En las manos del otro palpitaban sus manos;
en el brazo del otro se apoyaba feliz...
Y me envolvió una niebla de recuerdos lejanos,
y sentí que sangraba mi vieja cicatriz.
--J. A. Buesa--
Ayer la vi.. De casualidad. Fue en la discoteca España. Sonaba Gloria, de Umberto Tozzi, lo recuerdo. Apuraba yo en la barra un cubata de ron. Me miró al pasar. El corazón me arrancó a galopar. Hacía días que esperaba ese momento.
Me adelanté. Le sonreí. La quise hablar...
¡Qué iluso!, llegué a creer que entró en el baile por mí, para volver a verme. Me dijo que no, que otra vez será.
¡Que otra vez será! ¡Qué os parece, que otra vez será!... Me hundí. Jodida noche aquella. De sobra sabía yo que el verano pasaría, que nunca más la tendría entre mis brazos, que nunca volverá a ser mía.. Pero...
¡Cómo olvidarla, dios mío!.. ¡Cómo olvidar su pelo, cómo olvidar su aroma si aun navega en mis labios el sabor de su boca!..
Regresé a la barra. Lloré. Pedí otro cubata y, entre copa y copa, ebrio ya de alcohol y desamor, me puse a pensar:
"Cada vez que una chica morena, delgadita, con ojos inmensos, se cruce en mi camino, recordaré mi triste destino. Cada vez que pase por el parque Zurbarán y vea a parejas comiéndose a besos o cogidas de la mano, me acordaré de aquel verano..
Me di la vuelta. Allí la vi, al fondo de la pista bailando y riendo con otro. Me marché a casa. No recuerdo haber pasado una noche peor..
¡Que otra vez será! ¡Qué os parece! ¡Qué otra vez será!..
Y yo sé que nunca más.
L. Favio / Joaquín
P. D. Escrito en mi diario del día 25 de agosto de 1979
Es precioso 😍
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