El asesino que se hacía pipí en la cama

                                                                                 

Y mientras reconstruyo todo el pasado y pienso

en los instantes frívolos de mi divagación,

se me va despertando como un afán inmenso

de sollozar a solas y de pedir perdón.

--Enrique González--

Bueno, esto de hacerse pipí en la cama de niño mayorcito era y es relativamente frecuente, y lo sabéis. ¿Quién no ha tenido en la familia un meón?.. 

Claro, que si luego se entera uno de que hacerse pipí en la cama hasta muy tarde, pudiera ser signo de desarrollar una personalidad asesina en el futuro, la cosa cambia, ya no da risa, ¡a que no!.. Pero no os asustéis, se tienen que dar más condicionantes para ir descuartizando a la gente así como así..

Y es que resulta que mearse en la cama de niño es una particularidad que tienen los asesinos en serie, además de las otras dos: haber sufrido abusos durante la infancia y una mala relación con sus madres. A estos tres nexos principales que tienen en común los asesinos en serie le llaman los psicólogos, “La Triada Homicida” 

Y qué curioso, asesinos en serie suelen tener coeficientes mentales muy superiores a la media, Por cierto, ¿Sabéis de algún asesino en serie que sea mujer? Apuesto que no, ¿Y sabéis por qué? Pues porque las chicas asimiláis mejor que los hombres los factores estresantes que incitan al asesino, y en vez de atacar a nadie os castigáis a vosotras mismas a través del alcoholismo, la prostitución o el suicidio. 

¡Benditas seáis las mujeres, que os machacáis de infinitas maneras en vez de asesinar a nadie!.

¡Ah!, y otra cosa: ¿el criminal nace o se hace? .. ¡Se hace!, sin dudarlo, y todos tienen patrones comunes que se repiten en cada uno de ellos. Sobre todo el que os he señalado antes y que la mayoría ha tenido, ¡¡una mala relación con sus madres!!.

En fin, relajaos los meones que sois unos angelitos..

Joaquín