Amiga:
Y los días llegan, y pasan,
y uno aprende a vivirlos
sorteando las trabas
del tiempo.
No, no es fácil ser y estar.
Perdona si me agarro a la boya
de tus risas para no hundirme
en la mediocridad de mis circunstancias.
--Joaquín--
Si mis neuronas no estuviesen exhaustas por este insufrible calor y me hicieran calcular mal por ello, creo recordar que los meteorólogos habían previsto un verano muy caluroso en España. Bien, pues de momento y a más de la mitad de julio nos estamos salvando de esas calientes previsiones..
No obstante creo que en los
próximos días las temperaturas se ajustarán más a esos duros
vaticinios. Por ejemplo, hoy daban para Sevilla 44º, 43º para
Córdoba o 38º aquí en Madrid. Ni les cuento los 41º de Badajoz
o los casi 40º de Zaragoza. En el norte, como siempre, se salvan de la
quema y Oviedo, San Sebastian o Santander, disfrutarán de unos
maravillosos 24 graditos de nada..
Estos días porque estamos
preocupado y absorbidos con lo del virus, sino, apuesto que ya
estaríamos con la matraca del cambio climático, a pesar de que le oí decir ayer a un experto que ahora estaríamos en una época interglaciar, es
decir, que en unos pocos miles de años volveremos a los hielos
perpetuos en gran parte de nuestras montañas. También a una bajada
considerable del nivel de mar, pero ¡claro! nosotros ya no lo
veremos.
En cuanto al clima patrio hay
muchos malentendidos; tópicos imposible de desterrar de nuestra
mente porque se introdujeron en ella hace muchos años, y es más
fácil perseverar en ellos que hacer el esfuerzo de informarse
debidamente y corregirlos. Miren.. ¿Cuántos españoles saben que
llueve la misma cantidad de litros por metro cuadrado en Londres, que
en Cádiz o Sevilla ¿otra cosa es
el número de días de lluvia al año, que es esto gana Londres por
goleada. Siguiendo con las precipitaciones ¿Saben muchos
compatriotas que también en cantidad de litros caídos en un
año, Barcelona y Córdoba están
igualadas? Me temo que no. Pues sepan también que en las ciudades
del norte de nuestro país (la llamada España verde) se dan más
precipitaciones que en cualquier ciudad europea, por muy central o en
el norte que estén situadas, exceptuando si acaso, zonas
de Escocia y Noruega.
Otros datos curiosos. En San
Sebastian o Pontevedra llueve el doble que en cualquier capital
europea, ya sea París, Praga, Berlin o Roma.. La ciudad (capital de
provincia) con más jornadas tormentosas, Teruel, (casi
treinta al año). La que padece mas días de niebla, Oviedo (más
de cien). La que tiene de media las temperaturas más bajas, seguro
que en esto acertamos todos, Burgos. Por cierto, va
para allá un chiste malo.. En
Burgos “no hay cuatro estaciones como en el resto; sólo hay dos,
el invierno y la del tren”..
Como no me ha llamado la
providencia por el camino de los chistes. Esto lo dejo para mi amigo
Antonio que los cuenta de maravilla, finiquito el asunto con dos
curiosidades más: La capital con más días bonitos
(despejados) Huelva (160). La que tiene el
récord de días con lluvia (en esto levantamos todos el dedo) San
Sebastián. El lugar que más
llueve de la península, la sierra de Grazalema, en
Cádiz, hay años que supera los 3.000 mm de lluvia..
Por terminar con este tema tan
recurrente del tiempo (más apropiado para conversación de
vecinos) la naturaleza aun nos desborda por mucho que hayamos
prosperado en ciencias y tecnología. En cualquier momento y en
cualquier lugar una simple gran erupción volcánica hace más
estragos en el clima que los 8500 millones de terrícolas
polucionando este precioso planeta. En fin.
Joaquín Yerga