lunes, 20 de julio de 2020

Es cuestión de tomar medidas..




El día que me quieras tendrá más luz que junio;
la noche que me quieras será de plenilunio,
con notas de Beethoven vibrando en cada rayo
sus inefables cosas,
y habrá juntas más rosas
que en todo el mes de mayo.
(Amado Nervo)


Siento entrar tan bruscamente en faena, pero acabo de leer una noticia al respecto y se me ha ocurrido, ¿como es posible que el falo masculino, sí, lo siento, el pene, que ha sido durante milenios venerado y representado en multitud de figuras de piedra, en bronce, en madera, etcétera. lo hayamos ocultado después como si se tratara de algo pecaminoso e indigno?. Pues sepan que ya desde la prehistoria la gente de entonces lo tenían como el dador de vida; que lo es, por cierto..
Imagínense en aquellos tiempos prehistóricos cuando a los rudos y semi-salvajes hombres de entonces a los que todo les sorprendía y apenas nada sabían; bueno, sí, se sabía que gracias al esperma y después de hacer el amor a una mujer, ésta quedaba embarazada y de ahí nacían los niños. A nadie ha de extrañar entonces que al falo y a la vagina femenina la reverenciaran como algo sagrado; y no es para menos.. De hecho en muchas civilizaciones han tenido al miembro viril como un dios y a la vagina como diosa de  la fertilidad..
Se han encontrado figuras del pene masculino de hace más de 30.000 años. Acuérdense que los griegos tenían al dios Priapo representado en un falo descomunal, como dios de la fecundidad, o Shiva, ése dios indú al que se sigue presentando con un enorme miembro llamado Lingam. Los japones aún celebran durante el mes de marzo el Festival del Pene; según creen ayuda a las mujeres a quedarse embarazadas..
Bien es verdad que durante el cristianismo, y aún más con el catolicismo, base de nuestra cultura, la relación Iglesia-Sexo se tornaron difíciles. Incomprensiblemente las autoridades eclesiásticas vieron todo lo relacionado con el pene y sobre todo con el sexo femenino como algo pecaminoso. Decía San Jerónimo (padre de la iglesia) que el sexo era una perversidad. Él pensaba, incluso, que el matrimonio era sólo un grado menos que la fornicación. A su juicio el sexo era sucio en un sentido literal y concreto.
Miren, y hasta San Ambrosio, otro gran teólogo y también padre de la Iglesia sugirió que el curso más apropiado para una mujer debía ser la virginidad.  “Una mujer virgen podía redimir el pecado que sus padres habían cometido al concebirla”. Ésta barbaridad llegó a decir.. En fin..
Pero como nosotros no tenemos empacho en hablar de falos ni de tamaños de estos, pues mirad qué medidas han tenido los penes de algunos suertudos  y conocidos famosos y que me apetece mostraros..
John Dillinguer, el enemigo público número uno de los Estados Unidos. Fue el tipo más buscado del FBI por ladrón y asesino. Cuando murió acribillado a balazos por la policía, el entonces famoso director del FBI, Hoover, ordenó cortar y disecar su pene; tenía la nada despreciable longitud de 31 centímetros..
Tampoco se quedaba atrás la verga del guapete actor Errol Flinn. Media 33 centímetros. Conocida es la anécdota del día en el que, desnudo, se puso a tocar el piano con su cosita en una desenfrenada fiesta de alcohol y sexo.. Frank Sinatra (otro que tal baila) tuvo que ser uno de los tipos más afortunados de su tiempo. Además de sus intensos ojos azules, buena figura y mejor voz, tenía un miembro viril de 34 centimetros, ¡nada menos!.. Con esos aperos no me extraña nada que las mujeres se volverán locas por él..
Pero no todos los dueños de penes grandes están muertos, ahí tenemos a Liam Neeson, ese gran actor que interpretó la película la Lista de Schindler. Una de sus novias llegó a decir que su pene era un arma de destrucción masiva, mide 40 centimetros, ¡Dios mío, y yo con estos pelos!..
Para terminar y no aburrirles más ni provocarles insanas envidias, me queda por contarles lo que le mide a un actor de cine porno, muy famoso y afanado él, Long Dong Silver, (su nombre lo dice todo), "42,72 centímetros del ala" le mide al gachí la cosa. Con semejante atributo se puede hacer cualquier cosa, incluso servir de yisque para bajar los chorizos colgados del "doblao"... Les recuerdo que la media en España suele ser de unos 14,5 centímetros. En fin. Mejor me pongo con otro tema meno ofensivo; lo digo por las comparaciones..
Joaquín..

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