Quiero aprovechar esta noticia para hablar un poco sobre el Real Madrid y del fútbol en general. Bien es verdad que este deporte está sobredimensionado, la genialidad, el talento o la destreza que practican los futbolistas no está en consonancia con los desmesurados sueldos que ganan, ni con la cantidad enorme de dinero que mueve este deporte. Por supuesto todo va en función de la cantidad de gente que lo siga.
Si no entramos a valorar el más que discutible dinero público que se ha destinado a mantener equipos en categorías inviables, por querer hacerlos abanderados de ciudades o pueblos, o las ingentes cantidades invertidas en campos de fútbol, que de otra manera seria imposible de realizar por los propios equipos, si hacemos la vista gorda en este apartado, todo lo demás estará justificado, es la ley del mercado.
Hubo un tiempo en que se decía que la religión era el opio del pueblo y en parte no faltaban razones, esa cita se podría equiparar ahora sustituyendo religión por fútbol.
Veo razonable, ¡cómo no ¡ que a una gran proporción de población de medio mundo nos guste más o menos este deporte tan universal, con el tiempo se ha convertido en una pasión que aglutina multitud de sensibilidades, anhelos, fanatismo o deseos, para unos y también tabla de salvación para desesperados, aburridos o ignorantes, que de todo hay.
Por una parte y volviendo al tema monetario, el que los partidos de fútbol tengan garantizado un público fiel y numeroso hace que se genere un gran despliegue publicitario y por lo tanto circule mucho dinero a su alrededor, es la ley de la oferta y la demanda; son empresas privadas y eso permite los grandes sueldos de los que hablamos antes, además en este mundo del balompié al albur de los beneficios que produce, pululan multitud de interesados y dependientes: críticos, periodistas, abogados etc. Todas las cadenas de radio, tv, periódicos etc. disponen de un departamento de deportes, en el que casi siempre se habla exclusivamente de futbol y que suele ser el más esplendido en personal.
Si de la parte emocional o social del fútbol hablamos, la fuerza que tiene, difícil es de igualar por cualquier, no ya deporte, sino sector de la sociedad. Se ha convertido en asunto cotidiano de conversaciones y debates más o menos transcendentales, a veces traspasa lo ordinario y desborda el sentido común por lo desmesurado.
El fútbol entretiene y canaliza hacia él, desengaños, frustraciones y fracasos, que de no ser por él perturbaría quizás la convivencia pacífica de algunos pueblos o incluso países. Otras veces actúa como nexo de unión de pareceres y gustos parejos de personas que llegan a sentirse parte de algún todo o ente común por el que luchar o compartir.
Este deporte tan globalizado no entiende de razas ni culturas, pues tan seguido y adorado es en países tan diversos como Inglaterra, Alemania o Italia por poner ejemplos de países desarrollados en Europa; Camerún, Nigeria o Egipto en el tercer mundo, o Argentina y Brasil en países emergentes. Es más yo aplaudiría las bondades de este deporte en los países humildes como escape o consuelo de la juventud ante la falta de otras perspectivas más positivas y en las clases bajas o medias de las naciones prosperas como compensación y alivio ante la rutina y mediocridad diaria.
Aquí en España, el deporte rey ocupa una importante parcela de la información y entretenimiento diario. Casi todos llevamos en nuestro corazón a nuestro equipo del alma con el que nos divertimos o sufrimos, unos más que otros, cada domingo por la tarde; bueno esto ya ha cambiado, ahora entre las distintas competiciones <<disfrutamos >> de partidos prácticamente toda la semana.
Como todos sabemos aquí, en nuestro país, se lleva la palma en las preferencias de los aficionados dos grandes equipos, Real Madrid y Barcelona y que me perdonen algunos, a años luz del siguiente. El Madrid es el club de referencia del 25% de aficionados del país, al Barcelona le siguen el 19% A mi entender esta situación se viene dando desde los años sesenta. En España, debido a factores culturales y económicos pocos equipos eran capaces de acumular entidad suficiente como para militar en la división de honor y rivalizar con los clubes antes mencionados. A los del norte del país les faltaban población y por lo tanto afición suficiente y a los del sur les faltaban riqueza. Tan solo el Athletic de Bilbao tuvo posibilidades pero las fue perdiendo a medida que triunfaba el nacionalismo en su entorno. En esa tesitura, la mayoría de los amantes del fútbol en España tuvo que decantarse por alguno de los dos equipos que podrían representar un papel digno aquí y en Europa.
El Madrid, es verdad que era el equipo mas simpático del régimen anterior y eso contribuyó a su grandeza, el Barcelona por contra aglutinaba una gran parte de los sentimientos opuestos y por eso parte de la izquierda asentó sus reales en cuanto a gusto, en el equipo de la ciudad condal. Esto por supuesto es aplicable a los aficionados de fuera de las respectivas ciudades, es decir del resto del país, porque los nativos de la tierra es comprensible su entrega al equipo de su ciudad. Ahora al Barsa, con el tiempo puede que le pasé lo que al Bilbao hace unas décadas, a fuerza de politizar al equipo y encumbrarlo como emblema del independentismo, se transforme en <<menos que un club>> y los aficionados se circunscriban exclusivamente a la región de Cataluña, con la consiguiente pérdida de peso y de importancia. Me alegro de haberme decantado ya desde la infancia por el Madrid, porque ahora quizás sea el único equipo con entidad suficiente que de verdad represente a España a nivel mundial .Ojala el atletico y otros puedan crecer y así rivalizar con ellos.
Joaquin Yerga
29/01/2014