Este es el huerto, y en la arboleda,
en el recodo de aquel sendero,
ella me dijo con voz muy queda:
Tú no comprendes lo que te quiero.
Junto a las tapias de aquel molino,
bajo la sombra de aquellas vides,
cuando el carruaje tomó el camino,
gritó llorando: ¡Qué no me olvides!
--Fco. A. de Icaza-
Una revista femenina norteamericana realizó una encuesta entre mujeres famosas proponiendo la siguiente pregunta: ¿Qué es lo primero que miras en otra mujer?..
--Su manera de hablar –respondió la escritora Agatha Chistie.
--Sus manos –dijo la cantante de ópera María Callas.
--Su marido – prefirió decir la actriz americana Zsa Zsa Gabor, famosa por sus descaros y numerosos romances.
Los actores de cine han dado mucho de qué hablar, siempre, sobre todo en temas de carácter sexual.
Ya desde los inicios del cine muchos de los actores del momento hacían de las suyas. En pocas profesiones se ha dado un porcentaje tan alto de homosexuales, lesbianas o playboys.
Charles Chaplin, uno de los pioneros del cine, se casó cuatro veces y todas con jovencitas, pero tuvo el tío docenas y docenas de amantes.
De Errol Flynn, conocida era su vida de excesos de todo tipo, sobre todo con el opio y el alcohol. Éste guapo actor, uno de los que más éxitos amorosos tuvo entre el personal femenino, murió a los 50 años totalmente consumido. El médico que le hizo la autopsia se echó las manos a la cabeza extrañado de que hubiera vivido tanto, teniendo los órganos tan destrozados por el alcohol.
Mae West, esa rubita tan apetitosa, se hizo famosa, además de por su trabajo de actriz, por lo desvergonzado que era en su lenguaje, también en sus actos. Tiene en su haber una buena cantidad de frases picantes que salieron de sus labios. Mirad, algunas no tienen desperdicio:
Un día al terminar un rodaje agotador le dijeron que había cinco hombres esperando en su puerta..
--Estoy cansada, manda uno para casa --–respondió ella.
Y esto contestó en una entrevista:
--El amor es como el póker, si no tienes una buena pareja, más vale que tengas una buena mano.
Bailando una noche bien pegaditos con Cary Grant, le susurró al oído:
--¡Oye Cary, llevas pistola en el bolsillo o es que te alegras de verme!--
En fin..
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