la misma habitación de un motel. La niña le cuenta que ha tenido su primer encuentro sexual con un chico de su curso.. De madrugada los dos, padrastro e hija, acaban haciendo el amor.

La noche del motel ha sido la primera de una larga temporada de amor y sexo entre ambos que ha durado dos años.. Han hecho viajes, recorrieron el país de punta a punta haciéndose pasar por padre e hija normales y corrientes, y así ha burlado un romance a todas luces indecente; él tiene ya 45 años y ella apenas catorce.

Pero...

La cosa acaba mal.. Ha pasado un tiempo, Lolita tiene ya 17 años y se ha casado con aquel joven. Ahora es pobre y con un hijo. Muere al dar a luz a un segundo niño. El padrastro languidece lejos, en California, tiene una depresión de caballo. Añora a la niña. 

Por cierto, este argumento está basado en una historia real, versionada en novela por el gran escritor ruso Navokov.

Y digo yo que aún sigue habiendo muchas Lolitas en el mundo, inocentes y desgraciadas. Y también muchos tipos como Humbert, pervertidos y sin escrúpulos..

Joaquín




No hay comentarios:

Publicar un comentario