Nunca un soplo de
amor llevó una brizna
a mi corazón.
Jamás un beso, ni
caricia alguna
me impregnó con
sus mieles sabrosas.
Hoy, sin
embargo, desespero por tus besos.
Has corrido las
cortinas de mi alma
y un esplendoroso
universo de sentimientos
se exhibe ante mis
ojos..
--Joaquín--
Aconteció
un día en la historia de la humanidad en el que Dios, a
pesar de haber creado a su imagen y semejanza a los hombres, éstos
se le descarriaron. Y tanto llegó a enojarse con ellos que amenazó
con acabar con todos. Pero luego recapacitó y decidió salvar de la
extinción al único hombre justo que moraba en la tierra, Noé, y con
él a su familia.
Porque de todos es
sabido que Dios creó el mundo y decidió dejar a su albedrío a los
humanos. Aunque éstos ya desde los inicios de los tiempos empezaron
a hacer de las suyas, ¡se desmadraron!.
Hasta un punto tal alcanzó la indignación de Dios, que por su cabeza pasó enviar sin más dilación un Diluvio
Universal sobre la tierra y acabar con todos de una vez. ¡¡Harto estaba, el hombre!!..
Sin embargo se acordó Dios de Noé. Le buscó, y le habló:
--¡Noé, Noé, estoy indignado con los hombres!. ¡Quiero acabar con todos!. ¡Sólo a ti y a tu familia salvaré; eres el único hombre honesto sobre la tierra!..
Escuchó Noé a Dios con atención y se mostró dispuesto a cumplir sus deseos.
--¡Noé!-- siguió hablándole Dios-- --tienes que construir un Arca de madera de 150 mts. de largo, por 25 de ancho, por 15 de alto y meter en
ella a una pareja de todos los animales que habitan la tierra. Te doy quince días de
plazo; después comenzarán los aguaceros.
Noé se las compuso
bien y obedeció como un buen hijo, a pesar de que tenia ya el buen
hombre la avanzada edad de 600 años; eso sí, recién cumplidos. Y diluvió durante cuarenta días y cuarenta noches.. Las
aguas subieron quince metros y el Arca estuvo a la
deriva durante un año..
La
tripulación del barco, es decir, Noé, su mujer y sus tres hijos
(Cam, Sem y Jafet) andaban ya desesperados. Había pasado un año y las aguas no bajaban. Soltaron una paloma, pero está
regresó al poco tiempo (señal que no encontraba tierra donde
posarse). Volvieron a repetir la acción varios días después y,
¡Eureka! aquella regresó con una rama de olivo en su pico. La cosa
mejoraba...
A la tercera intentona la paloma ya no volvió (señal de tierra cercana). Sin mas
dilación Noé se dispuso bajar a tierra firme. Una vez terminada la
faena del desembarco y la posterior posesión de las nuevas
tierras, Dios le prometió que nunca jamás volvería
a enviar otro Diluvio sobre los hombres. De momento lo ha cumplido...
Por cierto, a Noé (Noah en
hebreo) se le adjudica la invención del vino; él fue el primero que
plantó una parra. Después lo elaboró con sus propias
manos, y pies.. También fue el primer humano que agarró
una excepcional cogorza, porque...
Borracho como una cuba se tumbó completamente desnudo en
la esterilla de su tienda y fue su hijo Cam quien, abochornado de ver
así a su padre, lo tapó con una manta.
Pero al despertarse
Noé (imagino que con una resaca de padre y muy señor mío), la
emprendió con su nieto Canaán, (hijo de Cam), llamándole de todo
menos bonito y maldiciendo su linaje. Y es aquí donde comienza la
discordia entre los entendidos. ¿Porqué maldice a su nieto y no a
su hijo que fue el que tapó sus vergüenzas?. En fin..
Hasta hace muy poco
tiempo aún se buscaban restos del Arca de Noé por alguna zona del
cercano oriente. Incluso una expedición reciente al monte Ararat en
Turquía, (que es el más alto de la zona), aseguraba (hay fotos)
haber encontrado restos de maderas en su cumbre que pudieran tratarse
de la famosa Arca. Todavía andan algunos enfrascados haciendo
cálculos.
Por cierto, según el Génesis, todos los
hombres y mujeres descendemos directamente de Adán y Eva,
pero si nos fijamos detenidamente nuestro verdadero padre es el
vejete y borrachín Noé. Él, y su familia, fue el único hombre que quedó vivo
tras el Diluvio, ¿no les parece?.. Y su mujer, Naamah, nuestra madre, ¡claro!..
Joaquín Yerga
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