¿Existe riesgo de
balcanización en España ¿ Es decir, que llegue un día en que la desintegración se haga efectiva. Es
posible, al paso que vamos, cualquier cosa relacionada con nuestra unidad puede
suceder.
¿Como hemos llegado a
este punto tan critico ¿ Todo el mundo sabe y opina ya sobre la consulta para la independencia de Cataluña.
Según los nacionalistas en un par de años con consulta o elecciones anticipadas
esta región será soberana.
Qué decir del País Vasco, poco a poco los
partidos políticos de ámbito nacional van perdiendo apoyos en la población y
los nacionalistas moderados o radicales del lugar manejan el chiringuito a su
gusto, en poco tiempo y aunque ETA ahora
no mate se apuntaran al carro del referéndum para su propia independencia, ¡Un
territorio con dos millones de habitantes! ¡A donde van!Estos dos casos anteriores como todos sabemos, son los más “históricos”, lo digo por la antigüedad en dar” la lata”, pero aún tenemos otros de menor enjundia. En Galicia por ejemplo el Partido Nacionalista Galego, acapara ya el 25% de las adhesiones en el electorado. En Baleares, los partidos de izquierda son más nacionalistas que proletarios y en Canarias, quizás debido a la lejanía e insularidad, también está surgiendo un partido, Coalición Canaria, nacionalistas ellos, que incluso tiene capacidad de gobernar las islas y no olvidemos la Comunidad Valenciana, aquí tal vez hay menos independentistas, pero hay tendencias; la izquierda también tiene veleidades nacionalistas y con fuertes lazos fraternales con su vecinos catalanes. No tardarían estos en atraérselos para su causa, por lo menos a los de la zona norte de la comunidad.
En Navarra, la cosa no está mucho mejor; la franja noroeste, fronteriza con el País Vasco son tan euscaldunes como estos últimos y aproximadamente el 25% les votan, a estos y a grupos afines, así que bonito panorama.
Por último tenemos Ceuta y Melilla, de dudoso futuro a largo plazo, aquí se da un caso insólito, son los únicos que perteneciendo a zona de reivindicaciones varias se manifiestan efusivamente españoles, claro que la alternativa no es muy halagüeña para ellos.
¿Porqué en España se da este desapego tan grande a una unidad que es común en la mayoría de países¿ A mi entender lo abrupto del terreno y la dificultad endémica de comunicaciones entre nosotros, a lo largo de siglos inició el tema. Se mantuvieron dialectos y costumbres en algunas regiones que en un medio llano más suave no hubiera ocurrido; luego, diferentes eventualidades hizo que sobre todo en Cataluña y el País Vasco se fuese afianzando un nacionalismo egoísta y elitista que entre todos: partidos políticos, autoridades del régimen anterior etc. unas veces por cobardía y otras por oportunismo fuimos agrandando.
El resto de regiones díscolas siguió sencillamente la senda que entre todos le marcamos a las dos primeras, es decir viendo que con partidos nacionalistas fuertes sacaban buenas tajadas económicas, sociales o políticas, pues se apuntaron al festín y ahora nos encontramos multitud de partidillos nacionalistas o independentistas que se miran el ombligo y solo les interesa su pequeño territorio en detrimento del conjunto del país.
También tenemos el plus de progresismo y modernidad que le hemos dado a los nacionalistas, aunque estos fuesen racistas como el PNV, sobre todo por parte de la izquierda, quizás con la falsa creencia de que estos lucharon contra Franco por la tarea tan loable de implantar la democracia en España, cuando todos sabemos que lo hicieron por sus propios intereses, buscando siempre lo de la cita aquella: “Cuanto peor para España mejor para ellos”.
¿Ahora qué hacemos ¿ el asunto se nos ha ido de las manos, a ver quien tiene agallas de recomponer la unidad. Pecamos de inocentes y estuvimos acomplejados cuando creímos que dándonos plena autonomía a las regiones y más a las históricas se solucionaría el eterno problema de los nacionalismos. Cometimos la torpeza de concederles la gestión de asuntos tan vitales como educación y cultura y ahora treinta años después, a los menores de esa edad les han educado en la creencia de que son diferentes al resto de españoles y con una historia distinta a la nuestra.
El partido socialista propone reformar la constitución y hacer de nuestro país un estado federal; yo dudo que los independentistas, crecidos, acepten nada que no colme sus ansias de emancipación total, además este hipotético modelo sugiere aceptación de una constitución central con poderes básicos y luego, eso sí, que cada región se autogestione, con sus propias leyes con lo que habría una cierta igualdad entre todas, cuestión que no aceptarían de ninguna manera. El partido popular se remite a la constitución actual que no permite ni consultas ni mucho menos independencia de nadie, pero con una mayoría más que probable de independentistas y el poder autonómico en sus manos a ver como se ataja el tema. El partido comunista se manifiesta a favor de la consulta, cosa inédita en una agrupación de izquierda que por su propia naturaleza ideológica debería estar a favor de un estado central fuerte redistribuidor de riqueza y sobre todo sabiendo que lo que aquí se dirime en el fondo es que los catalanes no quieren repartir ¿cómo le explicaran a los andaluces, principales receptores de ese dinero catalán , que ellos, <<el partido>>, favorecen a los más ricos con esa postura.
El resto de partidos, al ser minoritarios, no cuentan mucho en el panorama político actual, quizás la incógnita de UPyD , que según los apoyos que obtengan en próximas convocatorias electorales , al ser partidarios estos de mano dura y recentralización, podrán influir más o menos.
A mí me duele que entre los efectos colaterales del poder de los nacionalismos esté que a fuerza de menospreciar nuestros símbolos nacionales y nuestra constitución, que los han estado presentando como carcas y antidemocráticos, incluso parte de nosotros nos lo hemos creído y muchos no se sienten representados por ellos y sin embargo vemos como progre sus ikurriñas (inventada por un racista antiespañol) y sus senyeras (creada sobre una falacia).
España es un país de los más avanzados del mundo en todos los terrenos. Tenemos unas leyes garantistas que no permite injusticias de ningún tipo. Aquí las cárceles son “balnearios”, lo dijo un mafioso de Europa del este el otro día; jueces que se decantan casi siempre por los más débiles (aunque a nosotros nos pueda parecer lo contrario), periódicos libres dispuestos a exponer a la población cualquier atisbo de corrupción, abuso o inmoralidad y aunque pueda parecer de risa, una separación de poderes.
Podemos estar orgullosos de España y su democracia, aunque ahora la economía no acompañe demasiado y no debemos dejarnos llevar por falsos cantos de sirenas que lo que intentan es sacar provecho de nuestra confusión e ingenuidad.
Tendrá que llegar el día, puesto que ya no se puede dar marcha atrás, en el que todos los españoles, representados en los partidos políticos decidamos que hacer con nuestro país. Si hay que reformar la constitución, hagámoslo y busquemos una España en la que quepamos todos, pero hay que ser consciente que el problema a resolver es el territorial , de lo demás, podemos estar satisfechos , mas o menos.
Joaquín
Yerga
15/02/2014